Lazos Cruzados《Dramione》

14.Azkaban

Habían pasado un mes, pero todavía era raro ver a Malfoy y a Granger juntos, dos personas que desde siempre parecían odiarse, conviviendo juntos, se les veía en todo momento a la par. Aunque era habitual verlos muchos afirmaban que Hermione le había hecho un filtro de amor al Slytherin o que Draco la utilizaba para luego cortar con ella y dejarla mal o para escapar de Astoria. 

Todo parecía marchar bien, salvo el problemilla de que el padre de Draco era acusado como mortífago tras Harry haber afirmado que el-que-no-debe-ser-nombrado había revivido. Draco no sabía qué creer, no conocía a su padre en absoluto tampoco le preguntaba y ni le había mencionado nada sobre lo suyo con Hermione, los padres de ella lo sabían y como si fuera un milagro, Lucius no leyó ninguna revista de corazón de bruja o cualquier artículo en el periódico pues aparecían ellos dos en portada. Narcisa le envió una carta explicándole que ella había ordenado a los elfos que interceptaran todos los artículos por el estilo y los destruyeran. La madre de Draco se lo había tomado estupendamente, incluso  había invitado a Hermione a la mansión para conocerla.

Como todo el mundo sabe todos los secretos salen a la luz algún día y este día salieron dos. Lucius se acababa de enterar de que su hijo tenía novia, una sangre sucia y la mejor amiga de Harry Potter, la segunda, no tan importante...era que, lo iban a juzgar por ser mortífago.

Draco recibió una carta de su madre. No supo ni como reaccionar.

Querido hijo:

Tu padre será juzgado mañana. Puede que lo vayan a enviar a Azkaban, iré al juicio con el, pero tu no podrás ir. Quédate en Hogwarts, te lo ruego. Tu padre no esta de muy buen humor; un contacto suyo le preguntó sobre tu relación con Hermione. No me escribas hijo, por seguridad.

Mándale saludos de mi parte y cuídate Draco.

Con amor

Narcissa M.B

Draco dejó la carta y le dio un trozo de su tostada al búho de su madre, el ave después de comer se marchó. Theodore que estaba a su lado le puso la mano en el hombro.

-Draco, tu padre es fuerte, estará bien. Seguramente se va ha librar, siempre lo hace.

-Mi padre no me importa en lo más mínimo, es un cabrón, lo que me importa es mi madre. Si mi padre llega ha entrar a Azkaban mi madre lo pasará muy mal. ¿Y si la juzgan también a ella?

-Tu madre no a hecho nada malo. Es una mujer maravillosa.-Draco asintió desganado, lo que llamó la atención de Hermione que lo observaba desde hace un rato.- Ve con ella. No para de mirar- sonrió el pecoso. Draco se levantó y acto seguido lo hizo Hermione, salieron del Gran Comedor y se perdieron entre los pasillos.

-¿Draco, que te pasa? Estas muy desganado.

-He recibido un búho de mi madre. Mi padre va ha ser juzgado y puede que lo metan a Azkaban.- Hermione se quedó quieta.

-Ese lugar es horrible. Seguro que se puede hacer algo, después de todo es Lucius Malfoy, es un hombre muy respetado. No te preocupes por el, seguramente gane el juicio.