Lemon Cream

PUBLIC GAME (TaeDo)

Me encantas.

DoYoung tembló cuando escuchó la voz de TaeYong en su oído, alejando el sonido de la música y de las personas alrededor; las manos del mayor se presionaron un poco más sobre su cintura y el pelinegro sonrió tontamente con las mejillas sonrojadas bajo las luces de neón. La gente bailaba alrededor, bebía cerveza y fumaba cigarrillos mientras hablaban de cosas triviales. Ese no era el ambiente en el que DoYoung se desenvolvía comúnmente... lleno de lujos, carros deportivos, viernes de paseos en bote, césped recién podado y vino caro.

Pero había descubierto que cualquier lugar al lado de TaeYong era bueno y que no necesitaba de mucho para divertirse y relajarse. Había vivido cosas que le habían sido prohibidas, lo había hecho salir de su burbuja y probar el mundo... disfrutar cosas que eran secretas.

Quédate conmigo, Dongs.

DoYoung abrió sus ojos mirando los anhelantes de TaeYong, sintiendo su corazón dar tumbos de emoción, experimentando calidez en todo su cuerpo mientras sus labios se unían en un beso lento y enterraba sus dedos en el suave cabello del mayor, suspirando mientras seguían balanceándose al ritmo de la música de fondo.

"¿Qué haces aun con él?"

El pelinegro se preguntó lo mismo mientras abrazaba a TaeYong por detrás de su cuello y se encogía de hombros. No le gustaba hablar del prospecto de novio que sus padres le habían conseguido en un descuido; deseaban mantener el prestigio de la familia y adjuntar el apellido Kim al de los Qian; tal vez incluso tener la oportunidad de comprar unas cuantas acciones en uno de los negocios de la familia venida de la republica de China.

"No me gusta compartir, no me gusta pensar en ti besándolo o abrazándolo" los ojos de TaeYong lo miraron con dureza y DoYoung gimoteó antes de darle otro corto beso en los labios, intentando que las cosas no se pusieran demasiado serias, después de todo estaban ahí para divertirse un poco "no intentes convencerme así... no me agrada verte triste y agobiado."

"No lo estoy, te lo prometo" aseguró rozando su nariz con la mejilla del contrario, tropezando con sus propios pies y sintiéndose mareado y ligero de pensamiento mientras comenzaba a reír "creo que... tal vez bebí un poco de más."

Era un eufemismo bastante descarado... había probado todos los tragos que le habían causado curiosidad, sobre todo aquellos dulzones; el mayor le arrebató algunos vasos cuando pensó que era suficiente, pero para ese entonces era un poco tarde.

"Dongs..." el ceño de TaeYong se frunció mientras miraba alrededor y afianzando un poco más el agarre en la cintura de su novioalgomásqueamigos, lo ayudó a caminar hacia la salida del depósito en el que habían organizado la fiesta. El aire golpeó el rostro del pelinegro y esté cerró sus ojos con molestia, dejando al mayor guiarlo hasta meterlo dentro del auto y colocarle el cinturón de seguridad.

El menor parpadeó repetidas veces, intentando levantarse mientras TaeYong ponía el auto en marcha e iniciaba a manejar por las calles. Le gustaba verlo conducir, apretar la mandíbula con un poco de enojo, fruncir las cejas y mordisquear sus labios, incluso cuando las venas se le marcaban un poco en su cuello por la rigidez con la que manejaba. DoYoung colocó su mano sobre el muslo derecho de TaeYong, apretándolo suavemente mientras sus ojos eran humedecidos por el placer que comenzaba a rebozar en su interior.

"¿Por qué te molestas conmigo?" murmuró con un puchero de aquellos que TaeYong había encontrado adorables desde la primera vez que se vieron. De esos que le gustaba besar y mordisquear, de los que lograban que perdiera la determinación y olvidase las razones por las que ocasionalmente se enojaba con DoYoung.