- Te amo mi hermosa Julieta, jamás dejaré de hacerlo y nunca, nunca, dejaré de esperar a que aparezcas, aunque sea en mis sueños. Nunca olvides, que tú eres mi Julieta y yo soy tu Romeo. ¡TE AMO Y JAMÁS DEJARÉ DE HACERLO! - Ross me entregó una carta en el último abrazo que nos dimos, llorábamos los dos y no aguantábamos la idea de estar separados, ni siquiera con una calle en medio. Nuestro amor duraría para siempre aunque físicamente no podamos estar juntos.
(7 años después (2014))
No volví a ver a Ross Brown desde aquel día, lo extrañé, lo esperé y jamás lo olvidé. Continué con mi vida, terminé mis estudios en la secundaria y había sido becada en la Universidad de Leyes, tuve que mudarme a Los Ángeles sola para poder estudiar mi carrera y comenzar a trabajar. Stacey se había mudado a New York para estudiar y continuar los negocios que sus padres habían planeado para ella. Mis padres se habían separado, papá ahora vivía con tío Daniel en la granja con él, para ayudarlo aún más. Mis hermanos habían empezado una gira con su banda por el país, mi novio actual era el vocalista, se llamaba Michael, pero prefería que le dijeran Mike.
Almorzé en un pequeño restaurante cerca de la oficina porque luego debía volver al trabajo, ya faltaba poco para las vacaciones. Casi escupo la bebida cuando recibí ese mensaje en mi celular.
"Sé que esto es informal, que no debería ser así. Pero ¿quieres casarte conmigo? Mike."
Se avecinaba mi respuesta, intenté no dudarlo pero lo hice y finalmente respondí: "Tienes razón, es informal. Acepto. ¿Cenarás conmigo esta noche?" Sonó mi celular nuevamente: "Pasaré por tí a las 9, ¿te parece? Ponte elegante, no necesitas ponerte linda, ya lo eres." Reí ante su respuesta y terminé mi ensalada para volver al trabajo.