Capítulo 49

591 31 0
                                    

-Negocios Miserables- 

Capítulo 49

Tantas preguntas, tantos recuerdos que pasan por mi cabeza a cada momento, y todos son de él. Todavía sigo preguntándome cómo pude haber sido tan estúpida. Cómo me dejé manipular por él, supongo que fue mi culpa. ¡Qué vergüenza me doy! Me siento tan sucia. Tan utilizada y humillada.

Lo peor de todo, es que no puedo dejar de llorar. No lo he visto desde la vez que me dejó. Es como si Matt lo hubiera echado de aquí, quizás así fue, creo que será mejor para mí.

Me limpio las lágrimas con las palmas de mis manos y me siento la cama, luego pongo mi cabello detrás de la oreja. 
Acaricio mis labios con los dedos, recordando sus besos, todavía puedo sentirlos. ¡¿Por qué sigo siendo tan idiota?! Maldita sea… tengo que olvidarme de él. Tan sólo me usó, no me amaba. Lo que más odio de todo esto, es que yo sí me enamoré. Ahora todo es más difícil.

Me levanto de la cama y me dirijo al espejo. Luzco terrible. Mi cabello está enmarañado, mis ojos están hinchados y rojos, soy un desastre. 
Me dirijo al baño, abro el grifo y dejo que el agua corra, hasta que se pone tibia. Poco a poco me despojo de mi ropa, hasta quedar completamente desnuda. Las gotas comienzan a correr por todo mi cuerpo. Supongo que esto podrá relajarme

Josh… maldito idiota. ¡Te odio tanto! ¡Mujeriego estúpido!
No entiendo cómo tuvo el valor para lastimarme de esa forma. Yo soy aún más estúpida, por haber confiado en él. Y lo peor de todo. Seguir pensando en él. Pero, jamás saldrá de mi cabeza, él me hizo experimentar cosas nuevas, me llevó a lugares donde nunca había estado. No sé si alguien podrá hacerme sentir lo mismo. 

Cierro el grifo y tomo la toalla del perchero. Me envuelvo en ella, para luego salir de ahí con mis ojos llenos de lágrimas. Busco un atuendo, algo cómodo para vestir. 

Sé de un lugar donde podré sentirme mejor. Quizás…

Estoy completamente segura que Matt no está en casa, siempre se va y me deja aquí sola. Es difícil no estar con Josh, él siempre me protegía, pero… ¡Ya basta! Deja de ser tan estúpida _____, todo fue una actuación. Vaya que sí es un buen actor. 

Alzo mi mano, para pedir un taxi, la mayoría me ignora, hasta que por fin uno se digna a pararse. Abro la puerta del asiento de enfrente y entro. 

El olor del auto me marea, es algo incomodo. El hombre no deja de mirarme, es un pervertido. El auto se detiene en un semáforo volteo a un lado y miro por la ventanilla. Veo a una pareja, lucen increíblemente enamorados. La chica es hermosa, sus cabellos son rubios y le caen por la espalda y el chico tiene el cabello castaño y unos lindos rulos. Me pregunto si Josh y yo lucíamos así. 
Los pierdo de vista, porque el auto avanza nuevamente.

Después de un largo e incomodo viaje, logro visualizar el lugar a donde vengo. Volteo a ver al hombre que maneja. 

-Aquí, por favor. 

El hombre asiente y para el auto. Le doy las gracias, y él me dedica una sonrisa picara. Eso fue algo aterrador. Bajo del auto, y al poco rato siento como se aleja detrás de mí. 

Este lugar me trae tantos recuerdos. Por supuesto, Josh está en ellos. Aquí fue donde me puse completamente ebria. No recuerdo exactamente el nombre de los hombres que conocí aquí. Creo que eran Phill, Bruce y… no recuerdo quién más. 

Suspiro antes de entrar al bar. Seguro un trago no me hará daño. 
Aspiro un olor realmente repugnante, unas arcadas se apoderan de mí. Observo el lugar. Hay cientos de hombres, que, ya están completamente borrachos. Miro la barra de bebidas, veo a un hombre, me resulta extrañamente familiar, ya lo había visto antes. Tiene en sus manos una cerveza. A pesar de que porta unos lentes oscuros, podría jurar que me está mirando. 

Me acerco a ese lugar, y me siento 3 bancos después de él. Un mesero se acerca a mí rápidamente y sonríe.

-¿Qué es lo que beberá, señorita?

Necesito algo fuerte, algo que me pueda hacer olvidar. No sé si estoy haciendo lo correcto, pero lo necesito. Joder, me estoy volviendo como mi madre. 

-Un caballito de tequila, por favor. 

