Al rojo vivo [KidLaw]

C A P í T U L O 31

CUENTA ATRÁS EN EL RELOJ

-¡Torao, te acaba de decir que seáis novios!

-Ya lo he oido.- dijo sonrojado.- ¿Qué te hace pensar que yo quiero ser tu novio?

-Lo sé. Nunca lo he tenido del todo claro pero tengo fe en que me quieres.

-Torao ama a Kid.

-Luffy, calla.- se acercó al pelirrojo con parsimonia, sonriendo como un sádico. -¿Tiene fe?

-Sí. Y veo el futuro.

-¡Eso es increíble, Kid!

-¿Cuál es el futuro que estás viendo ahora mismo?

-Me dirás que sí, me besarás y partir de ahora viviremos juntos. Y tendremos una bonita noche.- Le giñó un ojo.

-¿Tú crees?

-Ajá.

-Pues te equivocas. -Law aprovechó la cara de confusión de Kid y estrelló su rodilla en la entrepierna de pelirrojo. Este cayó al suelo aullando mientras se agarraba la zona adolorida.

-¡Serás cabrón, Trafalgar!

-Sí quiero, Kid.

-¡Dijo que sí, Kid! ¡Dijo que sí! - Luffy daba saltos de alegría. Un par de niños se habían parado al escuchar el alboroto, y Law se encargó de sacarles el dedo corazón, como solía hacer cada vez que se agobiaba. Kid se levantó y agarró a Trafagar de la mano.

-Dime que no serás así con nuestros hijos.

-¿Qué insinúas, Eustass-ya?

-Nada, nada. Vayámonos...

-Sabo y Ace también son novios. Zoro y Robin también. Nami y yo también. Y Marco y Thatch también. El único solo es Sanji. Me da pena...

-Búscale novia.

-Pero no sé cómo...

-Mira en una web de citas.- comentó Law con desgano.

-Idiota, no va a mirar allí. Igual le toca un travesti...

-No sería la primera vez...

-Pues vayámonos de fiesta con él algún día. Seguro que conoce a alguna chica guapa.

-Y por eso estamos aquí.- dijo el niño con una sonrisa.

-¿Por qué me has contado también lo de Law y Kid?- inquirió él con confusión.

-Era necesario para la historia.

-Bueno, si tu lo dices... aunque no creo que a estas alturas vaya a encontrar a ninguna chic... ¡MELLORINEEE!

-Cejas, relájate.

-Con cuidado, Kuroashi-ya, podrías espantarlas...

-Me lanzo.

-Ve- Sanji salió corriendo hacia una chica castaña con dos coletas y gruesos labios. Vieron como la cara de la chica cambiaba radicamente de enfado a una bastante... enamorada. Sanji terminó por irse cuando un chico muy grande hizo su trabajo de hermano sobreprotector y lo echó. Bastantes veces le pasó cosas parecidas, y se rindió. Lo intentó con Rebecca, con una enorme chica de cabellos rosas, con la hermana de Kid (causando un golpe por parte del pelirrojo), con una muchacha de cabellos azules, y con una chica  "fantasma".