Vidas Cruzadas. « m.r »

Capítulo 16.

Marco POV

Escuchamos un ruido en el pasillo del complejo pero no le hicimos caso. Le di un empujón a Erik y salí de allí para poder ver a Erika.

Pero habíamos llegado tarde, demasiado tarde. El partido había terminado y solo pudimos ver la celebración del equipo donde Nadja se encontraba abrazada a una chica de pelo largo y negro. Busqué con la mirada a Franz, mi madre y Leon para llegar hasta ellos, pero la primera que ví fue Erika, que aunque se encontraba aplaudiendo no parecía muy contenta.

Subí las escaleras de las gradas para hasta ellos pero nada más levantar la vista Erika no estaba. Salimos a la calle cuando Nadja y Erik se acercaron a nosotros agarrados de la mano.

"Nadja." Franz le saludó y después le tendió la mano a Erik. "Erik, cuanto tiempo sin verte." Fulminé a Erik con la mirada y crucé los brazos esperando a que se largara de allí. "Enhorabuena Nadja, increíble como siempre."

"Muchas gracias." Respondió Nadja sonriendo.

"¡Erika!"

Todos nos giramos y vimos a Erika llegar con las manos metidas en los bolsillos de sus vaqueros.

Su hermano se acercó a ella y esta le susurró algo en el oido que no logré a escuchar. Me acerqué a ella pero en un rápido movimiento me esquivó.

"Han jugado muy bien." Dijo mi madre.

"Nos podemos ir ya, estoy cansada."

Erika ni siquiera miró a Nadja y Erik que aún se encontraban allí. Franz se despidió de ambos y los cuatro se fueron en el coche de mi madre.

No había entendido muy bien el gesto de Erika, pero era muy posible que se hubiese enfadado por no haber llegado a tiempo al partido. Y todo por culpa del idiota de Erik...

Lo volví a mirar con mala gana y me alejé de ellos.

Solo pude escuchar la voz de Nadja llamándome.

[...]

Erika POV

Le terminaba de contar a Lea el partido. Le conté cada detalle y todo lo vivido con Karla, Lea también la conocía. Estaba incluso más contenta que yo y me pidió disculpas por no haber ido conmigo. Eso me recordó a...

Cuando terminé de hablar con ella bajé al salón y me encontré con Manuela.

"Cielo, voy a preparar una tarta para Marco, ¿me ayudas?"

"¿Una tarta?"

"Ay, con lo del partido se me olvidó contartelo." Manuela entró en la cocina y yo le seguí. "Hoy es su cumpleaños y vamos a ir a comer a su casa."

Demasiada información en tan pocos segundos. ¿Hoy era el cumpleaños de Marco? ¿Se iban a comer a su casa?

"¿Te vienes verdad?"

Me quedé callada y agaché la cabeza. No quería ir. Me daba igual que fuese su cumpleaños pero no quería ir a verle. Aún me dolía lo que había dicho de mí, y no pensaba darle el gusto de tenerme allí como una idiota felicitandole.

"La verdad es que no puedo." Mentí. "He quedado con Lea, luego le llamaré." Me sentí mal por Manuela porque ella no tenía la culpa de tener un hijo tan idiota. "Pero si quieres puedo ayudarte."

Nos pasamos el resto de la mañana haciendo la tarta, y la verdad es que no quedó nada mal. La hora de irse, para los demás estaba llegando así que me tocó a mi escribir en la tarta el; Feliz Cumpleaños Marco.

"Bueno, nosotros nos vamos." Dijo mi padre despidiendose de mi. "Luego nos vemos."

"Adiós, pasadlo bien."

Me despedí de ellos y volví al salón de donde no pensaba moverme en todo el día.

[...]

Marco POV

Después de toda la comida, la tarta, y el café nos quedamos un rato charlando. Habían venido toda mi familia, mis hermanas con mis cuñados, mi sobrino, mi padre, mi madre, Leon, pero me faltaba alguien. 

Me faltaba Erika.

Me disculpé ante todos y salí del salón. Cogí el móvil y llamé a Erika, ya que Franz me había dicho que había quedado con Lea para ir a comer.

"¿Sí?"

"Erika." 

"¿Qué quieres?"

Me quedé en silencio y me sorprendí por la manera de la que acababa de hablarme.

"Me han dicho que habías quedado con Lea para comer. Pero esta noche voy a celebrar una fiesta, estás invitada, y Lea también."

"Lo siento, tengo planes."

"Toma nota de la dirección de mi casa por si puedes pasar..."

"No hace falta, no voy a ir." Respondió. "¿Algo más?"

¿Qué le pasaba? ¿Seguía enfadada por lo de la carrera?

"Eh, no..."

"Vale, adiós."

Colgó y me quedé mirando el móvil un rato.

¿Qué estaba pasando?

[...]

No me quitaba de la cabeza a Erika, no sabía porque se había comportado así conmigo y quería averiguar el porque.

La fiesta ya había comenzado y habían venido casi todos los invitados, entre ellos casi toda la plantilla del equipo, entre ellos Erik. Mario también había llegado hacía un par de horas antes y no se despegaba de mi.

"¿Se puede saber que te pasa?" Me preguntó Mario.

"Nada."

"Marco, te conozco muy bien, y no nací ayer, ¿qué ta pasa?"

"¿Me haces un favor?" Mario arqueó las cejas. "Necesito que me cubras, ¿podrás?"

"¿A donde vas?"

"¿Lo harás o no?"

"No tardes."

[...]

Erika POV

Me encontraba sentada en la mesa del jardín con el móvil entre las manos. Tenía seis llamadas perdidas de Marco. Pero me daba igual. Manuela y mi padre se encontraban dentro de la casa y mi hermano había salido de fiesta con sus amigos.

De pronto escuché un ruido procedente de la parte delantera de la casa. 

Me giré y dejé el móvil en la mesa. Sobraba decir que yo era demasiado miedica. No me gustaba escuchar ruidos extraños por la noche. Sentí un escalofrío y vi una sombra aparecer por el jardín.

"Erika." Vi una luz procedente de un móvil.

Retrocedí unos pasos hasta que me dí cuenta de quien era.

"¿Qué haces aquí?"

Marco se encontraba frente a mi. Llevaba un polo de color negro con unos pantalones ajustados. Una gorra negra y unas zapatillas blancas.

Se suponía que tenía que estar enfadada con él, gritarle y pedirle explicaciones por la conversación que tuvo con Erik en los pasillos de mi Instituto.

Pero así vestido era muy difícil.