Kicked (JeDo)

3.5K 227 102
                                        



La historia de cómo Kim DongYoung y Lee Jeno se conocieron era un poco más extraña y larga de lo que el mayor desearía reconocer. Y hasta ahora, el simple hecho de ayudar a un muchacho en la calle seguía trayéndole problemas.

DongYoung – estudiante de enfermería - tenía 22 años cuando caminaba de vuelta a casa envuelto en un abrigo azul y una bufanda violeta, los pies le dolían por correr de aquí para allá en el ala de emergencias y su estomago gruñía afanado por una comida caliente y deliciosa. Había dormido apenas unos minutos y sentía que se caía a pedazos mientras el viento gélido le golpeaba los ojos sin gentileza alguna.

Bostezó cuando se sentó en la estación de buses para tomar el último de la noche. Sacó su móvil y estaba listo para revisar los mensajes de su cuenta de Kakao cuando un leve gemido de dolor llegó a sus oídos. DongYoung alzó la mirada y miró a su alrededor, girando hasta ver el callejón a sus espaldas y un cuerpo tirado en el piso y bastante magullado.

Su vocación tuvo mucho que ver en las decisiones irracionales que tomó en cuestión de segundo, llevando la acción de ayudar a quien se encontraba boca abajo en el suelo y gimiendo levemente.

Sus ojos se encontraron y el chico no debía ser mucho más joven que su primo lejano, Hwang RenJun quien tenía 17 años.

"Hey, ¿quieres que te lleve al hospital?" preguntó mientras intentaba incorporarlo. Pero el chico no cooperaba y negaba con la cara roja a causa del dolor. "Si tienes alguna costilla rota puede incrustarse en tu-"

"Nada... de hospitales." Dijo entre dientes, sentándose mientras expulsaba todo el aire de sus pulmones.

DongYoung apretó los labios y colgándose la maleta correctamente de un hombro, apoyó el brazo del otro chico en sus hombros y lo miro decidido. "Bien, entonces permíteme ayudarte."

Descubrió su nombre poco después de llegar a su departamento – debido a que no quería darle su dirección al mayor, y tampoco quería que le pagase un taxi – y curó sus heridas con bastante cuidado mientras escuchaba la historia de los ladrones, como no se dejó robar y terminó golpeado en un callejón. Aseguraba que aunque muchas personas lo vieron, solo el chico alto y flaco que llevaba uniforme de enfermero se acercó.

"Entonces fue una suerte para ti."

Lee Jeno apenas pudo sonreír con la cara toda magullada.

Al día siguiente, cuando DongYoung se despertó y caminó hacia la sala esta se encontraba vacía. El chico se había ido y esperaba que no volviera a meterse en problemas. No se volverían a ver, obviamente.

Obviamente... no fue así.

☢️

Un mes después, mientras DongYoung merendaba algo en su pequeño departamento, la puerta fue aporreada con fuerza durante algunos segundos, sobresaltándolo y haciéndolo dudar. Era tarde... bastante en realidad.

Tomó un sartén y se dirigió al pequeño recibidor, abriendo y alzando en alto el objeto para solo ver a un hombre viejo sujetando la chaqueta de un rostro que apenas recordaba. El silencio duró apenas unos segundos antes de que el más viejo de los presentes carraspeara y empujara al más joven contra el cuerpo de DongYoung.

"La próxima vez vigile mejor a su hermanito." Habló antes de dar un paso atrás y dirigirse al ascensor, dejando atónito a DongYoung que no entendía nada. Ese chico no era su hermano.

"Estoy en problemas... de nuevo."

☢️

Los problemas de Lee Jeno eran mucho más graves de lo que había percibido DongYoung cuando se conocieron. El muchacho permaneció acostado todo el domingo en su sofá y solo se levantaba para ir al baño o tomar algo de la mini nevera del mayor. La soledad era mucho más agradable que andar cuidando de un mocoso que se metía en peleas callejeras y mostraba rasgos de cleptómano.

Lemon CreamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora