Capítulo 20

462 42 3
                                    

Tanto tiempo había esperado por este preciso momento, y el ver a mis compañeros compartiendo y riendo lo hacía aún más real.

Lo último día de escuela.

Solo esto y no tendría que asistir nunca más. Era como música para mis oídos.

Hailey me trajo un vaso con Sprite.

—Tu favorita.

—Gracias, novia.

Llevé unas cuantas papas fritas a mi boca y las saboreé como si mi vida dependiera de ello. Mi corazón se aceleró, sin yo darme cuenta, al ver como Shawn entraba en el salón detrás de Niall. Había oído que habían arreglado la cosas y que todo estaba bien entre ellos dos.

Le sonreí. Me saludó.

¡Me saludó, Dios mío! Shawn Peter Raul Mendes me había devuelto un saludo.

—¿Le hablas a Shawn? Que decepción, amiga. Te creí mejor persona.

—No importa eso. Solo quiero estar bien con todos y es por eso que hoy, hablaré con Hailee.—confesé para después darle un sorbo a mi vaso.—Estamos saliendo de la escuela y necesito tener amigos, no enemigos.

—Estoy orgullosa de ti, L. Pasaste por mucho este año pero te mantuviste de pie.

Me encogí de hombros.

—Me gustaría poder decir lo mismo.

Hoy llevaba unos jeans bastante ajustados, una camiseta negra que tenía mangas a la altura de los hombros, la cual se me subía cada dos por tres, y unas plataformas del mismo color del top. Me acerqué al dueño de la música para poder solicitar una canción de Rihanna, pero me topé con el dueño de mis pensamientos la mayoría del tiempo.

—Hola, te ves muy bien el día de hoy.

Maldita sea, sentí el calor impactar mis mejillas.

—Hola. Gracias. Tú... Tú también.

—¿Quieres bailar?

Ay, Dios. ¿De verdad me estaba hablando?

—Me encantaría.

Me guió hasta la pequeña pista de baile improvisada. Bailé unos pasos rápidos mientras continuaba con el vaso rojo descansando en mi mano derecha. Reí al ver como Shawn hacía unos movimientos raros y ridículos. Si ignoráramos el hecho de que él y yo estábamos en medio de una pelea, adivinaría que eran dos amigos bailando como si estuvieran en la flor de su amistad.

Esto debió haber pasado en el baile. 

—Te extrañé.—confesó.

Lo miré con una sonrisa algo melancólica.

—Yo también a ti... ¿Todo bien entre nosotros?

—Todo bien.

Me abrió sus brazos. No dudé ni un segundo en meterme dentro de ellos. Como los extrañaba. Sentí un alivio enorme al sentir sus brazos alrededor mío. Era como llegar a casa después de haber estado fuera por mucho tiempo. Antes de separarnos, Shawn besó mi coronilla.

—No puedo creer que mañana nos graduamos. ¡Es increíble! Es como si ayer me hubiera mudado a Los Ángeles.

Reí.

—Lo mismo digo. Y de hecho, ya tengo casi todo empacado para la Universidad.

—Yo igual.

—Eso no es posible. Debes llevar tus cosas a Boston y eso es bastante lejos, como ya sabes. A menos que... ¡Oh por Dios! ¡No lo puedo creer! ¿Te quedarás e irás conmigo?

Better Off; Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora