Herido

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Dos semanas después de discutir con Draco por una ridiculez llamada Pansy, pase la noche recapacitando las cosas, notando las grandes estupideces que hacia cuando estaba enojada, por primera vez le encontré un problema a ser tan consentida y malcriada, pero es que era tan obvio que no sé cómo no me di cuenta antes, Draco, Selin, "Milly", Daphne, Theo, mi madre y finalmente mi padre... todos, solo faltaba que arruinara las cosas con "Gato" y ya no me quedaría nadie, jamás debí haberle dicho bruja de segunda a Selin, de hecho no debí haber dicho muchas cosas, pero ya lo había hecho, gimoteé con culpa controlando el intento de llanto que se formaba en mi garganta, en el fondo culpaba a Draco, si mis cosas con él iban bien, todo era perfecto pero si algo me sacaba de quicio no era capaz de controlar mi rabia y todo ser que se cruzara en mi camino pagaría las consecuencias.

Mi consciencia me exigía que debía pedir disculpas pero es que mi orgullo no me lo permitiría, ni siquiera era capaz de pronunciar un "perdón" honesto, sentía que enfermaba de solo intentar decírselo al espejo, tendría que escribir, que acción tan ruin y cobarde, porque para pelearles si había tenido voz, lo justo sería que para admitir el error hablara, pero es que no era capaz. La primera a quien le escribí fue a Selin y así siguieron el resto, escribirle a mi padre me destrozó pero logré plasmar cada letra sin dejar escapar lagrima alguna, todas se quedaron contenidas en mis ojos forzándome a ser fuerte, cerca al amanecer solo faltaban Draco y Daphne, a él no quise escribirle el coraje y toda la furia volvió en cuanto escribí su nombre y esa hoja termino en la chimenea, tomé otra y le hice un dibujo a Daphne, tan perfecto, tan idílico y tan real que si eso no me volvía merecedora de su cariño nada lo haría, era una foto que teníamos enmarcada en nuestras habitaciones, estábamos pequeñas de 5 y 6 años creo, abrazadas y tan adorables cómo es posible, sin duda es el mejor dibujo que hice en años, solo Daphne merecía tanta dedicación de mi parte, en la mañana las entregaría y que fuera lo que Merlín quisiera... me recosté en el sillón en que había amanecido y supe que Draco era tóxico, no se podía odiar y querer tanto a la misma persona, me juré dejar de preocuparme, allá él lo que quisiera hacer con su vida, no tenía por qué importarme y entonces cuando me aseguraba a mí misma volver a apartarme, Snape entró a la sala común

-Greengrass- saludó frívolamente y afirmé pensando que solo era un saludo, me miró serio y giró saliendo de la sala común sin decirme palabra alguna, al parecer tenía que ir con él, me apresuré a acomodar mi cabello y ropa para ir tras el profesor- procure conservar la calma- me advirtió al llegar a la enfermería

-...-afirmé llenándome de nervios con esa advertencia, pero igual entré encontrándome con un Draco completamente inconsciente y el odio se esfumo, solo me angustié y preocupé por él- ¿Qué le paso?- le pregunté al profesor que llegó a mi lado pero no obtuve respuesta- ¿Quién fue?- le exigí sintiendo que mataría a quien le hubiera hecho esto, pero él seguía sin darme respuesta- ¿fue Potter?- le pregunté nuevamente y solo me miró, eso me bastó- maldito león con complejos de héroe- renegué queriendo ir a buscarle pero Snape no me dejó, me retuvo de los hombros y volvió a dejarme en mi lugar- ¡suélteme!- le ordené y solo le bastó esa expresión déspota para recordarme con quien hablaba- profesor, suélteme- le pedí controlando la furia que parecía consumirme y él volvió la vista hacia Draco

-Creo que lo mejor que puede hacer es quedarse aquí- me dijo soltándome tras escuchar que exhalaba dándole la razón- no es coincidencia que usted supiera lo que está haciendo- me dijo y logró sorprenderme, ¿Snape lo sabía? ¡Obvio, era Snape!, absurdo había sido creer que lo engañábamos- quédese aquí e informe a madame Pomfrey si hay alguna mejora- me pidió y salió de la enfermería una vez afirmé

Potter del modo más retorcido posible fue útil para algo, me hizo entender cuanto podía importarme Draco, sí, toxico como él solo, pero no era solo capricho, de verdad le quería e incluso me temía que no fuera solo cariño, me senté en la cama en una mezcla de emociones, quería pegarle, quería ir tras Potter, quería llorar, quería hacer de todo por resumir un poco, pero solo le veía desde el extremo de la cama aparentemente calmada, aquella paz duró poco, pudo haber muerto... siempre lo supe, esto era demasiado peligroso pero pese a estar enojada con él, odiaba a Potter ¿Qué se creía él para hacerle eso? Esto no se quedaría así, empuñé las manos y salí de la enfermería diciéndole a Draco como si fuera a escucharme que volvía pronto, entré al gran comedor justo cuando Potter se sentaba para desayunar, sus amigos apenas entraban, el idiota pelirrojo había sido retenido por una rubia y la sabelotodo iba tras ellos mirándolos con odio, me daba tiempo para hablar con el maldito elegido del mundo mágico, me senté frente a él logrando que me mirara extrañado

Él y Yo [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora