Capítulo 13 - Primera vez

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Me quedé sin palabras.

Pero lo que más me dejó sin palabras fue cuando él me habló al oído con su sensual voz:

- Ven conmigo.

En ningún momento me soltó o me dio tiempo para responder y me llevó tomado de la mano por toda la calle y yo lo seguía como si fuese un niño perdido.

- ¿A dónde me llevas?- me atreví a preguntar unos minutos después.

- A un lugar más cómodo.

De ahí en adelante no mencionamos ninguna sola palabra y sé que podía negarme e irme pero había algo más fuerte que me lo impedía. Me sorprendió que al lugar que llegamos fue un edificio pequeño de esos que alquilan habitaciones, lo seguí porque seguía sin soltar mi mano y eso me hizo sentir los nervios en su punto más extremo.

Él abrió la puerta y pude ver que era un apartamento muy pequeño, como para una o dos personas, fue ahí que me soltó cuando cerró la puerta tras de mi.

Di un par de pasos al centro de lo que era una pequeña sala observando todo detenidamente, era muy él ese lugar, irradiaba ese toque masculino y único de mi profesor. A diferencia de su casa este era un lugar menos ostentoso y se veía sencillo hasta el punto de humilde.

Nuestras miradas se encontraron segundos después que terminé de ver a mi alrededor, sentí que con ella me decía todo lo que no se atrevía a pronunciar en voz alta y lo vi dar un paso adelante y otro y otro más hasta que entre ambos no había espacio de separación, al ser él más alto que yo se inclinó un poco y con ambas manos tomó mi rostro para besarme en los labios... un beso lleno de temor, ternura y mucha amor, sí, sentí lo que sentía por mi en la primera unión de nuestro labios. Lentamente mis manos rodearon su cuerpo y nos acercamos más hasta que solo nos volvimos besos y caricias. Él me pegaba a su cuerpo como si fuera a perderme en algún momento, cuando sus labios pasaron de los míos hasta mi cuello pude tomar un respiro que me fue interrumpido por la repentina reacción de él levantándome entre sus brazos así que tuve que rodearlo con mis piernas por su cintura y me dejé llevar hasta lo que era su habitación, me depositó sobre el colchón con una delicadeza jamás vista en mi corta vida.

Levantó mi suéter y comenzó a regar besos por mi vientre de forma delicada, metió sus manos más y me quito el suéter lanzandolo al suelo, bajo de la cama y empezó a desvestirme quitando mis zapatillas y luego mi pantalón junto a mi ropa interior. Instintivamente cubrí mis partes íntimas con mis manos, me daba vergüenza que me viera así ya que no me sentía a gusto con mi cuerpo pero él alejó mis manos para apresarlas justas con una de sus manos mientras se inclinó para besarme nuevamente en los labios.

- Esto no está bien.- dije entre jadeos cuando besaba mi barbilla.

- Esto nunca estuvo bien.- me respondió.

Volvió a soltarme pero fue para comenzar a desvestirse él, no quería verlo porque sentía vergüenza pero mis ojos son necios y lo vi desnudo por primera vez y era mejor de lo que recordaba de mis sueños, era un adonis total.

Lo veía buscar algo en un mueble pequeño al lado de la cama.

- ¿Es tu primera vez?- me preguntó.

Yo no podía articular palabras así que negué, soy un maldito mentiroso, si es mi primera vez con un hombre ya que si tuve relaciones con mis ex novias. La mentira me puso más nervioso de lo que ya estaba pero vi que Ricardo hacia todo, casi todo en realidad, puso una almohada debajo de la parte baja de mi espalda y me abrió de piernas, sentí mas vergüenza de la que había tenido antes.

- Seré cuidadoso.- me dio un beso en mi vientre.- Así que relájate.

Y lo cumplió, con delicadeza me preparó y en el proceso me sacó más que un jadeo de los cuales no pude aguantar y sé que las habitaciones de al lado podría llegar mi voz. Vi que se colocó un preservativo y antes de introducirse en mi comenzó a besarme con demasiada ternura, haciendo que gimiera ya que también me acariciaba con delicadeza por todo mi cuerpo, eso me ayudó a que dejara los nervios atrás y puedo jurar que no sentí ni un solo dolor sino placer, jadee más alto, rodeándolo con mis brazos y arañando su espalda, sus besos eran intensos devorando mi boca como si deseara hacerlo desde hace mucho tiempo y yo igual, el deseo era más que obvio en ambos desde que los dos dimos nuestros pasos.

Me tomó entre sus brazos e hizo que me sentara, quedando a horcajadas sobre él, sus manos se apretaron sobre mis caderas y seguían el ritmo que marcaba, estaba sintiendo placer en todo su esplendor y para no dejar salir los gemidos mordía la salada y suave piel de su hombro. La fricción de mi miembro contra su vientre era grande pero él liberó una de mis caderas y comenzó a masturbarme.

Llegué a mi orgasmo, segundos después él lo hizo.

Me dejó caer sobre las almohadas y después sentí su cuerpo sobre el mío, nuestras respiraciones agitadas se oían en cada rincón de esa pequeña habitación a la que por fin pude ver con detalle, era igual de sencilla  que la sala y estaba compuesta por la cama donde me encontraba, una cómoda, una mesita de noche y un armario; a mi izquierda se encontraba una ventana doble la cual estaba abierta y las cortinas bailaban al viento. 

Por un momento creí que se quedaría dormido sobre mi pero no lo hizo, se movió y llevándome con él quede abrazado a su cintura y enrede mis piernas con las suyas, estábamos completamente desnudos y pude apreciar su cuerpo con determinación. Me hizo suyo pero yo no lo sentía mio, lo sentía más alejado de lo que normalmente lo sentía pero no me podía quejar, desde el comienzo siempre supe que nunca estaríamos juntos por mas que lo deseara. Me quedé dormido a su lado dejándome llevar por las caricias que me proporcionaba en mi espalda, me aferré mas a él como deseando que este momento nunca se terminara pero terminaría al amanecer... 

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Buenas!!!

Aquí el capítulo más esperado por todos. Ya saben que esta relación le falta experimentar más así que tranquilidad.

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Eso es todo, nos leemos!!!

Ruthie 💕

17 [Chenzo AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora