"MI HERMOSA COINCIDENCIA" Completa.

28

La semana se está acabando, no veo a Andrw desde que regresé a la ciudad y comienzo a extrañarlo.

E estado algo preocupada ya que he tenido apariciones de Giovans y en mis sueños e revivido lo que ocurrió esa noche, he despertado gritando, empapada de sudor.

Hace algunos días, he dejado de dormir para no seguir teniendo pesadillas, me la he pasado leyendo y estudiando, intento adelantar trabajos de la universidad o simplemente doblo turno para no tener la tentación de dormir.

Sé que mi cuerpo lo necesita, pero mi mente me pide a gritos no tener más esas pesadillas que me hacen tener miedo y convertirme en un ser débil.

Y bueno, como consecuencia... ahora me acompañan unas oscuras y prolongadas ojeras las cuales ni con maquillaje las he podido tapar.

Me encuentro en el consultorio, organizando algunos papeles de pacientes que he atendido esta semana, la puerta de se abre y veo entrar a mi amiga, hoy está más guapa que nunca.

-¿Ey Soph, vamos a ir a almorzar, te le apuntas?
Le sonrío y me levanto de mi puesto.

-Claro, déjame organizo algunas cosas.

-Bueno, pero me quedo con tigo, no quiero que vuelvas a alucinar.
Un sabor amargo sube por mi garganta, al recordar todo lo que he vivido. Betty se sienta en el mueble. -Oye amiga, has tenido mareos, vomito o nauseas.

-¿No, solo mareos Por qué la pregunta?
Esta ladea la cabeza y sonríe. Niego con la cabeza,-ni se te ocurra pensar eso. Digo señalándola con el dedo índice. Esta se levanta de su asiento.

-Soph es la única manera de saber que pasa, o es hacerte una prueba de embarazo o hacerte exámenes que nos digan el porqué de los mareos, vómitos y alucinaciones.

¡¡¡Es por no dormir bien!!!
Grita mi subconsciente.

-Ni de coña me voy a realizar una prueba de embarazo.

-Allá tú, piénsalo y me dices para acompañarte.
Sacudo mi cabeza, cojo mi bolso y salgo.

Él almuerzo a estado estupendo. Me he divertido mucho y ahora me encuentro de nuevo en mi consultorio. Mi celular suena, es Andrew y yo sonrío al ver su foto en la pantalla.

-Hola princesa.

-Hola amor.

-¿Qué haces?

-¿Trabajando, hoy me ha tocado en consulta, y tú?
Se abre la puerta y levanto la vista.

-Deseando verte...
Dejo mi celular a un lado y corro a abrazarle.

Sentir su aroma después de una semana, me hace sentir viva de nuevo. Le miro a los ojos y luego lo lleno de fugaces besos, él sonríe.

Luego me coge por la cintura y me alza, de tal manera que puedo abrazar su cintura con mis piernas. Este camina con migo y me deja en el escritorio.

-¿Qué haces aquí?

-¿Visitando a mi novia O acaso no puedo?
Dice mientras me mira coquetamente, muerdo mi labio inferior.

Me bajo del escritorio y bajo mi vestido. Me siento en la silla.

-Señor Kenton, necesito que desaloje la sala, tengo pacientes que atender.
Levanto una ceja.

-Yo soy un paciente.
Sonrió y niego con la cabeza.

-Andrw hablo enserio.

-Yo también.
Suspiro...

-¿Está bien quédate, pero no preguntes nada ni toques nada, estamos?