Negocios Miserables.- Josh Hutcherson & ____________.-Meel

Capítulo 64

-Negocios Miserables-

Capítulo 64

Antes de que ella pueda seguir escuchando más cosas, me lanzo para arrancarle el celular de las manos. Miro la pantalla un segundo y lo pongo en mi oído. 

-…policía.

-Estás muerto, Wayne.

Y le cuelgo. Estúpido Steven. Maldito hijo de perra. Nunca había sentido tanto odio hacía él. 
Estrello el celular contra la pared y éste se parte en mil pedazos. La batería por un lado, piezas de la pantalla por otro. Necesitaré uno nuevo. 

-¿Estás muerto Wayne? –es la voz de _______. 

Paso ambas manos por mi cabello y bufo. Volteo a verla. En sus ojos se puede reflejar la confusión. Me pregunto si Steven le dijo la verdad. 

No le respondo y salgo de su habitación. Azoto la puerta y bajo las escaleras lo más rápido que puedo maldiciendo. Ahora es el momento que temía que llegara. Seguro ya lo sabe. ¿Qué le diré? ¿Cómo le explicaré sin que piense que quería meter preso a Matt? 

Escucho sus pasos detrás de mí. Viene a toda prisa. Llego abajo y tomo un maletín que dejé al llegar. Aquí está todo lo que necesito. 

-¡Josh! –me grita desde lejos. 

Y en un poco rato ya está abajo, observándome con sus hermosos ojos color miel. 

-¿Qué significa todo lo que él me dijo? 

-¿Qué…-me sorprende que me salga la voz- Qué fue lo que te dijo? 

Se acerca lentamente, pareciera que quiere llorar. 

-Me dijo que fingiste ser alguien más. 

Me acerco a la mesa donde se hallaba el maletín y le doy un golpe con el puño. No encuentro como descargar la extraña ira que siento en este momento. No es contra ella, ni contra Matt, ni siquiera contra Steven. Sino contra mí. Me odio profundamente. Jamás debí de haber realizado esta investigación. Mejor dicho, no debí de haberme enamorado de ella. No debí de haberlo hecho. 

-¿Me vas a contestar? –insiste impaciente. 

Respiro lentamente y la miro a los ojos. No me había atrevido a hacerlo. 

-Lo hice –mi voz suena como si no me importara. 

-Él…él me dijo que no eres… que no eres un delincuente. ¿Es cierto? 

-Ajá –agito la cabeza. 

Ella baja la mirada, pero al poco rato vuelve a mirarme.

-Me mentiste. De nuevo. 

Me acerco a ella y la tomo de las manos, pero me rechaza. 

-______, perdóname, chérie. 

-No –dice con voz seca- No más. 

Vuelvo a tomar sus manos ignorando sus esfuerzos por soltarse. Al cabo de un rato se rinde y deja de forcejear. Mantengo mi mirada firme con la de ella. 

-Te amo. 

-Ay, cállate, Josh –exclama- Deja de mentir. No haces más que eso. 

Tomo su rostro entre mis manos. Acaricio sus mejillas y limpio una lágrima que recientemente sale de sus ojos. Ella no me impide acariciarla. Me alegra. Quiero besarla tan sólo una vez más. Poder sentir sus labios por última vez. Quedarme con ese sabor único que ella tiene. 
Dejo de pensarlo y me inclino para llevarlo acabo. 

Ella me deja que me apodere. No hace ningún esfuerzo por soltarse, al contrario, rodea mi cuello con sus brazos. Es triste saber que será el último. El último para siempre. 
Un extraño sonido surge desde su garganta. Me alejo lentamente para mirarla. Su rostro ya está empapado por las lágrimas. 

-No me dejes –jadea- Por favor… no…

La alejo con un leve empujón. No puedo permitirme seguir lastimándome viendo su sufrimiento. Pero ella no lo entiende, y se pone a un lado de mí. 
Abro la boca para decir algo, pero mi voz simplemente no sale. Después de un rato, por fin lo logro. 

-¿Qué más te dijo? –mi voz suena fría, como si no me importara. 

-Me hubiera enterado de más cosas si tú no hubieras llegado. ¿No me lo dirás? 

