—¡Dijiste que no vendrías!—me dijo Alex—. Sube rápido, ellos vienen en unos segundos.
Subí rápido a su auto y de inmediato arrancó.
—Me duele la cabeza—dije.
—¡¿Tomaste?!—gritó.
—¡No! Confundí el vaso, pero no tenía sabor a alcohol, era un sabor...
—Mierda—susurró él—. Ellos se darán cuenta. ¡Sol por qué lo hiciste! Matías habló contigo antes.
—¿Donde está Zoe?—pregunté.
El no respondió.
—¿Quieres manejar un poco más despacio? Quiero vomitar.
—Si lo hago seguramente Matías y su calmada forma de conducir nos alcance—dijo—. Debería haber dejado que él te encontrase.
Yo giré a verlo.
—Cállate.
—De nada—dijo.
—¿Cómo sabías?—pregunté—. Que yo estaba ahí.
El negó con la cabeza.
—Eso fue lo peor.
Yo fruncí el ceño.
—Emma me marcó, me dijo que estabas ahí. Temía que esto sucediera y en ese momento tome el auto. Venía a medio camino cuando Matías me dijo qué alguien le había dicho que te habían visto ahí y que ya se dirigían para la casa dr Demian.
—Afortunadamente vos me encontraste primero—dije.
Entonces ahí hubo silencio.
Joder, me duele demasiado la cabeza.
—¿Y ese vestido? Es de Zoe, ¿Cierto?
—¿Cómo lo sabes?—pregunté.
—Te aborrece ese tono de morado, Sol.
Era cierto.
—Sí es de ella—dije y empecé a reír—. Pero me queda, muy bien. Mi trase...
—¡Sol ya!—gritó.
Lo ignoré y mejor cerré los ojos mientras llegábamos a la mansión, aparcó el auto y yo entré corriendo al baño, tenía unas nauseas tremendas.
¿Que fue lo que bebí? ¿Cómo pueden soportarlo?
Me ví en el espejo y era un desastre, me cabello y mi rostro estaban... peor que Emma. Me lavé la cara ahí nada más para salir, todo me daba vueltas y afortunadamente no era de esas que se le salía miles palabras locas.
—Fui por ella, ya está en la casa—escuché decir a Alex por el celular—. Esta bien, se dormirá rápido.
¿Yo? ¿Dormirme rápido?
—No me vas a dar órdenes Matías, en ese caso las daría yo. Pero bien, solo no llegues antes de la una.
Pero que preocupado estaba Matías.
Ví que Alex sonrió.
—No quiero conocer más chicas—dice él—. Créeme que no.
Alex sonrió al teléfono.
Esta tan enamorado de Emma.
Y yo tan idiota.
Me quité los tacones pues seguramente no podría subir con ellos las escaleras.
—¡Bye me voy a mi cuartolandia!—dije y...
ESTÁS LEYENDO
2 | Todo lo hice por nosotros
Fiksi Penggemar"Bastaba que tan sólo sonrieras para que me diese cuenta que eres aún más de lo que creía que eras, me enamoré de ti, todo lo hice por nosotros, Sol" SEGUNDA PARTE DE [ TLHPT ] Historia ORIGINAL