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Sus brazos tomaban con fuerza las hojas que debían colgar por todo el vecindario y en las afueras de este. Carteles de se busca para ser exactos.

Jongho estaba desesperado, lloraba cada vez que Mingi colgaba aquellos papeles en las paredes, árboles y póstes, ver el rostro de su mejor amigo impreso en esas cosas le ponía mal, llevaba más de tres días sin verlo, su madre estaba igual o peor que él, nadie entendía todo esto, era demasiado raro y frustrante, porque vamos, Choi San era un chico tranquilo, incapaz de hacer algún mal para que gente extraña se lo llevara lejos.

—Tranquilo— Sentía como los brazos del mayor le cubrían en un abrazo, él también estaba confundido y dolido por lo sucedido, estaba acostumbrado a colgar carteles de ese estilo, porque bueno, siempre perdía a sus mascotas. Y para suerte de él, alguien las encontraba, tenía la vaga esperanza de que alguien encontraría a su amigo como si fuese un perrito perdido.

—Vamos a encontrarlo, pero primero debes guardar la calma. Nada se resolverá si sigues derramando lágrimas, Jongho.— El menor intentaba, claro que lo hacía. Pero mientras más profundo respiraba, más se ahogaba con sus sollozos. Sentía que todo esto era su culpa, y no entendía la razón de esto. Mingi sentía aquél nudo en su garganta que no le dejaba respirar normalmente. Siendo molesto al pasar saliva. Ugh, todo era tan frustrante.

—Todos le extrañamos, ¿Sí? No eres tú solo— Acariciaba su espalda para calmarlo, funcionaba. A Jongho le relajaba que Mingi le dijera varias palabras de aliento. Decidió separarse de ese abrazo, muy lento. Limpiando sus lágrimas en el proceso, sintiendo como su cuerpo tiembla por la impotencia, si tan sólo pudiese tener a los captores de San frente a él... No podría contar los golpes que le daría a cada uno. Porque él no era para nada débil, podía defenderse de cualquier persona, y más si era para proteger a sus amigos.

Ambos siguieron caminando a paso lento, colgando carteles; deteniéndose para preguntarle a las personas que pasaban si no habían visto al chico bonito en la foto. Todos, absolutamente todos negaban. Diciendo que ni siquiera lo conocían.

Sólo esperaban que Seonghwa y Yeosang tuviesen más suerte.

❛ LUNATIC。Donde viven las historias. Descúbrelo ahora