Perdido en la oscuridad

Empezando con la verdad

-Hola... -le dió Dean la bienvenida con una sonrisa, tan pronto las iris verde grices enfocaron sus ojos esmeraldados. La dulzura en su voz hablaba de cuanto lo amaba por sobre todas las cosas y cuanto ansiaba su bienestar- ¿te sientes bien?.

-Aha... ¿me trajiste de la muerte, verdad? -preguntó el menor sin tono de reproche... sólo para consultar si efectivamente había estado muerto-.

-Fue Crowley... -le respondió el mayor- lo extraño es que no me pidió nada a cambio...

-Tarde o temprano el va a tomar algo... y no sabemos qué... -dijo y su voz permitió expresar parte del miedo, la confusión y la incertidumbre que habitaban en él, que en ocasiones le provocaban sentirse como un niño pequeño-.

-Vamos un problema a la vez ¿sí? no perdamos la cabeza ahora -le dijo el mayor dándole un pequeño toque para reconfortarlo- el maniático que te envenenó sigue suelto... -por supuesto se refería a Travis-.

Sam no creía que regresara, puesto que ya había conseguido su verdadero objetivo, aunque con Gray y Ty en conocimiento de sus acciones solo le quedaba irse del país o regresar por ellos para eliminar cabos sueltos... reflexionar en eso hizo que se pusiera muy pálido y se le secara la boca. Dean pudo ver en sus ojos que tenía ganas de llorar-.

-Cómo acabará esto... -lanzó el joven con bastante temor por el futuro de sus amigos.

-No vamos a dejar que nos tome por sorpresa de nuevo...

-Me preocupa que quiera regresar por Gray y Tyler-.

-El lobo ya tomó medidas...

-¿Qué clase de medidas?... ¿tienen certeza de que será suficiente?...

-Es magia antígua. Un sello de inhibición de portales más siete anillos de protección exoaúrica, gentileza de los primeros habitantes de Ávalon en Inglaterra, también nosotros lo estamos usando... -Dean lo llevaba en la cara interna de la camisa que usaba a modo de chaqueta sobre su remera básica y se lo enseñó-.

-¿En serio? ¿Puedes imprimir un hechizo y estamparlo en una remera y aún funcionará?

-No me preguntes como es que un dibujo hace eso... aunque si quisieras tatuártelo en la nalguita derecha creo que se te vería lindo...

Sam le tiró la almohada que tenía a mano y al poco su estómago hizo un ruido tan fuerte que los dos lo escucharon.

-Te pones muy irritable cuando tienes hambre... -lo invitó Dean a salir de la cama- vé a darte un baño, tendré listo algo para cuando salgas -lo palmeó y salió de la habitación-.

Al buscar la muda de ropa limpia para salir de la ducha, Sam cayó en la cuenta de que Crowley lo había salvado... y por un impulso marcó su número para agradecerle, talvez arreglar las cosas... pero el mayor solo ignoró sus llamadas... y decepcionado, arrojó el teléfono a la cama y salió.

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Por la tarde recibió la visita de Gray y Tyler, Dean se despidió para irse a trabajar y dejó a Sam a solas con sus amigos:

-Hola, bienvenido de vuelta... ¿cómo te sientes? -lo envolvió el rubio en un abrazo-.

-Bien... me parece un sueño estar aquí con ustedes...

-Me alegro de que no sea un sueño -lo aferró más con mucha calidez y Sam del mismo modo. Luego apartándose un poco y tomándole la mano el rubio agregó- siento mucho lo que pasó... siento no haberme dado cuenta...

-No tuvo que ver contigo, simplemente no te dejaron percibirlo, Travis traficaba con fuerzas muy poderosas... -pronto agregó- también lamento haberles mentido, incluso haber involucrado a Robin, pero es verdad que un demonio demasiado poderoso está tras nosotros... cada día que pasa se acerca más ese momento y si bien aún debo encontrar el modo de vencerlo sin ustedes no habría tenido la menor chance...