"MI HERMOSA COINCIDENCIA" Completa.

12

Me despierto, ya es de noche, me levanto de la cama, llevo puesta el pijama. Me froto los ojos, todo ha sido un sueño.

Abro la puerta del pequeño cuarto. No hay ningún ruido. Por lo que voy a mi habitación. No hay nadie, voy a la cocina y tampoco encuentro a nadie.

En ese instante levanto mi vista y por la ventana veo a Andrw en la terraza, se encuentra sumergido viendo hacia la nada.

Sonrío, al parecer no fue un sueño. Corro y salgo a esta. Le abrazo por detrás y el voltea de sorpresa, en su cara sé dibuja una expresión dulce.

-Jey, pequeña dormilona.

Levanta mi mentón y me da un fugaz beso.

-¿Mamá y Erik sé han ido?

Asciende.- ¿A dónde?

-Al hotel, los he llevado.

-Y qué les has dicho cuando preguntaron por mí? Me sonrojo recordando lo que ocurrió.

-Qué te has quedado dormida.

Me coge por la cintura y me mira coqueta. - O acaso esa no es la verdad?

Me sonrojo aún más y él me abraza.

Me coge de la mano y vamos a la cocina. Hay unas ricas tortillas en la encimera y mi estómago ruge de hambre.

-¿Las has hecho tú?

Le pregunto.

-No, tú mamá nos ha dejado algo para comer.

Nos sentamos y comemos juntos.

Una vez terminamos de cenar, levanto los platos y los llevo al fregadero. Oigo que suena el celular de Andrw y este se aparta para contestar.

Lavo los platos y limpio todo en la cocina, me dirijo a mi habitación donde está mi amor, se encuentra sentado en la cama. Al notar mi presencia, levanta la vista y cuelga la llamada. Se acerca y me da un beso en la frente.

-Amor, debo irme.

Sale de la habitación. -Debo ir donde mamá, creo que me necesita.

-No tienes por qué darme explicaciones, es tú mamá y lo comprendo.

Me empino y le doy un beso en la nariz.

-Me encanta cuando haces eso.

Me da un beso.-Luego hablamos.

Es lo último que dice y sale del apartamento. Amo a este hombre.

Antes de dormirme llamo a mamá.

-Cariño.

-Mamá, ¿por qué se han ido?

- Ya era tarde, Andrw nos ha traído.

-Me lo ha dicho, pero saben que se podían haber quedado.

-No cariño, tienes tú intimidad y hay que respetarla.

Sonrío.

- ¿Cuándo se van?

-Mañana, Erik debe estudiar.

-Yo voy por ustedes y los llevo al aeropuerto.

-No, debes trabajar.

Pongo los ojos en blanco.

-Mamá, por favor déjame despedirlos ¿a qué horas se van?

- En el vuelo de las 8 am.

-Bueno, estaré antes de esa hora, y no discutiré, les amo.

Y antes de que responda algo, cuelgo.

Le escribo a Betty.