Capítulo 3

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Capítulo 3

Luego de recuperar el aliento Alice intentó procesar muy detenidamente aquellas palabras de Olivia, pero no le era posible, ella no podía creerlo y su impresión no se iba.

–No puede ser–dijo Alice tartamudeando.

– ¡Lo sé! El 2087 se fue volando, yo ni lo sentí, me pasaron bastantes cosas desagradables-luego de una pausa agregó–pero bueno, Alisha ¿Te parece si hacemos el trabajo juntas?–señaló una información que tenía en la tableta.

– ¿Cómo?–Alice no se había dado cuenta que la profesora les había mandado un taller de repaso a cada tableta de los estudiantes–Ah, claro

Olivia frunció el ceño, Alice pudo notar que la pecosa se sentía atraída por la indiferencia de ella, o tal vez sentía curiosidad, pues ella era una nueva estudiante, de la que se hablaba mucho en la ciudad por su repentina aparición; pero no le dio mucha importancia.

Intentó y se repitió a sí misma que debía concentrarse en el taller, que debía esforzarse un poco y pensar en otra cosa, pero le era imposible, se sentía sofocada y no podía evitar sentir desesperación de estar allí junto a ella, prácticamente había dejado que Olivia realizará todo, sacando la excusa de que el curso anterior, en su antigua escuela, no había entendido completamente algunos temas y, como era un taller de repaso, le resultaba difícil de resolver, a lo cual Olivia no se opuso ni una sola vez.

Cuando estaban a punto de terminar el taller Alice sintió una mirada sobre ella, volteó y encontró a un chico casi de su misma edad mirándola de una manera muy curiosa. Apenas y distinguía que tenía el cabello y los ojos como el color de la miel, y la piel incluso más pálida que la de ella.

– ¿Olivia?–dijo después de notar que el chico la llevaba mirando desde hace un buen rato.

– ¿Sí?

– ¿Ves aquel chico de unas filas más atrás?

La chica de cabellos rojizos volteó lo más discreto posible, luego frunció el ceño.

–No ¿A quién te refieres? Yo no veo a nadie.

– ¿Segura? Está unas filas más atrás–Alice volvió a mirar atrás, pero para su sorpresa el chico ya no estaba.

La chica bufó–Segura, si mi madre no me hubiese quebrado los lentes, lo podría ver con claridad, en cambio, no logro ver nada–luego de una pausa añadió–.Bueno ¿Qué pasa con el chico?

–No dejaba de mirarnos, pero creo que ya se ha ido.

–Seguro solo le has parecido guapa, tienes unos ojos preciosos. No te angusties por eso. Pero si te da curiosidad el chico, al salir para almorzar miraré en la LiPo si encuentro la lista de los estudiantes que nos acompañarán en esta clase, seguro si le encontramos–Olivia le dio un pequeño codazo, luego suspiró–, continuemos, porque siento que no me has ayudado en nada y eso no me parece nada bien, si no entiendes algo te lo puedo explicar y miras a ver que puedes resolver.

Alice solo asintió avergonzada, diciéndole que sí la ayudaría. Luego volvió a echar un vistazo hacia atrás, allí estaba el chico, mirándola con una sonrisa, como burlándose de ella, sin quitarle la mirada de encima ni un segundo.

(...)

–Espero que mi LiPo no se haya trabado con la descarga que nos ha dado la profesora, siempre se pasa con la descarga diciendo que no deberíamos tener acceso a internet en las horas de clase, lo cual me parece algo exagerado...la verdad es que esa profesora no me agrada mucho–dijo Olivia algo irritada mientras salía del aula.

Alice se sintió confundida al escuchar la palabra "LiPo", la cual Olivia ya había mencionado varias veces. Luego le dio un pequeño vistazo a su brazalete que no paraba de vibrar de una forma molesta.

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