Niego con la cabeza. 

-¿Por qué? ¿Qué más da, Josh?...Dime, ¿es por eso que te tienes que ir? 

-Sí. 

-Te odio –susurra- Te odio tanto. 

Sé que en verdad no los siente, pero de igual forma me duele que lo diga. 
Tomo el maletín de cuero negro y lo pongo en mi mano derecha. Paso a un lado de ella sin decirle una palabra e intentando aguantar unas lágrimas que me arden. Quién lo diría. Yo llorar por una chica. 

-Y ni siquiera me dirás nada. 

La miro. 

-¿Qué más puedo hacer? Me odias, ¿no es así? No puedo hacer que sientas algo diferente, ma chérie. 

-No quiero que vuelvas a llamarme de esa forma. 

-De acuerdo. –Un músculo de mi boca se mueve formando una media sonrisa. 

Me acerco a la entrada de la casa, pero antes de que pueda salir, ella vuelve a llamarme. 

-Josh. 

Doy media vuelta para verla.

-¿Sí? 

-Si es que no volverás jamás… tan sólo quiero que sepas que… que te amé como nunca he amado a alguien… y que te entregué todo de mi. Lo sabes. Aunque me dejes y nunca nos volvamos a ver… siempre… siempre te recordaré. 

‘Yo también’ quisiera poder gritarle todos mis sentimientos, pero no puedo. Eso tan sólo me detendría más y me resultaría imposible apartarme de ella. 

-Me alegra –es lo único que respondo. 

En un abrir y cerrar de ojos ella ya está frente a mí. Toma el cuello de mi camisa y se pone de puntitas para alcanzar mis labios. No quería que esto pasara de nuevo, pero no puedo... este sentimiento me gana y siempre lo hará. 

Acaricio su cintura y rodea la mía con sus piernas. Se sujeta con sus brazos de mi cuello para evitar caerse. Nos estrellamos contra una pared besándonos como si jamás lo hubiéramos hecho. O como si nos hubiéramos separado y ahora nos reencontráramos. 
Sin embargo, esa voz me llena de escalofríos y hace que la suelte. 

-Aléjate de ella –dice Matt. 

Y lo hago, me alejo de ella. Miro a Matt; tiene una pistola en su mano derecha y me apunta firmemente. Su rostro se ve lleno de ira. Por supuesto, él ya lo sabe. _______ jadea, pero también se ve asustada. 

-Matt…-intento tranquilizarlo. 

-Quiero que te largues de mi casa y no vuelvas a poner un pie aquí en tu vida. Porque sino yo te mataré. Estúpido –sigue apuntando sin alejar su mirada de mis ojos- Te di mi confianza. ¿y así me pagas? Debería entregarte con Walter. Vete antes de que lo haga. 

-¿Qué… por qué…? Matt… -es ______, suena confundida- ¿Por qué haces esto?

Matt aparta su mirada por fin y la mira a ella. Su mirada me estaba pesando. 

-¿No lo sabes, _____? –ella agita la cabeza negando- ¡Es un policía! ¡Un estúpido policía infiltrado! 

_______ gira su cabeza para mirarme. Pero su rostro no demuestra expresión alguna. Se queda totalmente pasmada. Sin poder decir una sola palabra. Intento tocarla, pero Matt me grita. 
Con su arma me apunta a la salida. 

-Lárgate o yo mismo te mato. 

-Matt yo…

-¡LÁRGATE, HUTCHERSON! –me grita. Jamás lo había visto tan enojado. 

Tomo mi maletín y miro a _____ por última vez. Ahora está pálida, me mira, pero no me dice nada. A Matt, ni se diga, no quiero ni verlo a los ojos. 
Salgo corriendo lo más rápido que puedo sin mirar atrás y subo a mi auto.

-Estúpido –me insulto. 

Jamás volveré a ver esa chica que me hizo ver la vida de otra manera. Esa chica que me hizo decir 'Te amo' por primera vez. Ni podré volver a ver a ese hombre que me hizo recordar el amor de mis padres. No volveré a ver a esas dos personas que me enseñaron a darme cuenta que el amor existe de verdad.