Lemon Cream

Nana Nana (JaeSung)

"Jisung-ah" su voz tembló ligeramente cuando el menor entró en el departamento por la ventana y con una maleta bastante grande a sus espaldas.

Se habían conocido desde que eran ambos unos críos, pero Jaemin muchas veces no podía dejar de pensar que no lo conocía lo suficiente. Jisung había sido un personaje demasiado intrépido, callado y misterioso; todo acerca de él podía ser cierto como una farsa y Jaemin jamás se atrevería a cuestionarle algo por el simple hecho de que tenía miedo de la verdad.

"¿Estás bien?" preguntó cuando en medio de la oscuridad el menor se sacó la chaqueta y una mancha roja bastante grande arruinaba la tela blanca "¿Te han herido? Llamaré al 911."

"No" gruñó mientras desabotonaba la camisa rápidamente para luego lanzarla al suelo y asomarse por la ventana mirando a los alrededores de la pintoresca vecindad en la que solía vivir años atrás "no haga nada, me iré pronto."

"¿Qué? ¡No! No es necesario, no debes irte inmediatamente, en serio" aseguró Jaemin mientras se paraba tras la delgada espalda de su menor y mordía su labio con nerviosismo "¿Qué está pasando, Jisung-ah?"

"Nada realmente, ve a descansar un poco y no te preocupes por mí."

Estúpido, claro que se iba a preocupar si llegaba cerca de las cuatro de la mañana y entraba a su habitación como un tipo de Romeo barato y con una camisa manchada de...

"Tienes una herida, déjame ver y te prometo que iré a dormir ¿está bien de esa forma?" preguntó y Jisung colocó su mano en su cuello, masajeándolo ligeramente antes de darse vuelta y enfrentar al contrario que frunció el ceño al darse cuenta que no había herida.

"¿Entonces de quién es?"

"Repito que es mejor que no pregunte tantas cosas" Jisung estaba más alto, el cabello le caía sobre los ojos ocultándoselos y seguramente debía estar muriéndose de frio sin una camisa... Jaemin prefería no ver más de lo necesario. No se veía tan como un niño, y tampoco se comportaba como uno "debe evitar meter las narices en los asuntos de los demás."

"Entonces para comenzar, hubieses ido a tu casa que esta como una cuadra más arriba y te hubieses escondido allí" ahora si, estaba bastante molesto "no puedo creer que me veas preocuparme por ti y no puedas decirme nada en lo absoluto, yo-"

Sus quejas pararon cuando Jisung dio un paso delante y lo tomó de los hombros con demasiada dureza; parecía haber olvidado quien era el mayor y simplemente le importaba poco. Se inclinó un poco más cerca del rostro de Jaemin y en un susurro dijo: "maté a alguien hyung, justo antes de venir aquí."

Tres días después, la ventana de Jaemin volvió a abrirse a las tres de la mañana y pasos de botas lo despertaron totalmente asustado hasta que sus ojos se encontraron con los de su menor que lo miró apenas durante unos segundos antes de soltar la mochila y luego cerrar la ventana y correr las corinas. Jaemin tragó grueso mientras se escondía hasta la punta de la nariz en sus cobijas. Rogaba que su hermana que dormía en la otra habitación se encontrase totalmente dormida y que no viniese a tocar su puerta justo en esos momentos.

El colchón se hundió bajo el peso de otro cuerpo y escuchó como deshacía las agujetas de las botas y luego las dejaba sobre el suelo. Más objetos cayeron - esta vez más silenciosos que antes - y luego las mantas fueron retiradas y otro cuerpo se abrazó a él.

"¿Vienes de hacer... eso?" le preguntó bastante temeroso de la respuesta.

"...si" se tensó inmediatamente, no podía imaginar a su pollito haciéndole daño a alguien más, pero tampoco podía descartarlo cuando aun con todo el amor que le tenía, sabía que podía llegar a ser una persona bastante retorcida "¿ahora le doy miedo?"