Lemon Cream

Sweet Creature (JaeRen)

Lo encontró en su jardín, un cuerpo pequeño hecho un ovillo en un lecho de rosas azules, su piel blanca como mármol pulido brillaba al igual que los cabellos claros que se movían con la brisa en una danza hipnotizante.

Las orejas puntiagudas estaban sonrojadas por el intenso sol y sus ojos se abrieron tímidos cuando sintió la presencia de JaeHyun a su alrededor, dedicándole una dulce sonrisa. Era un hada, porque incluso su voz sonaba como un canto mágico.

"Ayúdame por favor, no tengo donde más ir."

¿Cómo podría JaeHyun negarse ante una petición dicha de manera tan dulce?

RenJun era su nombre, le gustaban las cosas dulces y dormir entre las flores del jardín cuando el día estaba templado y los rayos del sol no lo afectaban. También le gustaba escuchar las canciones viejas que ponía JaeHyun en la radio de la sala y comer sandia con los pies descalzos en el pórtico mientras los niños pasaban alrededor.

Con los días convirtiéndose en semanas, JaeHyun fue acostumbrándose a la presencia de RenJun en la casa, sin siquiera preguntarle cuando se marcharía donde pertenecía, a ese mundo mágico del que no debió salir nunca porque era una flor delicada.

RenJun entró a la sala donde JaeHyun se encontraba leyendo un libro de poesía, oliendo a flores como todas las mañanas después del desayuno, ese casi imperceptible aroma lo relajaba y lo hacía sentir en casa. El muchacho se abrazó a el sin siquiera decir una sola palabra, pasando sus delgaduchos brazos alrededor de su tronco y posando su cabeza en su pecho. JaeHyun enterró su nariz entre los sedosos cabellos mientras cerraba sus ojos con una pequeña sonrisa.

"JaeHyun." Susurró el pequeño que había crecido en pocas semanas, etéreo y hermoso. "JaeHyun."

No usaban honoríficos, esa era la magia de la presencia de RenJun, esa refrescante presencia que lo hacia relajar hasta sentirse adormilado.

"JaeHyun." Repitió mientras depositaba un pequeño beso sobre donde se encontraba el corazón del nombrado. "Te quiero JaeHyun."

RenJun alzó el rostro y el sol parecía resplandecer con más fuerza fuera en el jardín mientras sonreía y esperaba una respuesta del contrario.

JaeHyun sonrió de vuelta y asintió.

RenJun frunció el ceño y lo apretó aun más entre sus brazos sin intenciones de soltarlo. "Te he dado un beso, ¿No me darás uno a mi también?"

Las mejillas del menor se tiñeron mientras le decía aquellas palabras y se acercaba nuevamente al pecho del mayor para darle otro beso en el mismo lugar. La timidez dejo congelado a JaeHyun que haló sus mejillas de manera juguetona, haciendo que RenJun se quejara bajito y se enterrara en el espacio entre su cuello y su hombro.

"RenJunie anda muy amoroso hoy."

"Es la primavera, me hace sentir enamorado de cada cosas que haces, JaeHyun."

"¿Nunca me dirás hyung?" intentó desviar la conversación, nervioso por las palabras dulces del chico.

"No, soy un hada, he vivido más que cualquier persona en esta tierra."

"No puedo imaginarte creciendo."

"Puedo crecer si lo deseas, envejecer contigo, vivir todos los días a tu lado." Le ofreció mientras apretaba las manos de JaeHyun entre las suyas. "Si JaeHyun me ama, puedo hacer lo que sea."

Tocó la piel descubierta de su pierna mientras permanecía dormido. El pecho subiendo y bajando despacio y las mejillas sonrojadas. JaeHyun recostó su cuerpo al lado del de RenJun, atrayéndolo por la cintura con cuidado y sintiendo a este aferrarse como siempre hacia cuando estaba consciente. Un gimoteo bajo se escucho mientras RenJun abría los ojos despacio, tal como la primera vez.

Las pesadas cortinas aun seguían cerradas y el sol no los molestaba. JaeHyun tocó las orejas puntiagudas y RenJun se sonrojó totalmente, cerrando sus ojos nuevamente mientras se dedicaba solo a sentir.

"También te quiero."

Las hadas encantaban hombres, los confundían para hacerlos pensar que sentían cosas que no, y los llevaban al borde de la locura solo para luego dejarlos abandonados. JaeHyun no pudo confiar hasta que vio a RenJun desesperado por su atención y sus gestos dulces. Había pasado tanto tiempo desde que el más delgado había llegado, incluso sus cabellos estaban ligeramente más largos, tocando sus pequeños hombros.

"¿Besarás a esta hada, o dejarás que desaparezca a causa de tu amor?" Susurró RenJun mientras se abrazaba a JaeHyun con brazos y piernas, en una posición algo incomoda para el contrario.

"No puedes irte a ninguna parte, RenJun."

Selló ambos labios en un casto beso, tan inocente como la propia existencia del hada. Rozando apenas los belfos rosas y sonriendo cuando el contrario se acercaba a su rostro en busca de más.

RenJun comenzó a ser más demandante, alejándose y retirando la única prenda que llevaba puesta, mostrando su piel firme y blanca, los pequeños huesos marcándose en partes indicadas y las partes llenas de su figura, se acercó nuevamente a JaeHyun, besando su frente mientras tomaba sus manos y las guiaba a la cintura desnuda.

"Eres el ser más dulce que he conocido."

Los ojos del más delgado brillaron con alegría mientras recibía el halago con emoción.

"JaeHyun es la criatura más hermosa y dulce de este mundo."

Dijo antes de fundirse entre las sabanas con el más grande, uniendo sus labios nuevamente y entregándose a la nueva experiencia como un amante apasionado.

🏵️

Dedicado a @CamilaGallardo153

Gracias por pedir una shipp tan bonita ♥️

Bueno, creo que en el TaeDo no mencioné a nadie en el pedido y lo lamento mucho TT siempre olvido lo importante.

Pronto terminaré con estos pedidos y tomare nuevos (Lo dejo a mi elección porque no escribo cosas que no me gustan 😭) así que espero que los vayan pensando.

Adivinen cual será el siguiente. 😏

🦄