Come What Way

•20•

*Dereck*

Conduzco hacia su casa, mirándola, cuando puedo y pensando en las palabras, en su reacción, en su cara de miedo y odio a la vez, esto me lo tiene que contar ella o su amiga pero ya.
Llegamos a su casa, y Megan rápidamente abre la puerta, la subo a su habitación , la observo detenidamente, es tan preciosa, y yo tan gilipollas, por que estaba con esa si no me gustaba, si creía que no iba a venir, pero eso no tiene escusa, no me la iba a follar ni nada pero bueno.
Bajo al comedor y están Nate y Megan en el sofá.

-¿Me puedes contar que paso hace tiempo, que le afecta tanto, de un tal Kevin?

-Haber, te lo debería de contar ella, pero se que va a ser difícil para ella, y se que no me vas a dejar en paz así que, ella estaba con el chico mas guapo de NY, mas popular, llevaban desde el instituto, eran perfectos, hasta que el cambio, era agresivo, ella se alejo, lo poco que la veía estaba siempre amoratada, tiene varias cicatrices, de peleas que llegaron a más, ella no nos contaba nada, un día me llamaron al teléfono un número muy largo y era la policía- se corta por que empieza a llorar, se limpia las lágrimas y sigue- Adeila estaba en el hospital con varias apuñaladas, al borde de la muerte, Kevin la había apuñalado por celos, por sus malditos celos, y yo no lo vi venir, creía que era lo normal, que cuando te echabas pareja te alejabas, pero no no lo era, ella podía haber muerto, por eso nos vinimos a California, casi nadie lo sabe, por que ella lo quería olvidar todo.

Me quedo estático, quiero matar a ese  tio,  como fue capaz, Nate consuela a Megan, y yo subo a la habitación con algo de comida, entro y ella está despierta.

-Despistada te traigo algo de comer- me siento a su lado.

-¿Te lo han contado?

-Algo, no te voy a insistir ni nada cuando quieras me lo contaras.

-Es muy difícil, de verdad, pero prefiero que lo sepas, llevábamos tres años, al principio muy bien éramos la pareja perfecta, al año y medio empiezan las peleas, los celos, empieza empujando me, luego una ostia, un día me tira de las escaleras, al otro es un puñetazo en las costillas, y así otro año y medio, hasta que llega ese día, ese maldito día, en el cuál llevábamos ya peleados unos días, por que se puso celoso , de un chico de mi antiguo instituto, me cito en su casa, y yo tonta fui, espezamos a discutir y rompi con el, no podía más, me iba matar yo misma, pero el se adelantó, mato una parte de mi, el decía que si no era de el no era de nadie, así que cogió y me pego tres apuñaladas.- no puedo creerlo, mi niña, solo quiero abrazarla y que no piense mas en eso, veo como caen sus lágrimas por sus mejillas y cada una de ellas me está matando, no puedo verla llorar- y después de hay solo recuerdo el sonido de la sirena, las voces de mis padres, mi hermano y Megan.

No digo nada, solo quiero abrazarla, quiero que sepa que estoy aquí para ella, que me estoy enamorando de ella, si es que no lo he hecho ya, se que soy un imbécil a veces pero me muero por ella, mataría por ella, hasta le voy a contar el mayor secreto que no sabe nadie, por que la quiero.

-Yo soy así, por que mi hermano, se suicidó por amor.- no me a costado tanto decirlo.

*Adeila*

Me quedo perpleja después de esa confesión, hoy es noche de confesiones

-Se que es duro así de repente pero lo tenía que decir, por eso soy así con las tías por que no quiero enamorarme, no quiero sufrir y después de lo de mi hermano no quiero, pero te quiero a ti y debía decírtelo.- no tengo palabras, a dicho que me quiere, no puedo creerlo, arreglado todo mi día, con esas palabras, el suelta aire como si se hubiera quitado una mochila con piedras.
Lo miro a los ojos y sin poder evitarlo le beso, con tanta pasión, que nos fundimos en ese beso, le cojo la cara con mis dos manos, el me coge de la cintura, el beso cada vez se hace mas intenso, me pongo encima de el, sin despegar nos, el se echa hacia atrás, quedando yo encima de el, le quito la camiseta, en señal de que quiero hacerlo, lo necesito.
El me quita la mía, y en un rápido movimiento el esta encima mía, mirándome, contemplándome.

-¿Estas segura?

-Si- dicho eso me besa, pero me besa con unas ganas indescriptibles, me besa el cuello, con una suavidad que hace que salga un gemido, lo cojo del pelo, y en mi parte íntima empieza a cobrar vida propia, me coge uno de mis senos, y rápido me quita el sujetador, empieza a frotar mis pezones lo cual me encanta, me besa por todas las partes de mi cuerpo posibles, cambiamos el papel y ahora vuelvo a estar yo encima, besando todas las partes de su cuerpo cada rincón, y veo su cara de placer.

-Ya no puedo mas- suelta en un gemido.- me saca los pantalones y mi tanga y el hace lo mismos con sus pantalones y sus boxes, y veo su pedazo de miembro, normal que a todas les guste, se pone encima de mi besándome y introduce su miembro, de primeras despacio lo cual me encanta, pero lentamente va aumentando el ritmo, no puedo parar mis gemidos, nos damos la vuelta estando yo encima, esto es tan placentero, esto es el mejor, la verdad, sin parar de gemir, mi cuerpo empieza a estremecerse, mi bello se pone de punta, y chillo como ninguna vez lo he hecho.

-Adeila- dice el, eso significa que ambos hemos llegado, esto a sido lo mejor de mi vida, no es mi primera vez pero es la mejor.