Lemon Cream

Ángel (JaeDo)

Las piernas de DoYoung se mecían lentamente mientras permanecía sentado en el taburete de la isla de la cocina mirando a los movimientos precisos de Jung YoonOh. Mordió su dedo meñique cuando sus ojos bajaron por la curva atractiva de la espalda desnuda del contrario y se sonrojó cuando se encontró pillado en el acto por su reflejo en las ventanas.

YoonOh no dijo nada mientras se dirigía hacia él con una taza de café humeante y una sonrisa de hoyuelos que hizo que todas las mariposas en el estómago de DoYoung revolotearan hacia su garganta. Sus piernas dejaron de moverse y a pesar de llevar medias sus pues se sintieron fríos.

"Bébelo, te despertará" le ordenó la voz profunda de YoonOh, haciéndolo enderezarse en el acto y tomar la taza con cuidado, soplando con cuidado antes de tomar un sorbo "¿descansaste bien?"

DoYoung asintió y su mano se dirigió hacia la rodilla que se había lastimado el día anterior; el golpe en su mejilla ya no molestaba... pero seguro que el moretón en su ojo estaba del color de una uva morada. Debía verse lamentable ante alguien tan atractivo y perfecto como su vecino.

"Huir no te servirá de mucho ¿lo sabes verdad?" apenas vivo un piso lejos de ti."

"... planeo irme pronto" susurró como si le contara un secreto, frunciendo el ceño porque esa era su arma letal para no llorar; él era un chico fuerte, pero anoche había temido que su padre lo matara a golpes.

"Irte pronto... no suena como algo razonable tampoco" YoonOh volvió a girar sobre sus talones, tomando un plato para colocar el pan tostado, la mermelada y unos pedazos de queso. DoYoung volvió a observarlo con ojos ágiles.

"Si los reporto me iré a un casa hogar del gobierno y viviré peor" respondió antes de darle un sorbo al café y quemarse un poco la punta de la lengua.

"No estaré siempre para ayudar."

DoYoung lo observó mientras se sentaba frente a él y sus rodillas se tocaban ligeramente bajo la mesa. Sabía que no debería haber corrido hacia su vecino, porque él sabía que era policía y eso podría acarrear grandes problemas para su pequeña familia disfuncional; para ser ciertos su padre no le importaba demasiado, pero su madre era únicamente una víctima de la violencia familiar... no podía pedirle que le ayudara porque aun cuando no lo hacía le iba peor que a él.

"No espero que lo esté" los ojos de DoYoung centellearon mientras dejaba la taza de café a medio beber "debería marcharme ya."

Esperó que Jung YoonOh lo parase, pero como era de esperarse eso no pasó.

"Cuídate."

Llevaba diez minutos con el mismo cigarrillo, sentado en el suelo del pasillo después de llegar de clases, escuchando fuera como las cosas eran lanzadas contra las paredes e improperios eran dichos en voz alta. Sabía que su madre no estaba presente porque no la había escuchado sollozar y chillar de miedo. Por lo menos los daños serían únicamente materiales.

Expulsó el humo en el momento justo en el que la puerta del departamento fue abierta abruptamente y el rostro enojado del señor Kim se asomaba para mirar al exterior. DoYoung tosió el humo fuera de su boca y se levantó con avidez y una pizca de miedo. Siempre había tenido miedo, desde que era solo un niño y su madre le decía no puedes contra él... así que solo obedece ¿sí?