|Hunter Rowland|

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Micaela ondeaba su cabello rosa con ayuda del aire, mientras caminaba por la playa, el verano en verdad era caluroso y su escuela no había tenido mejor idea que armar un viaje a la playa ese fin de semana.

Habían asistido muchos de sus compañeros, entre ellos los dos hermanos Rowland, que eran sus mejores amigos desde que llegó a la escuela, hace poco más de un año.

- ¡Mica! - Habló alguien, mientras corría en su dirección.

- ¿Qué sucede? - Preguntó observando a su amigo menor.

Al que le había sentado demasiado bien el tiempo en que se alejó de las redes sociales y el mundo de la fama, ya que se había dedicado a asistir al gimnasio y se había vuelto todo un ejemplo de body goals.

- Hunter te está buscando, quiere verte en media hora en el restaurante del hotel - Dijo, observando su celular y tecleando algo en el.

- ¿Media hora? Tengo que ir a cambiarme, gracias Bran - Le dió un beso de despedida y caminó a paso rápido a las habitaciones que se habían asignado a los grupos.

Se cambió rápidamente por algo más cómodo, pero a la vez medio elegante y fresco a su figura. Se maquilló como siempre lo hacía y bajó rápidamente al lugar donde la habían citado.

Encontrándose con el guapo castaño, que se inclinó hacia ella y depositó un beso en sus labios, cortamente. Lo cual sorprendió un poco a la chica, si bien habían estado tirándose indirectas amorosas últimamente no había sucedido nada aún.

- Señorita, ¿me podría acompañar? Hoy será una velada especial - Tomó su mano sin decir nada, dejándose guiar por el mayor.

Mientras caminaban a su mesa, pudo observar a Brandon afuera, levantando los pulgares deseándole suerte pero sin saber el porqué.

- Lo siento, pero pedí algo especial por lo cual no podrás ordenar - Avisó el castaño, para después comenzar a hablar animadamente con su acompañante.

Y después de unos minutos el camarero apareció con la comida, que había sido colocada delicadamente formando un corazón y también estaba deliciosa.

Este detalle no pasó por alto para la pelirosada, pero se limitó a sonreírle tiernamente a Hunter.

- Perdón por esto, pero ¿a qué se debe Hun? - Ocultó la emoción en su voz, ya que esperaba una declaración del que llevaba siendo su crush hace un par de meses.

- Sabes Mica, con todo lo sucedido últimamente, me he dado cuenta que eres una persona muy especial, sonriente ante las adversidades y literalmente una ayuda para no hundirme en mis problemas, y habría un millón de adjetivos y palabras bonitas para describirte, pero no tendría tiempo para expresar todo lo que...

Se vio interrumpido por el servicio, que les traía el postre, y para la sorpresa y emoción de la chica era justamente lo que esperaba, un pequeño y bonito pastel que se veía decorada de la orilla con un "¿Quieres ser mi novia?"

- Se ha adelantado un poco - Rieron ambos, despidiendo al camarero que siguió con su trabajo.

- En fin, supongo que ya sabes mis intenciones pero te lo quiero preguntar yo Micaela, ¿me concedes el honor de andar contigo?

Sin dudarlo la chica asintió, mientras se levantaba y se refugiaba en sus brazos sin importar que estuvieran en el restaurante. Después ambos se dieron un tierno beso, que revelaba el amor que se sentían uno al otro y volvió a su lugar.

- Me haces la persona más feliz, Hunter Rowland - Tomó de su mano y sonrió con ternura.

- Eso no es todo, espera un poco - Le guiñó el ojo y los dos prosiguieron a comer su postre.

Después de pagar, salieron tomados de la mano, metidos en su conversación mutua sin saber a donde se dirigían, o eso parecía. Al llegar a la entrada del edificio giraron a donde estaba una banca donde sentarse y alguien tapó los ojos de la chica. Que no se asustó al escuchar la voz de Brandon

- Listo

Su vista volvió y frente a ella estaba un corazón pequeño hecho de piedritas de colores y detrás de ellas el chico, en manos de Hunter había una maceta con unas cuantas flores.

- Te hubiera comprado flores, pero iban a morir en días y preferí que durarán más y las vieras florecer, así como el amor que te tengo. Que juro que va a crecer cada día más y con todo mi corazón espero que esto dure mucho pero mucho tiempo, toda la vida si es necesario por que eres la chica más perfecta de toda la existencia

Sin dudarlo, Micaela estaba en el cielo pensando que la estrella más hermosa y brillante era Hunter, mientras que él sabía que brillaba para hacerla feliz.

Dedicado a:
sarcastic_girlx

Declaro la elaboración de los pedidos ¡inaugurado!

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