Farewell

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Después de una corta caminata llegue al final del camino, la sangre seguía pero al frente solo había vegetación y unos grandes arbustos que parecían a simple vista una muralla que evitaba el paso o miradas mas allá. Con determinación a no rendirme, atravece los arbustos, mis ojos estaban cerrados para evitar que las ramas pudieran lastimarme de alguna forma, pero en cuanto logre pasar aquellos arbustos, los abrí.

Mire al frente, y me quede parado alli, en silencio. Lenta y dolorosamente sentía mi alma despedazandose, mientras era consumido por el terror de lo que mis ojos estaban presenciando, mi mente se agitó violentamente y sentí un escalofrío recorrer todo mi cuerpo ¿porque? Era todo lo que podía pensar.

Allí estaba ella, dulce y linda como siempre, luce tan hermosa cuando esta calmada. Uno de los pilares de toda mi fuerza, lo que me motivo a seguir cuando mas lo necesitaba, estaba justo frente a mi. Dormida tan plácidamente, sentada, recargando su espalda contra el tronco de un árbol. Vamos, despierta anghie, hora de ir a casa, ponte de pie, y limpia la sangre de tu abdomen, iremos a que te quiten el cuchillo del estomago, que traten tus heridas y estarás bien ¿verdad? Al final de todo, tu siempre estas bien, no importa que, tu debes estar conmigo, me lo prometiste. Despierta, por favor, si no lo haces, habré sido yo el que no cumplió su promesa.

Las lagrimas salen poco a poco de mis ojos, aunque no se la causa ¿porque no despiertas? Ya estoy aquí, no tienes por que temer, todo lo que me diste; El valor, las fuerzas, la alegria, vine aqui para devolverte todo ello, para pagar y agradecerte todo lo que has hecho por mi. Te lo suplico, despierta.

Mire fijamente a su estomago, un cuchillo largo la había atravesado para dejarla clavada en el árbol, sus manos, llenas de rasguños y cortadas por las espinas del camino por el cual fue arrastrada, le daban un aspecto horrible, y a pesar de eso, su cara esta tan serena, no hay miedo, no hay dolor, solo, paz, porque esta descansando. Su sonrisa, quiero verla una vez mas y lo haré dentro de poco, cuando se levante y me vea aquí, cuando sepa que no la abandone nunca, reira, me abrazara e iremos a casa, ¿verdad?... ¿ve-verdad?

Caí al suelo, lo mire, mis lagrimas convertían la tierra en lodo poco a poco, creando un pequeñísimo charco. No se porque lloro, porque me duele, si se que todo estará bien, quiero creer que lo estará, tiene que estarlo. Ella no puede morir, no así, no aquí. Me sentía ahogado en sentimientos, quería gritar, pero me era imposible, comencé a golpear el suelo, con fuerza cada vez mas grande hasta que se torno en un color rojizo por la sangre de mis manos.

Me detuve para observarla, no estuve aquí para protegerla, no pude hacer nada, esta... muerta, y es mi culpa, si la hubiera buscado con mas fuerzas, si hubiese estado con ella. Perdoname, lo lamento.

Mi cuerpo temblaba con mucha avidez, no quería estar aquí, no mas. Lo siento anghie. Perdóname por todo.

Me levante, le di la espalda y volví por mi camino, comencé a correr, sin importarme cuan cansado estuviera, sin importar las espinas que se clavaban con fuerza en mi piel, ni el camino por el cual iría, no sabia a donde, solo quería alejarme de allí, estar solo.

Pase el rio en poco tiempo segui corriendo por al rededor de 10 minutos, hasta que de pronto, senti como mis piernas no me obedecian, y cai al suelo con fuerza. La rabia se apodero de mi, pero aquello me sirvio para romper el cristal. Comence a llorar fuertemente, por al menos una hora. Me lamente por todo, y sentí que aquello le daba un ligero respiro a mi mente cuando esta estaba por ahogarse entre todos mis sentimientos.

