Hinata lo sabia, tarde o temprano tenía que suceder, pero jamás se imaginó que pasaría con un Gladiador.
Publicada un 5-09-17
NOTA: Algunos capítulos están basados en la Serie Spartacus.
NOTA: El siguiente sueño tiene temas de abuso sexual, tomar precauciones.
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Hinata siente una vibra extraña en la habitación, todo a su alrededor se siente lejano, desconocido y como si no perteneciera ahí.
A su lado izquierdo Ino acomoda un par de almohadas para poder dormir mejor mientras que Sakura tuvo la infortuna de dormir en el incómodo sillón de la ventana porque no hay espacio suficiente en la cama.
Las tres amigas hablan un par de minutos sobre su rutina para mañana, es la villa del emperador así que hay que disfrutarla, en sus planes está jugar con los hijos de los esclavos o ir un rato a nadar; al final deciden que jugar con los niños de la villa es la mejor opción.
Ino es la encargada de apagar todas las velas porque no le teme a la oscuridad.
Hinata siente como la rubia le da un beso en la frente con cariño, se recuesta a su lado no sin antes cobijarse a ella y a su amiga. Las tres chicas se desean buenas noches y es solo cuestión de minutos para que todas se queden dormidas.
Las horas transcurren...
Hinata abre sus ojos con lentitud. Frunce su pequeña nariz. Escucha susurros en la habitación.
Se queda quieta en su lugar mientras oye como telas de ropa se tocan entre sí. Respira entre cortadamente. Pequeños sollozos que son tapados por algo hacen aparición.
Se levanta de su cama con sumo cuidado de no hacer ruido. Quiere saber qué es lo que pasa allí adentro. Toma la vela más cercana y la enciende con rapidez.
Lo que observa es aterrador.
Su Padre toca a Sakura en sus pequeños pechos, le está besando su pequeño cuello como si fuese un demonio y le jala el cabello para que no emita ningún ruido.
—¡No!—Exclama Hinata, con verdadera desesperación—. ¡Déjala!
Su padre no la escucha y sigue haciendo esos actos tan repugnantes. Ella corre a empujarlo pero sus manos traspasan el cuerpo del emperador.
Cierra sus ojos cuando Sakura forceja para liberarse y se gana una bofetada que la deja medio aturdida.
Hinata, lentamente, da pasos hacia atrás cuando la peli rosa intenta no ser penetrada por ese hombre, se da la vuelta para no ver pero si escuchar como la inocencia de Sakura es robada...
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Hinata se despierta de golpe con la respiración agitada.
Siente sus mejillas repletas de lágrimas.
Rápido ve a su lado izquierdo, su corazón se encoje al no ver a sus mejores amigas dormidas.
Han pasado dos semanas y ese sueño la ha perseguido desde entonces.
