TÚ Y YO

CAPÍTULO 13

Llegamos a casa de Afri y le medio lanzo el casco cuando me lo quito.

-Recuerda que tenemos una cita pendiente- se ríe detrás mío.

-Sí... Eso ya lo veremos.- Digo dispuesta a irme.

-Era un trato- me mira serio.

-Que si, vale, ya me dirás cuando...

-Mañana- me interrumpe.

-¿Mañana? Creo que tengo deberes... - digo recordando como el de mates y el de catalán nos los ponían para el lunes- a parte creo que voy a pasar el día con Afri y Sandra...

-Pues el lunes- me dice volviéndome a interrumpir. -Para avisarme tendrías que tener mi móvil y yo el tuyo.

-Ya tenemos el insta guapo- le guiño el ojo y me dirijo hacia la puerta.- Y cuando pueda te aviso. Gracias por todo.- Le digo esta vez en serio.

-Para lo que necesites- veo sinceridad en los ojos y la puerta se abre de golpe. Afri y Sandra estaban detrás. Cotillas.

-Nathan estas son las cotillas de mis amigas, Afri y Sandra- noto como se sonrojan.

-Hola- saludan a la vez.

-Hola chicas, tengo que irme ya para casa que es tarde pero un placer haberos conocido. Laura- me recorre un escalofrío por el cuerpo cuando escucho que mi nombre sale de su boca- avísame pronto.- Y dicho esto se va con la moto que hace unos minutos había conducido yo.

Entro en casa y nos dirigimos a la habitación de Afri, noto cuchicheos detrás mío y risitas.

-Parar ya- digo medió enfadada. -Sois unas cotillas.

-Lo sabemos- dicen a la vez, parece que se hayan programado para decir lo mismo. -Pero nos tienes que contar todo YA-

-Primero me voy a cambiar de ropa y me voy a desmaquillar y después si estoy de humor os cuento algunas cosas.-Digo poniéndome al lío. Veo como Afri y Lau siguen viendo la peli que supongo que habían comenzado.

Cundo acabo les cuento todo lo que ha pasado durante toda la noche, sin especificar nada. Y me viene a la cabeza África y Luis:

—Yo mucho contar, pero tú no dices nada de Luis eh, anda que me dices que estás con él o algo—le digo a África asesinándole con la mirada.

—No estoy con él. Estamos conociéndonos, pero creo que me gusta, no sé. En verano me abrió equivocándose de número y comenzamos a hablar, nos hemos dado un par de besos pero creo que él no quiere nada así que no tengo posibilidades. Pero de mi no es de quién tenemos que hablar ya nos puedes contar que ha pasado con Arnau.—Dice África mirando a Sandra.

—Esto parece una cadena tío. A ver yo ya no siento las mismas cosas que sentía en verano. Vale sí, Arnau es guapo, simpático, encantador y todo lo que vosotras queráis, pero hace semanas que no sentimos lo que sentíamos en verano, esa chispa. Ya sé que no es excusa y os prometo que el lunes le voy a contar todo, pero Isaac me hace sentir diferente, es todo lo contrario a Arnau, pero es... Y besa...

—Vale ya te hemos entendido, no hace falta entrar en detalles. —Le digo recordando el beso que se han metido hace apenas una hora.

Han pasado como tres horas desde que hemos empezado a hablar y ya estamos cayendo dormidas. Ha sido una noche muy larga y sobretodo bonita. Nathan, solo puedo pensar en él, en nadie más.

A la mañana siguiente nos levantamos Sandra y yo a la vez y vemos como Afri duerme plácidamente, aprovechamos para sacarle algunas fotos, ya las subiré para su cumple.

—Afri, Afri ¿a qué hora nos tenemos que ir?— la despertamos. Somos malas.

—A la que queráis. Dejarme dormir.—nos dice dándose la vuelta para no vernos la cara. —Quedaros a comer si queréis, no creo que les importe a mi padres.

—Vale pero levanta, vamos a hacer algo productivo ¿no?—me dice Sandra.

Sabe que si no se levanta no la vamos a dejar tranquila y no va a poder dormirse más así que decide levantarse.

–Va, vestiros que ya sé dónde podemos ir. –Dice Sandra animando el ambiente muerto que hay en la habitación. – Podemos ir a hacer fotos, porque tengo el Insta un poco abandonado.

–Bua sí, espera que se lo digo a mi madre–. Busco el chat de mi madre y le escribo:

Mamaa, vamos a dar una vuelta por el pueblo, después iremos a comer ¿vale? ¿No te importa que coma en casa de Afri no?

No pero dime dónde estás en cada momento
Y llega pronto que mañana hay cole y no quiero que estés todo el día fuera.
Vale te quiero

Dicho esto preparo el bolso de ayer otra vez y me visto.
Después de hablar un rato sobre el maquillaje que vamos a llevar, decidimos ir discretas, un maquillaje casual ya que vamos a la playa. Llevo los tejanos de ayer con un top que eché en el bolso por si acaso de solo una manga larga y la otra de tirante amarillo, con las converse. Minutos más tarde estamos ya listas y nos dirigimos hacia la playa.
Suele haber mucha gente porque están aprovechando los últimos días de verano así que optamos por ir a una cala la cual solo conocemos cinco personas y nunca hay gente, hace años decidimos guardar el secreto de que existía para que fuese solo nuestra.

–¡En verdad hace buen día ehh!– dice África.

–Pensaba que llovería – les digo interrumpiendola.

–¡Tú estás zumbada! Cómo va a llover, estamos acabando el verano pero aún es verano te recuerdo– me dice África en tono de burla.

–Vale lista perdón – le respondo también en tono de burla.

–Bueno a ver tranquilidad, vamos a escuchar el silencio– y comienza a partirse de risa. Sandra nunca escuchará el silencio, ella siempre se encargará de romperlo.

Y dicho esto nos comenzamos a reír y vemos el sitio a lo lejos.