Él asiente y se aleja para servirme. Recargo mis brazos en la barra y doy un suspiro. 
Siento la presencia de alguien, volteo a un lado, y me doy cuenta que es el mismo hombre que me veía cuando entré. Me sobresalto un poco al verlo. 

-Hola, señorita –su voz es ronca. 

-Ho…hola –tartamudeo. 

-¿Puedo? –me señala el asiento. 

-Adelante. 

Y se sienta a mi lado. Siento su mirada sobre mí, es incomodo, casi como el hombre del taxi. El mesero se acerca y me deja mi pedido en la mesa. Le doy las gracias, luego se aleja. Tomo el pequeño vaso entre mis manos y lo observo. 

-Tequila ¿ah? –me sobresalta su voz nuevamente. 

-Sí, espero que sirva de algo. 

-¿Por el amor?

-Algo así. 

-¿Me contarías? Claro, si quieres. 

-Creo que me servirá desahogarme. 

Dejo mi tequila sobre la mesa y me volteo para verlo de frente. 

-Aguarda un momento… ¿Cómo te llamas?

-Soy… Steven. 

-¿Steven? Lindo nombre. Me llamo _____. 

Entrelazo mi mano con la de él y la agito. 

-Supongo que es por un hombre ¿cierto, ____?

-Sí, un…estúpido mujeriego. 

-¿Cuál es su nombre?

-Josh. 

-Interesante…-su voz suena misteriosa- ¿Qué fue lo que te hizo? 

-Me mintió… -los ojos comienzan a picarme- Me dijo que me amaba, pero no fue así. –entonces, las lágrimas se derraman. – Lo siento… -sollozo- es demasiado doloroso para mí. 

-No, yo lo siento, no debí preguntar. 

-Está bien…, no importa. Creo que esto me ayudará –señalo mi tequila. 

-Seguro que sí. 

Lo tomo entre mis manos y antes de comenzar a beberlo lo observo. Siento que me arde… es una sensación extraña. Me gusta. Al dejar el vaso en la mesa me doy cuenta que ya no tiene nada. 

-¡Cielos! –exclamo. 

-Vaya, la primera vez yo vomité –ríe. 

-Creo que así estaré en un rato. 

Ambos reímos, pero nos interrumpe el sonido de un celular, no es mío, es el de él. Lo busca por su chaqueta, pero no la encuentra, entonces se levanta y lo saca de su pantalón. Me hace una seña para que espere y se aleja.

Steven. Parece ser un tipo agradable. Todavía sigo preguntándome en dónde lo vi. Me es tan familiar. 

No tarda demasiado con su charla telefónica, quizás unos 3 minutos. Se acerca de nuevo a mi lado. 

-_____, tengo que irme. 

-Oh, bien. 

-Fue un gusto conocerte –toma mi mano y la besa- Eres muy hermosa. 

-Gracias. 

-Hasta luego. 

Es lo último que dice y después se esfuma. Suspiro y vuelvo a mi borrachera. Joder, ya no tengo tequila.
Le hago una seña al mesero para que se acerque. Lo hace rápidamente. 

-¿Sabes? Tráeme la botella. 

Él ríe y asiente. Juego con el pequeño vaso de vidrio dándole vueltas con mi dedo índice. 

-¡______! –escucho que alguien me llama. 

Me doy la vuelta, y veo a tres hombres acercarse. Ellos… ellos son… ¡Bruce, Phill y Mike! Ahora los reconozco. Se acercan a mí rápidamente. 

-Hola –digo con voz suave. 

-¡Cuánto tiempo! –exclama Bruce. 

Me da pena no poder recordar todo, muy apenas puedo recordar sus nombres. 

-Lo sé. 

Bruce y Mike se sientan a mi lado. Phill se sienta al lado de Mike. Ellos comienzan a pedir cervezas, vodka y más tequila. 

-La última vez que te vi, te llevó un chico muy molesto –comenta Phill. 

-Josh…-digo en un susurro. 

-¿Qué te hace venir por aquí? –me pregunta Bruce. 

-Tan sólo…quería olvidarme de algunas cosas. 

El mesero se acerca con todos sus pedidos y con el mío también. Los deja sobre la mesa y luego se retira. 

-¿Sabes qué, ____? Esto –señala el vodka- te hará olvidar todo. 

Toma un vaso de los que dejó el mesero y comienza a servirme. 

-Aquí tienes –me lo entrega- ¿Recuerdas aquella borrachera que nos dimos? 

-No mucho. 

-Entonces… de está no recordarás nada. 

Espero que eso incluya a Josh. 


Negocios Miserables.- Josh Hutcherson & ____________.-MeelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora