Un amor psicópata

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-Este iba a ser el Cuarto de iann Patrick ¿no es lindo?- pregunto Samuel bajandome,  el Cuarto era azul,  tenía todo hecho ya,  los juguetes organizados ,  la cuna con sabanas,  ropa en las gavetas,  estaba como el Cuarto de Goku Isabel pero con cosas de chicos-Pero tendremos que mudarnos, me da miedo que ellos logren encontrar este lugar apesar de no haber visto nada- 

-Claro,  para un bebé que no es tuyo- susurre.

-Pero le daré más de lo que Maicol le pensaba dar-

-No es así!, Maicol le dará mucho amor,  amor de verdad! - grite.

-Mi amor por mi familia es de verdad- dijo pasando su brazo sobre mis hombros pero me aleje de el.

-Samuel, no son tu familia, que no entiendes que te tengo miedo- dije tapando mis ojos para no llorar.

-Bien,  dices que me tienes miedo?,  pues si tomó mis médicamentos todos los días,  estarias conmigo? Olvidarás todo lo sucedido y me amaras? - pregunto. su cara estaba seria pero, preocupada, es un buen plan,  pero,  aceptarlo sería,  ser igual que el,  que hago? ,  sería una buena vida,  estar con el medicado,  tal y como en el psiquiátrico,  estaría mi Samuel,  solo mío,  estaría tomando su medicamentos, ademas tuvo piedad, asi que es un inicio, de cambiar. 

-Bien,  acepto- ante mis palabras sonrio besandome, segui su beso, el besaba demaciado bien.

No paso mucho para empiezar a arrepentirme ,  vamos,  donde está la Lara racional,  esto esta mal ,  aunque se siente cálido dormir con su brazo sobre mi,  dándome calor,  haciendo Latir mi corazón,  se que esto esta mal,  lo se ,  porque soy tan egoísta? 

-Lara,  porque no te duermes,  ¿pasa algo? - pregunto Samuel con una voz ronca por acabarse de despertar.

-No,  solo no tengo sueño- susurre,  el comenzo a mover su cara contra mi cuello,  su cabello me hacia cosquillas,  me apretó mas contra el y dejó de moverse,  se quedó tranquilo, me voltee quedando frente a el y acaricie su cabello  suavemente,  el me miro y se veia el sueño que tenía,  segui acariciando lo hasta que cerro sus ojos por completo,  su respiración estaba calmada,  eso me hacia saber que estaba dormido,  justo ahora,  hasta a mi me comenzo a dar sueño.

...

Entre cuidadosamente a mi casa,  estaba oscuro,  sentía algo malo,  deje mi chaqueta a un lado y camine al interruptor, solo al encenderlo pude ver a una persona violando mi espacio. 

-Zadquiel- me sonrió con un arma en mano.

-Y tu quien eres?- susurre mirándola con sus piernas cruzadas sobre mi silla,  estaba cómodamente como si esta fuera su casa,  apesar de llevar esa arma cargada.

-Sabes, no quiero matarte, no tengo nada contra ti pero, mi jefe empieza a desconfiar de mi, fue dificil encontrarte, espere y espere,  a que cometieras un error,  todos cometen en errores,  pero tu no hacías nada,  me harte,  y justo cuando me iba a rendir- dejó de hablar y saco su celular dejandome ver un video donde se veia como iba por esta calle. 

-Sabes, me pareces extrañamente conocida, trabajabas en el psiquiatrico no?-

-Acaso viste a todos los empleados mientras investigabas o algo asi?- me sonrio levantandose de la silla- Es una lastima, realmente eres lindo- 

-Aun puedes dejar esto, aun puedes cambiar, ayudarme a meter tras las rejas a tu jefe- 

-Por favor, haznos un favor a los dos y solo muerete, odio oir lamentos-  esas fueron las últimas palabras que escuche  antes de que me disparara en el pecho, caí adolorido al piso,  toque la parte afectada y luego mire mi mano llena de sangre,  pero luego rei,  rei y mire a la arpía que estaba frente a mi.

-Nos vemos en el infierno bruja- dije pero ella se paro rápidamente y piso mi Cara,  gemi de dolor y fije mi mirada en ella apesar de estar con la Cara en el piso y sus tacones negros sobre mi.

-Te dije,  que no me gustan oir lamentos - dijo y disparo otra vez,  esta vez a mi cabeza. 

...

-Ya está muerto- dije tan pronto Xaviel tomo la llamada,  mire al detective en el suelo sin vida alguna y no podia decir que no me sentia mal apesar de no conocerlo. 

-Bien,  solo por esto,  tienes el permiso de ver a Lara,  solo te aviso que,  ahora sabrá que estas de mi parte-

-No me importa- conteste y luego colgué al oir su risa,  porque trabajo  para un imbécil como el?,  un día de estos lo matare, si es que no lo mata Samuel primero.  Salí de esa horrible casa con olor a Sangre y llame a alguien de los que desaparecen los cuerpos,  me fui en mi hermoso auto azul,  los vidrios tintados de negro así nadie me vería,  y es algo bueno,  no se que pensarían las personas al ver a una hermosa chica con sangre de alguien más.

Llegue a mi hogar,  se que estaria vacía,  vivo en un departamento sola,  mis padres y mi hermana están en la  lujosa casa que compre donde enfermeras hacen todo por ellos, no quiero que  vean como llegó del trabajo, o mejor dicho,  no quiero que sepan,  que hago en el trabajo.

Me di un refrescante baño con agua tibia, momentos como estos son donde me siento víva,  salí de la  bañera desnuda,  no me importaba,  quien me vería? ,  me puse un pantalon corto negro y un abrigo súper ancha de color azul Claro  ,  me puse unas botas  café y deje mi corto cabello suelto,  me puse mis lentes y salí otra vez en mi auto,  iré a ver como esta Lara. Toque mi arma de mi bolsillo y sonreí,  si la veo lastimada alguien morirá,  y quien se entrometa también.

Llegue por fin y baje del auto, entre sin miedo o vergüenza y toque la puerta,  un hombre de negro me recibió,  entre sin darle explicaciones y fui directo al sótano de la tortura, intente abrir la puerta pero no pude. 

-Montaño,  que quieres ahora? - pregunto Samuel.

-Siguen vivos tus prisioneros?  - pregunte.

-No respondas mi pregunta con otra pregunta-

-Bien,  vine a ver a Lara, ¿ahora responderas las mías? - pregunte.

-Pues, estan todos bien, los dejare irse- me sonrio. 

-A cambio de que?- pregunte rapidamente. 

-No te importa- 

-Dejarlos con vida a cambio del bebé? -

-Oh, como supiste? -pregunto con una sonrisa.

- Lo imagine,  te llevaste a la de Elizabeth,  que me haría dudar de que también el de Anny - me acerque hasta el encarandolo-Donde está Lara? - pregunte por lo que vine y el solo se fue,   lo segui hasta una habitación,  el abrió la puerta y pude ver a Lara sonriendo,  alimentando a Goku Isabel.

-Entra si quieres, no tengo nada que ver con lo que pensara después- se fue dejándome con las palabras en la boca y solo me digne a suspirar,  termine de abrir la puerta y al momento de Lara verme cambio su expresión,  dejó a la bebé en la cuna y corrió hasta mi.

-Cheila! - grito abrazando me,  se sentía cálido,  recibir un abrazo de mi mejor amiga pero al mismo tiempo sentía que la traicionaba...