Después de todo aquello, me levante, por fin algo mas sereno, y comencé a caminar con calma. Primero pensé en buscar a ashley, pero tal y como estoy, no haría mas que ser el centro de atención, completamente sucio, con algo de sangre tanto en mis pantalones como en mis puños. A final de cuentas decidí ir al edificio donde la veria, aunque es muy temprano aun, me daba la oportunidad de estar tranquilo y a solas hasta su llegada.

Así fue, tras un largo rato de caminar llegue al viejo edificio. Apenas entrar sentí una gran calma, el lugar abandonado hace años, transmitía una paz incomparable y un silencio bastante agradable, el peso de los recuerdos caía sobre mi. Aquí fue donde conocí a ashley, el lugar donde vi sonreir a mi hermano por ultima vez. El lugar emanaba una profunda melancolía, que se mezclaba con mi palpable tristeza. Respire ondamente, y comencé a recorrer el lugar. Poco a poco me sumergia en un estado de calama y relajacion bastante placentero, poniendo mi mente en blanco, alejada de los problemas y sentimientos. Deambule por alli, hasta toparme con una de las habitaciones que había visitado previamente. Entre a ella sin dudar, me pare unos momentos en el centro de la habitación, me tomaba mi tiempo para disfrutar cada segundo. Sentía el tiempo frenarse, y un vacio de mi alma llenarse poco a poco, por fin podía descansar un poco.

Antes esta habitación me resultaba sombría e inquietante, pero hoy, era particularmente hermosa. Camine hasta su baño, donde mire aquel espejo, los recuerdos emanaron sin que pudiese detenerlos. Recordé esa risa, y poco a poco mi mente fue retrocediendo, llevandome a momentos de mi infancia. Cuando jugabamos en el jardin, cuando me ayudaba con la tarea o me llevaba de paseo. Puse mis manos sobre el lavabo para recargarme en el, quedando de frente al espejo y mirando mi reflejo fijamente. Todas aquellas escenas que pasaban por mi cabeza, una tras otra, me conmovian, disparando en mi una emoción de furia tristeza y confusión bastante particular. Los recuerdos se hacían mas nítidos, poco a poco podía escuchar sus palabras "te quiero" "eres mi hermano" "yo te cuidare" entre otras frases que tornaban la habitación en un ambiente de miedo y frustracion, junto a una gran tristeza. Una tras otra se mostraban en mi cabeza de manera rapida y consiza, tantos recuerdos, que comenzaron a empalmarse, convirtiéndose en un conjunto de sonidos e imágenes indistinguibles. Mi corazon se acelero, queria que parara, asi que cerre los ojos, y aquello no hacia mas que aumentar, poco a poco mi desesperación crecía, era frustrante, mi mente se había vuelto una vez mas un mar de cosas muy turbias, y se ahogaba, los recuerdos me asfixiaban, quitando de mi mente todo rastro de paz anterior, mi jucio se nublo y poco a poco la ira me consumia, llenando el lugar de una tension creciente, que retumbaba en las oareces y se volvia cada vez mas densa.

- Basta, ¡basta! ¡se acabo! ¡el esta muerto! -grite a la nada con todas mis fuerzas, pero no hubo cambio alguno. El resultado era evidente, terminaría por volverme loco, pues mi cabeza dolía cada vez mas, y no podía siquiera generar un pensamiento con claridad.

Palpe con mis manos el lavabo hasta encontrar una pequeña piedra, la cual tome y arroje con fuerza al espejo. Este se estrello, sin embargo ningún cristal cayó al suelo, y aquel gran estruendo devolvio el silencio al lugar, uno profundo y doloroso, similar al de un entierro, que me tendió la mano, sacándome por fin de aquella prisión dentro de mi cabeza, volviendo a la realidad. Me di cuenta de lo agitada que estaba mi respiración, y por ello comence a tranquilizarme. Mire el cristal roto, las multiples imagenes de mi, y entonces, comence a recordar algo.

Después Del Fin: Un Mundo De Recuerdos (terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora