Negocios Miserables.- Josh Hutcherson & ____________.-Meel

Capítulo 88

-Negocios Miserables-

Capítulo 88


¿Qué? 

Mi boca casi cae al suelo al escuchar sus palabras. Abro los ojos de par en par y me levanto como resorte. Josh sigue mirándome con sus brillantes ojos. Mis piernas se tambalean, como dos flanes. 

-No… ¿Qué? Josh, estás…-las palabras se me enredan. 

-¿Bromeando? No lo hago. 

Pestañeo. Debe ser una broma, tiene que serlo. 

-Josh… debes estar confundido, es… 

Él también se levanta. Se pone frente a mí y toma mis manos de nuevo. 

-Te quiero, para siempre. 

-No hagas algo de lo que te puedas arrepentir, Josh. 

-¿De verdad lo crees así? –Me suelta- Jamás podría arrepentirme de esto. 

Nunca pensé que Josh me pediría algo así. Mejor dicho, nunca pensé que con Josh llegaría tan lejos. Cuando descubrí quién era en realidad, supe que jamás volveríamos a estar juntos. Ahora… Ahora esto… 

-Quiero que te cases conmigo. 

Trago saliva y agito la cabeza negativamente. 

-Yo… yo no. No quiero casarme. 

El rostro de Josh se entristece, sus ojos dejan de tener ese brillo intenso. Quisiera besarlo tan apasionadamente hasta que ambos nos quedáramos sin aire en los pulmones. 

-Entiendo. –dice secamente. 

-Josh, escucha; tengo sólo 18 años. Soy muy joven. No quiero casarme, no ahora. 

Se sienta, con su rostro completamente desilusionado. Creo que he arruinado su cumpleaños. 
Me siento a su lado e intento hacer que me mire. 

-Podría pedírtelo –comenta- quizás en 2, 3 o los años que tu desees. Pero tú ya no quieres que sea parte de tu futuro. ¿Es que acaso ya no sientes nada por mí? 

Pongo mi mano en su hombro y él gira su cabeza para mirarme. 

-Jamás podría dejar de sentir algo por ti. 

-¿Y por qué te alejas? ¿Por qué siempre lo haces? 

-Es porque…-bajo la mirada- tengo miedo. 

Josh toma mi barbilla y me obliga a mirarlo. 

-¿Miedo? ¿A qué puedes temer? 

Suspiro y lo miro directo a los ojos. 

-Cuando algo sale bien, Josh, es porque algo peor está por suceder. Prefiero que todo esté mal para que lo próximo que pueda surgir no me duela tanto. Si vuelvo a creer, temeré perderlo de nuevo y sufrir. 

No creí que las palabras fluyeran de esa forma. Ni siquiera las pensé. No sabía exactamente a qué le temía, ahora, por fin lo sé. 
Josh frunce los labios. 

-Te aseguro, que mientras estés conmigo, jamás volverás a sentir ese miedo. Estaré contigo para siempre. Te protegeré, lo prometo. 

-Es…

-¿Nicholas? –Me interrumpe- Sé que has fingido todo este tiempo. 

¿De verdad lo sabe? ¿Me ha perseguido? 

-Es obvio, _______ -dice- No sé de alguien, hasta ahora, que te conozca mejor que yo. Sé cuando mientes y cuando me dices la verdad. Soy un policía, ¿lo recuerdas? 

-Por supuesto –respondo.

Acaricia mi mejilla con su pulgar. Amo tanto sus caricias. Cierro mis ojos y sonrío. 

-¿Qué dices? –pregunta. 

Abro mis ojos de nuevo. 

-¿Sobre qué? 

Pone los ojos en blanco, pero después sonríe. 

-Sobre todo lo que he dicho. ¿Quieres estar a mi lado de nuevo? Yo sí. Más que quererlo, lo necesito. Te necesito. 

Estar con Josh de nuevo. Por supuesto que quiero. Pero sigo temiendo por que algo malo pueda ocurrir, algo que nos separe nuevamente. 

-¿A tu lado de nuevo? –arqueo una ceja.

-De nuevo, y para siempre. 

-¿Me… me amas? 

Josh frunce el ceño. 

-¿Cómo puedes, si quiera, preguntar eso? ¿No ha quedado claro aún? 

Pone ambas manos sobre mis mejillas y se acerca a mis labios lentamente. Su aliento choca con el mío, es delicioso. Cierro mis ojos y me dejo llevar por él. Es desesperante que sea tan lento, pero a la vez me encanta… 
Y nuestros labios sólo se rozan. ¡Maldita sea! ¡Estúpido timbre!
Abro mis ojos y veo como Josh aprieta los de él. Suelta una maldición por lo bajo. 

-Yo… 

-Está bien –lo interrumpo- Es tu cumpleaños. Seguro vienen a felicitarte. Ve. 

Asiente. Se levanta y me observa un momento. Me quedo sentada en el sofá observándolo de igual forma. Se inclina y besa mi sien. Sonrío. Vuelve a levantarse y se dirige a abrir la puerta. 
Estoy harta de esto. Creí que seríamos sólo él y yo. 

Escucho la voz de una chica. ¿Una chica? Y me es familiar. 
Me levanto del sofá y veo hacia la puerta de entrada. Ahí está ella, con su cabello rubio cayéndole como cascada por los hombros, sus labios pintados de color rojo ramera y una sonrisa completamente falsa. 
Marie.

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Okay, y para las que nos saben! Ya hice el trailer de la novela! aquí está: https://www.youtube.com/watch?v=sG02jWyzdp4&edit=vd