— ¡Jackson, espera!
Jaebeom corría detrás del chino, y este apresuró el paso para huir de él, estaba tan confundido y abrumado por el comportamiento de Jackson desde semanas atrás. Observó el contenedor de comida en sus manos y suspiró rendido mientras la guardaba en su mochila. —Hice pastel de arroz solo para él, sé lo mucho que le gusta.
Hablaba solo al mirar como el chino se perdía entre los montes, no esperaba ser escuchado por alguien más.
—Jackson es un idiota. —Comentó Hwasa con una expresión de desaprobación en su hermoso rostro, Jaebeom casi se cae de espaldas cuando la vio a su lado.
— Ah, ah... Hwasa, no te vi llegar. —Murmuró nervioso, metiendo sus manos en sus bolsillos.
—Estuve acá todo el rato, Jaebeom.
Jaebeom sonrió, y ella imitó su acción. Se quedaron allí sin decir nada, el chico por estar nervioso y ella por estar incómoda con la mirada de él encima. —O-oye, Hwasa, me preguntaba si...
Calló, avergonzado. Ella ladeó su rostro y apretó las tiras de su mochila, esperando que terminara de hablar. — ¿Si...?
—Siquisierasiratomarunheladoconmigo. —Jaebeom habló tan rápido que por un segundo ella pensó que hablaba japonés, enarcó una ceja.
— ¿Si quiero ir a tomar un helado contigo? —Preguntó ella, despacio. Jaebeom asintió muchas frenéticamente con la cabeza y Hwasa aceptó con una sonrisa.
Caminaron a paso lento hacia la heladería del pueblo, Jaebeom pasó todo el camino admirando a la fémina a su lado. Le gustaba la manera en la que su cabello era agitado por el aire, lo linda que se veía en su uniforme escolar y las casuales sonrisas que le daba durante el silencioso camino.
La heladería del pueblo era manejada por los señores Kang, una pareja de ancianos encantadores que tenían gran amor por lo que hacía. El local era simple pero encantador, flores y estatuillas de helados por doquier. Se acercaron a la barra y ordenaron sus helados, Hwasa pidió un helado de vainilla y Jaebeom de té verde.
— Corre por la casa está vez, Jaebeommie. Manda saludos a tu padre ¡Estudien mucho, chicos! —Dijo la señora Kang cuando Jaebeom intentó pagar.
—Jaebeommie~ —le molestó Hwasa con una sonrisa cuando tomaron asiento en una mesita con vista a la calle.
No le gustaba cuando le llamaban de ese nombre, sin embargo, en los labios de Hwasa eran una melodía para él. Sonrió, y comió de su helado.
No tuvieron mucha conversación, pues Jaebeom estaba demasiado nervioso para siquiera poder iniciar un tema. Se ofreció acompañarla a su casa, y ahora estaban en las calles del pueblo, saltando y jugando todo el camino.
— ¡Oh! —Dijo Hwasa, deteniendo su paso frente a la tienda. — Oppa, olvidé que debía comprar algo ¿Me espera?
Jaebeom asintió y permaneció en la puerta de la tienda. No quería entrar porque seguramente Jackson estaría allí, y no quería toparse con él. Solo iba a arruinar su día feliz gracias a su tarde con Hwasa.
Se abrazó a sí mismo, la noche comenzaba a caer y el uniforme no era suficiente para abrigarlo bien. Cerró sus ojos, y una calidez envolvió su cuerpo, a la hora de abrir los ojos, allí estaba Jackson, colocando una chaqueta sobre sus hombros.
— ¿No te han dicho que debes salir abrigado? —La voz de Jackson salió en un regaño, Jaebeom estaba sin palabras.
Miró al interior de la tienda, y estaba Yugyeom recibiendo el dinero de Hwasa, entonces asumió que acababa de llegar o a penas se marchaba. — ¿En qué piensas?
— ¡Oppa, listo! —Dijo Hwasa al salir de la tienda, pero para su sorpresa Jaebeom no estaba solo, también estaba Jackson.
— ¿Van juntos? —Hwasa asintió, y se colgó del hombro de Jaebeom.
— Jaebeommie oppa me llevó a comer helado, y ahora me llevara a mi casa. ¡Es el mejor!
Hwasa decía esas cosas con la intención de poner a Jackson celoso y ganar su atención.
Vaya que funcionó.
Con un solo detalle, los celos que sintió no por ella...
Eran por Jaebeom.
Y en ese momento no supo sí quiso golpearla o simplemente ser ella. —Oh... Ya veo, buenas noches.
Jackson se marchó sin más y Hwasa sonrió pensando que su plan había funcionado. — ¡Ah! Oppa, Jackson me gusta mucho. ¿Cree que tenga oportunidad con él?
Jaebeom parpadeó un par de veces y mordió su labio inferior reprimiendo las ganas de llorar. —Eres una chica muy linda. ¿Quién no la quisiera?
A ver, según yo subía capítulo mañana pero es que yo no me aguanto nada. ADEMÁS TENÍA QUE MOSTRAR ESOS LINDOS SEPARADORES QUE ME HIZO MI NIÑA HERMOSA PRECIOSA DE SNAKEU ¿VERDAD QUE ESTÁ RE DIVINO? ME MUERO ME ENCANTA, ME FASCINA.
Btw, deberían ir a leer sus historias si aún no lo han hecho, sus 2 jackbum son arte. Me encantaron, además hay yugjae y markbam ¿Qué más se puede pedir en una historia?
Mañana también habrá capítulo.
ESTÁS LEYENDO
Pecado ; jackbeom
FanficLim Jaebeom es el hijo del pastor de la iglesia de Jinghae, un pequeño pueblo al sur del país donde la población no supera a los 500 habitantes, en su mayoría fieles devotos a dios. La calma del pueblo se ve alborotada con la presencia de una nueva...