[🌷] 13

2.9K 412 29
                                    


Yeosang caminaba junto a Seonghwa, este tomaba su mano con fuerza, no había que ser adivino para saber que estaba enojado, con ganas de partirle la cara a cualquier persona que se le cruzara en su camino. Y es que así era, sentía tanta impotencia por no poder hacer algo más que lamentarse como si fuese su propia culpa.

Pero vamos, todos sabemos que él no tenía la culpa de esto, Kang sabía que estaba confundido y que aún no podía entender bien lo que estaba pasando, y claro, debía decirle que tomara un respiro, lo notaba más que enojado, agitado y afligido. Le daba tanta pena, era su novio, él tenía todo el derecho de poder hablar seriamente.

—Cálmate Seonghwa, por favor— Quería mostrarse fuerte, pero por dentro estaba gritando, sus ojos estaban llenos de lágrimas, no soportaba esto. Era una tortura. Quiso detener los pasos del mayor, pero no lo logró, ponerse en su camino tampoco servía, no sabía a donde iban, o qué harían. Quería comerse las uñas y arrancarse el cabello por la desesperación. Pero debía actuar normal, no como todo un lunático.

—¿A dónde vamos Seonghwa? Por favor, debes detenerte— Su mirada nublada no le dejaba ver bien su camino, tropezaba varias veces, y tal parecía que Seonghwa tenía un destino desconocido para el menor, bien fijado. Porque no le prestaba atención.

Yeosang dejó escapar un grito, porque su cuerpo fue empujado hasta un callejón. Los brazos del mayor le apresaron, no podía pelear para que le soltara, su rostro escondido en el pecho del pelinegro, sus manos adheridas a la tela de su camisa. Comenzó a llorar con fuerza, sintiendo caricias en su espalda. Odiaba verse tan débil ante él, se supone que el más afectado era Seonghwa, no Yeosang. Pero la desesperación y el miedo ganaron la batalla, y las lágrimas no podían dejar de salir, los sollozos se escuchaban por parte de ambos. Porque aún no sabían cómo lidiar con esto, no sabían cómo comenzar.

Y decir que Mingi y Jongho no estaban igual, era mentira. Porque el menor estaba temblando, cubriendo su rostro con sus manos en un intento desesperado por callar su boca. Y el mayor, sólo podía abrazarlo, no sabía qué decir o qué hacer. También estaba dolido, pero no lo expresaba como tal, tenía su mente hecha un lío, pensaba cosas malas, cosas que seguramente no eran acertadas. Intentaba convencerse a sí mismo de que Choi San sólo estaba desaparecido, que... No estaba muerto.

Tenía tanto miedo de que esto fuese verdad, y era lo que más abrumado le tenía.

Porque claro, todos querían ayudar, todos querían encontrar a San, todos querían estar con él soportando cada una de sus payasadas. Nosotros como personas no nos damos cuenta de cuanto extrañamos a una persona cuando no está con nosotros. Eso es... Confuso, pero es la completa verdad.

Perder a un amigo que quieres es lo peor que puede pasar. Las fuerzas se pierden, las dudas sobre ti mismo comienzan, y sientes que todo el mundo se te viene encima porque te dices una y otra vez que debes intentar estar con esa persona nuevamente.

Pero tu mente te lo prohíbe; diciéndote que es lo mejor.

Pero este no era el caso, sus mentes estaban bloqueadas, sí, pero era diferente. Ellos querían estar con San, pero un maldito desquiciado lo tenía, no sabían en dónde estaba, como se encontraba. Y eso dolía más que nada.

La vida era una mierda cuando de estas casas se trataban.

❛ LUNATIC。Donde viven las historias. Descúbrelo ahora