Capítulo 32.

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Erika POV

Estábamos en el salón, ya nos habíamos duchado y yo me encontraba sentada al lado Marco mientras acariciaba mi pelo mojado. Lea se encontraba sentada en el sillón individual haciendose una trenza y Marcel en ese momento bajaba las escaleras sin camiseta y con una toalla sobre la cabeza.

"¡Venga que nos vamos de fiesta!" Gritó nada más llegar al salón.

"Yo con esas pintas no voy contigo ni a la vuelta de la esquina." Dijo Marco.

Marcel sacó la lengua a Reus y se quitó la toalla de la cabeza.

"Os voy a llevar a los mejores sitios de Ibiza, va a ser genial."

Miré a Lea que no estaba por la labor, y la verdad es que yo tampoco. Salir de fiesta suponía cámaras, periodistas y eso no me gustaba.

"Si no hay más remedio..."

Lea se levantó del sofá. Era casi la hora de cenar así que tocaba arreglarse.

Apoyé mi mano en el respaldo del sofá y me impulsé para levantarme, pero la mano de Marco rodeó mi cintura tirandome hacia él. Colocó su otra mano en mi mejilla y me besó.

"Ahora si te puedes ir."

Cada vez que me besaba me hacía la chica más feliz del mundo.

Lea agarró mi mano y subimos hasta el dormitorio.

"Si no vas a salir me lo dices ahora, no pienso quedarme a solas con ese tío." Dijo Lea señalando la puerta. "Y te lo dijo en serio."

"Marcel es buena persona." Contesté cruzando los brazos. 

"Claro, como no va detrás de tí."

[...]

Cenamos un par de pizzas en la casa y en cuanto acabamos terminé de maquillarme y arreglarme el pelo. No quería ir destacando ni quería llamar la atención. Me puse unos pantalones negros ajustados y una camisa blanca. Unos tacones negros y una americana a juego. Me alisé el pelo y dejé que Lea me maquillase. Ella en cambio se puso un top blanco una falda larga de color azul oscuro, no era muy fanática de los tacones así que se puso unas sandalias y se dejó el pelo suelto. Una de las cosas que más envidiaba de Lea era su pelo, tenía el pelo liso pero a la vez unas ondulaciones que le quedaban genial. Iba guapísima.

Bajamos las escaleras y Marcel y Marco nos esperaban en la entrada de la casa.

Encontré la mirada de Reus y vi como se humedecía los labios mientras me miraba de arriba abajo.

"¿Quieres que me peleé con alguien?" Me preguntó agarrando mi mano. "Estás increíble, aunque te queda mejor el bikini."

Rodé los ojos e iba a observar su ropa cuando agarró mi mentón haciendo que subiese la cabeza. Me plantó un beso sin dejar que reaccionase.

"Tu vas más guapa que ella." Escuché decir a Marcel a Lea. "Estás preciosa."

No lograba entender porque Lea no le daba una oportunidad. Marcel era caballeroso, amable, simpático y guapo. Lo tenía todo.

Tal vez el defecto es que no era Hummels.

[...]

Llegamos a la zona de discotecas y Marco me ayudó a bajarme del taxi. 

La música se mezclaba entre discoteca y discoteca y a pesar de que era temprano algunas personas ya iban borrachas.

Pude notar como mis piernas empezaban a temblar y rápidamente agarré la mano de Marco. Él la apretó fuerte y tiró de mi hacia uno de los pubs. Nos saltamos toda la cola que había y entramos sin problema.

Vidas Cruzadas. « m.r »Donde viven las historias. Descúbrelo ahora