Las Cosas Cambian [Joshler]

Capítulo XX

Narra Tyler:

Después de la partida de Nick, muchas cosas han cambiado, me sigo sintiendo solo pero con ayuda de los chicos todo ha ido mejorando, Josh a cambiado mucho y ha estado muy pendiente de mí en todo momento, siempre me envía mensajes preguntando cómo me siento o si necesito algo, es muy lindo conmigo.

- Hola, Ty — Tay está enfrente de mí en los pasillos del instituto.
- Hola, Tay, hola Bren — les digo a ambos.
- Hola Ty — me responde Bren.
- Te traje algo que te va a animar — la emoción en los ojos de Bren me desconcierta.

Mis ojos se abren por la sorpresa cuando Bren saca mi libro favorito que por pobre no compré y aparte no estaba disponible en el país.
- Bren, Bren, esto es magnífico, Bren, ¿cómo lo conseguiste? Pasé semanas buscándolo en las librerías aquí e incluso por internet pero el envío era muy caro y no tenia como pagarlo — me detengo — espera, ¿cómo conseguiste el dinero? Bren, ¡VENDISTE TU VIRGINIDAD!
- No, baboso, no puedo vender lo que no tengo — Taylor se le queda viendo con una cara de "uatafack?".
- A ver, a ver, ¿cómo está eso de tu virginidad inexistente? — pregunta Taylor.
- ¿En serio quieres saber eso? — Bren levanta una ceja mientras espera la respuesta de Tay.
- Sabes qué, olvídalo, kiasko — apoyo a Tay, kiasko.
- Pues sí, Bren, ¿cómo lo conseguiste? — pregunto con el libro entre mis manos.
- Recuerdas que tengo un primo en España, ¿no? — asiento — bueno, pues lo extorsioné para que me comprara tu libro y me lo enviara todo gratis, sino, lo iba a pagar caro el hdspm, no me agradezcas — dice mientras me manda un beso en el aire. Pinche Bren, ahora lo quiero más.

Iba bien feliz con mi libro con una portada bien homosexual que todos notaban, hasta más en alto ponía el libro, pinches mentes cerradas.

- Maricón — a ver, a ver, ¿a quién le dijeron así?
Volteo a ver repetidamente hacia todos lados pero no es a mí, aunque mi portada bien homosexual me delata. Pero no soy yo, a caray.
- Das asco — oigan, ya estuvo no, ¿me volví esquizofrénico o qué? Ando oyendo cosas que no están.

Hay mucho jaleo, mucha gente está yendo hacia el patio, seguro hay pelea. Vamos al patio a ver a cavernícolas solucionar sus problemas a golpes porque su cerebro no les permite mejor manera de pensar.

Voy bien Agustín hacia el patio, cuando veo al pinche Josh golpeando a un chico que ni idea quién era.

- Uuuuh, te dijo gay — le dicen a Josh — dime algo que no sepa — contesta él. A pesar de que lo están haciendo lata no pierde el sentido del humor y aunque no debería, una sonrisa de mamá orgullosa sobresale de mis labios.
- Dice que golpeas como niña — le gritan al otro chico.

- Ya estuvo ustedes dos, a la dirección, ahora — el director les dice a ambos — y ustedes, a sus clases, ¡ya!

Todo el grupo se dispersa y comienzan a caminar a sus salones, yo estoy en eso.
- Joseph, lleve a Dun a la enfermería, ni pararse bien puede, después lo lleva a la dirección — me acerco a Josh mientras me agacho para lograr sostenerlo entre mis hombros.
- Yo puedo solo — el enfado en su voz es notable.
Se trata de levantar pero en un rápido movimiento lo atrapo porque se iba a caer.
- Sí, ya noté que podías solo — bufa de enfado pero se deja llevar por mí, es muy alto y pesado, siento que mis hombros se caen y me hundo.

Cuando logramos llegar a la enfermería, lo dejo en una camilla, el enfermero no está, así que busco un botiquín para empezar a curarlo.

- ¿Qué hiciste, Josh? — le digo triste.
- Él empezó — se excusó — dijo cosas insultantes y tenía que golpearlo.
- Josh, no puedes ir golpeando gente que te insulta, sólo debes ignorar y ya, cuando les haces caso, ellos continúan, cuando los ignoras, se dan cuenta que no sirve de nada y dejarán de hacerlo.
- No puedo evitarlo, Tyler, no dejaré que me estén diciendo cosas estúpidas.
- Pues intenta.

Sólo resopló de enfado pero no dijo nada. Me acerqué con un algodón mojado con alcohol.

- Wow, wow, wow, wow! Cuidado con eso — me dijo mientras se alejaba.
- Josh, tengo que limpiarte las heridas — dije con fastidio.
- No — dijo con un puchero. No sabía si reír o enojarme.
- Vamos, Joshito precioso, déjame, ¿si? Es para tu bien, tío Tyler te quiere ver bien — le digo mientras finjo una voz como si le estuviera hablando a un bebé.
- Ya habla bien — dice Josh.
- Pues no, pero ya en serio, tengo que limpiarte las heridas — le digo resignado.
- Está bien, pero ten cuidado.

Me acerco hacia él, pongo el algodón en su labio y escucho un pequeño quejido de su parte. Sigo en eso año concentrado que no había notado la cercanía en la que estábamos. Josh pone su mirada en mis labios y me empiezo a poner nervioso. Me tiemblan las manos y los golpecitos en su labio son más notables.

- Tyler, eso duele — se queja Josh.
- Ay, p-perdón.
- Tyler, qué lindo te ves nervioso.

Uatafack? Pero, ¿qué carajos acabo de oír?.

- Ay, Josh, pero ¿qué cosas dices? — me río mientras intento minimizar el nerviosismo que tengo.

- Es verdad, Tyler — hay sinceridad en sus palabras, mi sonrojo aumenta mientras intento esconder mi cara entre mi libro.

- ¿Qué es eso que tienes en la mano?
- Es mi libro favorito, me lo acaba de dar Bren, ¿no es un encanto? — le digo mientras le muestro mi libro. Escucho un carraspeo de su parte.
- Es el libro más homosexual que he visto — responde.
- Oye, es precioso — le digo enojado — me ayudó mucho con lo de ser gay y esas cosas.
- ¿Me lo prestas? — dice abruptamente.
- Más despacio, velocista — le digo — ¿para qué lo quieres o qué?
- Ah, yo digo que para tirarlo, obvio que lo quiero para leer — me responde con fastidio.
- Ah, bueno, está bien, ten. Lo cuidas mucho, por favor — le digo — has el Juramento Inquebrantable.

Se me queda viendo con duda y le explico mientras entrelazamos los brazos y digo el hechizo correspondiente mientras él intenta reírse de mí.

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No pude evitar actualizar, tenía una intensa necesidad de actualizar, es que me daba ansiedad, gracias por esperar, los/as quiero mucho.
Bye, :3.

(PD. El libro que le regalaron a Tyler se llama "El Chico de las Estrellas" [portada en multimedia] y también es mi favorito, amo ese libro aunque sólo lo pude leer en PDF, el autor es un chico español llamado Chris Pueyo, su forma de escribir es maravillosa y su libro es excepcional, amo sus libros y más que a ese libro en específico, él es maravilloso y quisiera algún día conocerlo, deberían leerlo, deja mucha enseñanza y ayuda mucho de todas las formas posibles).