14 Disculpas

1.8K 171 34
                                    

Tony se dirigía a la casa de Steve, había olvidado lo mucho que le gustaba ese lugar tan diferente a su solitaria mansión. Necesitaba hablar con Peter... Y con Steve, le debía disculpas a esos dos también una explicación que no sabía cómo dar al mayor.

Estacionó y dió un suspiro, pensó en lo dicho por Pepper. La risa que escuchó provenir de adentro le dió valentía y un poco de curiosidad por saber que hacía ese par, según escuchó estaban en el comedor.

Abrió la puerta con la copia de la llave que aún conservaba y se encaminó al lugar del que provenían los sonidos, contento con no estar esquivocado se recargó en el marco de la puerta a mirar la escena.

Steve tenía una bandeja con algo que parecían galletas un poco quemadas, Peter sostenía un destornillador mientras se reía junto a su padre. Parecía que por distraerse con la explicación de su hijo sobre la pequeña máquina que descansaba sobre la mesa, Steve olvidó estar cocinando y las golosinas se quemaron un poco.

Peter picó una con el dedo y le dió una mordida indicándole con un gesto a su papá que sus galletas igual estaban ricas.

-No te burles.

-Mmm están algo crocantes. Muy crocantes.

Carraspeó para llamar su atención.

-Tony.

-Steve. Yo quería hablar con Peter.

El adulto y adolescente se miraron y asintieron. Peter le pidió al mayor acompañarlo a su cuarto para tener más privacidad y poder guardar su "proyecto".

-¿Qué sucede papá?

Tragó saliva, no pensaba ocultar ningún sentimiento ni nada. -Me alegra mucho que me llames así todavía. Peter yo.. te debo una disculpa.

El chico no respondió nada pero lo miró atento demostrando que prestaba atención y esperaba que continuara.

***
~Horas antes~

-No puedo creer que me perdí de esto el otro día es increíble, gracias Harry.

-No hay problema, iré al baño ¿me esperan?

-Vete tranquilo.

Michelle y Gwen comenzaron a caminar, mirar y tocar las cosas que llamaban su atención. En un momento las chicas se separaron, una para ver unos libros tirados por el suelo y un escritorio, la otra para tomar un artefacto que había llamado su atención.

La rubia guiada por la curiosidad tomó aquello entre sus manos, sintió un pequeño pinchazo como una picadura en una de sus manos, soltó el objeto llamando la atención de su amiga.

-¿Estás bien Gwen?

-Sí, solo... Creo que algo me picó. 

-Eso es una picadura de araña, busquemos un botiquín.

Michelle le ayudó a curarse pero la rubia tiempo más tarde empezó a sentirse mal, por suerte llegó bien a su casa.

****
Peter lo esperó paciente mientras Tony organizaba las palabras en su mente. 

-Desde que na.. te conocí.. intenté ser el mejor padre posible, amarte fue tan fácil y esperaba que me amaras así, también quería ser el mejor padre para tí.

Peter iba a hablar pero Tony elevó una mano indicándole silencio, se acercó a la ventana buscando que el menor no viera cuan afectado estaba.

-Creí que estaba haciendo las cosas bien, pero veo claramente que fallé. Mi padre, no era el mejor de todos, muchas veces me hizo daño muchas veces dude de si existía a sus ojos o si guardaba algo de cariño por mí. Es curioso, cuando estoy cerca de ti intento ser lo más contrario a él que puedo.

-El único pensamiento que siempre pasa por mi mente cuando hablo contigo es no ser él. Lo que hize contigo el otro día no estuvo bien, no estuve para ti y al principio no me dí cuenta de cómo te sentías. Te quité todo tal como lo hicieron conmigo y no lo merecías para nada, quiero pedirte disculpas hijo -Su voz se quebró un poco al pronunciar hijo y finalmente lo miró- Por favor perdóname Peter.

-No. Cometiste un error como todo ser humano, pero te arrepentiste y no te puedo culpar. Papá mírame, ven acá.

Tony levantó la mirada del suelo y se acercó a su hijo, el chico estaba sentado en la cama y palmeaba el lugar junto a él con una leve sonrisa. Tomó asiento con los ojos fijos en esa sonrisa que le daba un poco de alivio.

Peter tomó su rostro con delicadeza.

-Yo te perdono. No eres igual a Howard, tú eres un padre maravilloso. Te amo, todos te amamos porque eres una gran persona que lo merece. No pienses que eres malo, deja de torturarte con eso papá eres increíble.

No de pudo contener, terminó abrazándolo y acunandolo un poco entre sus brazos. Se separaron al escuchar el llamado de Steve que prometía galletas nuevas y sin quemar.

-Quédate conmigo.

-Siempre.

***

-¡Maldición!

Bajó la taza que quedó a unos centímetros de sus labios. Volvió a llevarsela a la boca al oír silencio.

-¡Joder no!

Entrecerró los ojos.

-¡¿Qué mierda?!

Suspiró y dejó su té en la mesa para dirigirse a la habitación de su hermano.

-¿Wade? -Entró sin tocar como acostumbraba, abrió la boca sorprendida por todo el desastre que rodeaba al chico.

-Nessa ¿me ayudas?

-¿Qué mierda hiciste Wilson?

-Invité a Petey a una cita, no sé qué ponerme ni qué hacer. 

Vanessa volvió a suspirar. -Eres un idiota Wilson.

-Ahg puta madre. -Se tiró en la cama notablemente molesto.

Su hermana lo miró y luego al desastre en el suelo, cama y donde mirara. Revisó entre la ropa allí tirada hasta encontrar las prendas que deseaba.

-Listo. Ponte esto. -Lanzó sobre el cuerpo de él un jean oscuro, una camiseta blanca y una chaqueta de cuero -Busca unos buenos zapatos y llévalo a ese restaurante de comida italiana que le gustaba a mamá. Lo demás piénsalo tú, no voy a planearlo todo.

Escuchó una queja.

-O pensándolo mejor podría hacer todo yo... Y claro salir con Peter.

-¡¿Qué?! ¡No!

-Idiota, arréglate.

***
En medio de la película y "por culpa de una galleta" Peter se atragantó.

-¿Estás bien hijo?

-Sí pa, es que recordé algo. -Se levantó del sillón.

-¿Qué cosa?

-Tengo que cenar con Wad, con Gwen si si, con ella.

-Ay Peter, -Suspiró, no quería dejarlo ir pero pensó en otra cosa que lo hizo asentir de inmediato- Ve con ella, no la hagas esperar.

-Gracias papá, ¿van a estar bien? -Preguntó intentando ocultar la esperanza de su voz pero no pasó desapercibida por los adultos.

Bajó en unos minutos vestido semi formal, arregló su cabello una vez más.

-Vuelve temprano, suerte.

-Y envíale nuestros saludos a Wade hijo.

Se sonrojó, intentó huir rápido pero chocó con la puerta que aún no abría, enrojeció más cuando escuchó la risa de su padre.

***
Justo cuando Peter se va.

Peter cruzó la puerta y Tony ya estaba dispuesto a huir, pero huir de los problemas no es lo aconsejable y menos si ese problema es un súper soldado.

Se dió la vuelta, su mano rozando el picaporte cuando...

-Stark tenemos que hablar.

Lazos De SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora