-Ha pasado mas de un mes, Tlahuicole no aparece y ya es hora de atacar, nuestras fuerzas estan recuperadas, el ejercicio se ha vuelto a nutrir, y es la mejor oportunidad para conquistar a los Aztecas- grito Cortes enfurecido con Xicotencatl.
-Te he dado lo que quieres, muestra algo de gratitud y respeto ante mi, no es mi responsabilidad que Tlahuicole haya desaparecido mucho tiempo, él volvera- contesto Xicotencatl haciendole frente a Cortés.
-Llevas diciendo lo mismo por cinco dias...- dijo Cortes antes de salir de su palacio.
El Ejercito Conquistador estaba preparado para marchar, con los hombres recien llegados de España y de Cuba, y con las municiones de asedio que repusieron las perdidas, Cortes esta dispuesto a atacar el Valle. Son miles de soldados europeos y miles de guerreros tlaxcaltecas, formados y listos a las ordenes. Sin embargo no podían comenzar su camino, Tlahuicole es parte fundamental del movimiento.
-Ya deberíamos marchar, no hay tiempo que perder...- dijo Jerónimo de Aguilar a Cortés, impaciente por luchar.
-Tenemos que esperar a Tlahuicole, le prometieron un regalo que ayudaría a ganar la guerra...- contesto Cortés molestó.
-¿Crees que no podemos destruir a los Aztecas con lo que tenemos?- preguntó Jerónimo.
-Los Aztecas no son el problema, tío. Ese chaval, que juega a ser un jefe, tiene cualidades que no podemos superar, estamos en medio de una guerra entre bestias infernales, pero todo poder tiene una debilidad... Y deseo encontrarla, para poder clavar mi puñal en su garganta y sacarle el corazón ¿Que tan malo seria hacerle lo mismo que le hizo a mis hombres? Se burlo de mi, y eso no quedara impune... Desde que llegamos, ha sido mi dolor de cabeza, llenándome los cojones de pura mierda con sus actos "heoricos" y por fin obtendré mi venganza- contesto Cortés cegado por el odio y la amargura.
A lo lejos, por el sur, se aproximaba una neblina sobre la llanura. El frío cubría todo el terreno, las hojas caían por la fuerza del viento. Cortes desde lo alto del Palacio de Xicotencatl observo que entre la neblina caminaban hombres, empezando a notarse unos cuantos hasta verse unos cientos, y cada vez crecia mas el numero.
Al frente estaba Tlahuicole, a su derecha iba Itztlacoliuhqui, a su izquierda estaba una bestia gigante parecida a un perro, pero con un aspecto monstruoso, era el Nahual Jefe. Detrás de ellos, putrefactos guerreros de todos los pueblos, guerreros caídos en la batallas mas recientes, miles y miles de ellos, de todo tipo, incluso españoles derrotados.
-¡No ataquen!- grito Cortés.
Rapido bajo del palacio, tomo su caballo y junto con unos soldados y guerreros tlaxcaltecas se dirigió a la entrada de Cacaxtla para recibir al ejercito. Entonces se encontraron, Cortes se horrorizo al ver tanto muerto caminando, no lo podian creer los españoles...
-¿Este... es tu ejercito?- pregunto Cortes a Tlahuicole.
-Es el ejercito que nos dara la victoria frente a los Aztecas, y juntos cumpliremos todas nuestras ambiciones sobre estas tierras... Y mas- dijo Tlahuicole.
Sin tanta espera, ordenaron sus hombres. Al frente iban todos los muertos de Tlahuicole, 1.2 millones de hombres y 10 mil nahuales. Seguido estaba el Ejercito Tlaxcalteca, entre ellos los Guerreros Garza y la milicia Tlaxcalteca, era conformado por 95 mil guerreros. Después estaba el Ejercito Conquistador, conformado por 40 mil guerreros de varios pueblos tributarios a los aztecas, y 60 mil soldados españoles, armados de nuevo cargamento de asedio, y preparados para construir dos docenas de galeras artilleras.
Toda la noche y madrugada se armaron los grupos para marchar al amanecer y dirigirse al Valle de Tenochtitlan.
-Nuestra primera "advertencia" para obligarlos a rendirse, sera atacar Texcoco, Alcoman y los pueblos aledaños. Usaremos Texcoco como base principal y desde ahí controlaremos la campaña. Si no se resignan, distribuiremos los ejercitos en varios grupos, atacaremos desde los cuatro accsesos a la ciudad, y en poco tiempo tendremos el control total del Imperio, destruyendolo y conquistando a su gente. Por fin cumpliremos nuestro plan señores- dijo Cortes a Xicotencatl y Tlahuicole.
Al amanecer partirian a Cholula y de ahi al Norte, para tomar Texcoco y Alcoman, donde estan Itzel y Tonauac. Poco tiempo falta para el enfrentamiento total entre los Aztecas y el Ejercito Conquistador.
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Mixcoatl - Heredero Perdido
Khoa học viễn tưởngHa pasado el primer reto para el Imperio Azteca. La Noche Triste, la Matanza de Toxcatl, puso a prueba su fuerza y su valentía. Mixcoatl ha vuelto para proteger a su pueblo, y esta vez no esta solo. Algunos españoles se han aliado con él y varios re...