Capítulo 12☪

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Los días habían comenzado a pasar, y con ello las semanas, los padres de Jimin aún no tenían información sobre Jungkook y Jimin había estado saliendo últimamente, eso era bueno, al menos ya no estaba en su cuarto llorando.

Yeri le había estado ayudando a olvidar de cierta forma a Jungkook, le había confesado sus sentimientos a Jimin aquel día que le había pedido hablar con el, mientras que Jimin solo se había quedado sin palabras ante la declaración de la Omega. Se había negado a estar con ella, su corazón le pertenecía a Jungkook, pero la chica no se daba por rendida, así que simplemente quería enamorar a Jimin y que ambos pudieran ser felices, quería a Jimin a su lado y todo lo que ella quería, lo obtenía.

Mientras que con Jungkook las cosas no eran muy diferentes, BamBam le había dicho lo que sentía hace un par de semanas atrás, pero Jungkook no quería herir sus sentimientos, fue lo más sincero con el, ya que realmente lo consideraba su amigo, y lo quería demaciado pero solo como un amigo.

Quería regresar, pero sabía que si regresaba de nuevo todo estaría en peligro y tenía que esperar a que sus padres por lo menos pensaran que jamás volvería con el alfa.

5 años después.

Todo el peligro que hubo una vez al fin había desaparecido, Jungkookie supo que ya habían pasado tantos años y que sus padres no estarían enterados ya de algo, aquel peligro ya había pensado.

Era momento de regresar.

Solo esperaba que el alfa lo perdonará, pero entonces sus dudas habían comenzado.

»¿Y si ya tiene a alguien más? ¿Que tal que ya me olvidó? ¿Y si nunca me perdona?«

Esas y más preguntas pasaban por su cabeza, pero no podía retroceder, había comprado el boleto a Seúl y ya tenía todo listo.

Era el momento de regresar.

Al fin había llegado a su destino, se había subido a un taxi dando la dirección de la que una vez fue su casa, era mentira que dijera que no estaba nervioso, porque realmente lo estaba, tenía miedo de que el mayor lo odiara

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Al fin había llegado a su destino, se había subido a un taxi dando la dirección de la que una vez fue su casa, era mentira que dijera que no estaba nervioso, porque realmente lo estaba, tenía miedo de que el mayor lo odiara.

Una vez llegó ahí, había visto a una mujer abrazando a una bebé, y después como Jimin salía y abrazaba a aquella mujer dandole besos. Su corazón se había roto, nadie lo había visto por suerte, y solo se fue de ahí, con lágrimas en los ojos y su corazón roto, el alfa estaba con alguien más.

La castaña vio que alguien estaba en la gran reja de la casa, apenas había llegado de un viaje bastante cansado y aquella persona se le hacía muy conocida.

-¿Jungkook?- susurro para sí misma. - ¡Jungkook!- grito esta vez sabiendo que realmente era él.

El Omega se limpio las lágrimas y volteó, viendo que a unos cuantos metros de él estaba parada la castaña, la que fue su gran amiga y confidente.

-¡Arang!- sonrió ampliamente, estaba feliz de verla después de tantos años.

Ambos terminaron por abrasarse y soltar unas cuantas lágrimas, la castaña estaba feliz de ver a Jungkook, había desaparecido y estaba preocupado por él.

-¿Dónde estuviste? Nos tenías preocupados Jungkook, mis padres habían contratado el mejor detective de Seúl para encontrarte y aún así nunca apareciste hasta después de tantos años.

-lo siento, tu sabes el por qué me fui, veo que Jimin tiene a su familia.- sonrió con tristeza, Arang sabía que eso le afectaba y solo lo abrazo, no tardaron en hacerse presentes las lágrimas.

-Jungkookie, lo siento

-no tienes porque sentirlo, sabía que eso podía pasar pero aún así tenía esperanzas

-no más lágrimas, parecemos bebés.- la castaña solo soltó una pequeña risita.- ¿Dónde te quedarás? Supongo bienes cansado, puedes quedarte aquí, mis padres no se opondrán y en tanto Jimin, no te preocupes, el entenderá.

-gracias Arang pero no, mi abuela me contacto hace algunos años, se enteró de lo que mis padres habían hecho conmigo y quiere que viva con ella, y me haga cargo de su empresa

-me alegro mucho por ti, Jungkook, me gustaría seguir viéndote, quiero que me cuentes todo, absolutamente todo.

-claro, te parece si nos vemos mañana

-claro, no hay ningún problema.

Ambos conversaron unos minutos más y se habían dado su número de teléfono, sin siquiera darse cuenta que Jimin estaba viéndolos y al momento que vio a Jungkook frente a su casa su corazón se había detenido, estaba viendo al Omega que tanto amo una vez, pero que le termino rompiendo el corazón. Ahora Yeri era su esposa y tenían una bebé muy hermosa, amaba a su familia.

No podía comenzar a sentirse confundido ahora. No ahora.

El pelinegro llegó a casa de su abuela, donde ella lo recibió con los brazos abiertos, estaba feliz de que su nieto al fin estuviera con ella, no iba a permitir que nada malo le pasará de nuevo

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El pelinegro llegó a casa de su abuela, donde ella lo recibió con los brazos abiertos, estaba feliz de que su nieto al fin estuviera con ella, no iba a permitir que nada malo le pasará de nuevo. Quería que él se hiciera cargo de su empresa, era una de las más importantes, antes de haberse casado con el abuelo de Jungkook, su familia tenía varias empresas, y una vez se casó, su apellido de Lee pasó a Jeon pero aún así sus padres no quería asociarse con ellos, por lo que cada quien manejo su empresa, sus hijos tenías la empresa Jeon, pero ella estaba a cargo de más, de las empresas Lee, sabía muy bien que Jungkook podría hacerse cargo de ellas.

-abuela.

-si pequeño.

-¿Qué pasó con mis padres?

-hijo.- la anciana solto un suspiro.- ellos están en bancarrota, desde que habían dejado de hacer negocios con las empresas Park terminaron en bancarrota.

-oh... Pobre de mis padres

-ahora tu estas conmigo y me encargaré de que ellos no te hagan daño, pero también estoy vieja y comienzo a enfermarme, por eso te pedí que tú fueras el que ahora se hiciera cargo de la empresas, y quiero que me prometas algo.

-lo que sea abuela.

-pase lo que pase, siempre seguirás siendo la persona más amable, nadie tiene un gran corazón como el tuyo y no quiero que por el dinero cambies.

-te lo prometo abuelita, eso no pasará.

Ambos se abrasaron, la abuela de Jungkook sabía que pronto moriría pero no quería decir nada en absoluto, desde hace meses había comenzado a enfermarse, no quería que su querido nieto sufriera, pero ella siempre iba a estar para el. Siempre.

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Capítulo dedicado para:
YoonkookieLove

Perdón la tardanza :'( estuve un poco ocupada, y lo sigo estando, verán, el sábado tengo un examen muy muy muy importante y he estado estudiando por lo mismo.

L@s amo!

Encontrandote [Jikook] (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora