15 Cita

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Mierda. Se tensó y tragó saliva duramente, tenía que ser fuerte.

-Steve, debo irme.

-No huiras, necesitamos discutir este tema.

-De acuerdo. -No es un cobarde, va a enfrentar su problema por muy nervioso que este al sentirlo cada vez más cerca.

***
Peter salió pero no sabía realmente a donde iba, Wade nunca se lo dijo. Le envió un mensaje que fue respondido al segundo de ser enviado, esperó en la plaza donde el mayor le indicó esperarlo.

Estaba sentado en una banca cuando oyó los pasos detrás de él, sonrió. No tuvo que esperar mucho para ser abrazado, Wade dejó un beso en su mejilla y lo saludó.

-Te ves precioso baby boy.

-También tú Wade. ¿Dónde iremos?

-Es un lugar especial. Me gustaría que se me hubiera ocurrido pero Nessa me jodió y lo pensó antes.

Sonrió un poco y no preguntó nada más, caminaron un poco hasta que Wade soltó su mano y le abrió la puerta de un lindo restaurante italiano. Se notaba ya que tenía pintada la bandera de dicho país, era un lugar sencillo pero muy cálido con un ambiente familiar. Pudo ver a varias familias comiendo allí y a algunas parejas en sus citas.

Wade se comportaba como todo un caballero con él. Se llevaba un poco de los deliciosos espaguetis a la boca cuando el rubio soltó un poco su mano y la tocó con un dedo para llamar su atención.

Lo miró entonces el mayor dejo una alhóndiga en su plato. Lo miró confundido, entonces Wade tomó su fideo más largo y colocó un extremo en su boca para luego tenderle el otro. Se rió pero lo aceptó extrañándose a si mismo, fueron acercándose lentamente justo cuando estaban a centímetros de rozar sus labios el fideo se rompió.

Lejos de frustrarse el castaño se rió un poco, más cuando vió la cara de su acompañante. Acarició la mano del otro provocándole una sonrisa.

Un poco ruborizado continuó comiendo, nunca había mantenido mucho contacto romántico con Wilson, más bien casi ninguno eran más como amigos, amigos que guardaban fuertes sentimientos el uno por el otro. El rubio sonrió mucho al ver la emoción del castaño con todos los postres que había en la carta, lo vió un tanto complicado con su elección no podía decirdir entre dos de los postres.

El mesero les preguntó por el postre y el castaño terminó optando por helado con galletitas Wade con una sonrisa pidió un volcán de chocolate. El rubio comió un poco de su volcán, debía admitir que su chico tenía buenos gustos, comió una cucharada más y se lo ofreció a Peter a cambio de una probada de helado.

El de ojos avellana sonrió y con gusto se metió un trozo de volcán embarrado en la salsa que este tenía dentro. Una sonrisa satisfecha apareció en sus labios mientras masticaba, el rubio pensó lo mismo que cuando lo vió en el hospital ¿cómo ese chico era capaz de tenerlo tan loco?

***
-Tony... No puedo seguir fingiendo ¿entiendes? No soy el idiota que probablemente pienses que soy, yo se que te pasa algo respecto a mi hijo. Sospeché cuando decidiste llevarlo a tu casa, pero luego encontraste excusas para alejarme de él. Quiero que me digas lo que sucede.

Entonces se sintió mal, el dolor en las palabras de Steve era muy fácil de notar, tal vez era hora de decir la verdad.

-Peter es mi hijo.

-¿Qué? -Demaciado directo.

-Cuando Peter tuvo el accidente, mi sangre fue la compatible con él pero la de su propia madre no lo es. Llegó al hospital el mismo día en el que yo había perdido a mi hijo, llegaste de la calle con un bebé en brazos cuando obviamente tu esposa estaba dentro del hospital es imposible que estando muerta y ahí adentro ese bebé sea de ella. Te robaste a mi hijo Rogers. ¡¿Por qué lo hiciste?! ¡dime la verdad maldito mentiroso!

Lazos De SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora