Malcriado ( yaoi/gay) FINALIZADA

capitulo 16: biblioteca (E)

Narra Derek.

Durante las clases, Dante seguía distante, y se le veía muy pensativo, y evadia mi mirada.

¿lo hice enojar?

A la hora del almuerzo recibí un mensaje de mi hermana, disculpame porque no comería con nosotros.

No me dio detalles así que la ignore.

- ¿vamos a almorzar?- pregunto Dante mirándome por primera vez en el día.

Mientras se estiraba levantando los brazos en el aire.

-si claro - le sonreí tomando el dinero de mi mochila, y el saco su almuerzo.

- la clase estaba un poco difícil, pero logré entender.-menciono mientras caminábamos por el pasillo.

- si tienes razón - en realidad no preste atención por verte a ti, ¿que pensaras si te dijera eso?

- disculpa si actuó raro hoy, es sólo que tengo algunos problemas - se rasco la nuca con un leve sonrojo incómodo.

Debo fingir que no lo se.

- Oh, pensé que sólo tenías sueño - le sonreí.

- eso también- me devolvió la sonrisa cautivandome de nuevo.

- iré a comprar, si quieres consigue mesa - era la primera vez que estábamos completamente solos, y comeriamos como una pareja, sonreí mientras caminaba a la barra.

Al fin podría tener toda su atención en mi al menos por hoy.

Compre mi almuerzo y al regresar Dante estaba conversando con Erik.

Quien al verme desvió la mirada molesto.

Admito que eso me puso muy nervioso, ¿yo que le había echo? Si Hiba a molestarce conmigo merecía respuesta.

Hubo un pequeño silencio cuando llegue, el cual fue roto por Dante.

- ¿porque no está aquí Alessa?- pregunto curioso a ambos.

- no lo se, me envió un texto diciendo que no vendría.

- la tonta esta castigada junto a otros dos chicos -bostezo aburrido Erik - al parecer querían fugarse para algo.

- ¿al parecer?- pregunte queriendo más información, esa idiota.

- si, no le prestó atención, no es algo que me interese - se encogió de hombros sin mirarme a la cara.

¿Cuál era su problema?

- ya veo, lo siento-decidí dejarlo por la paz, ya torturar a Alessa hasta que me lo cuente.

- ñe- dijo en respuesta, Dante y yo lo miramos confundidos mientras el no nos miraba.

- estas raro hoy Erik, ¿estas bien?- pregunto Dante ladrando la cabeza curioso.

- si, nada importante - me miro de reojo de manera fría.

¿no soy importante? Entonces porque me mira tan feo.

- es extraño que actúes así - insistió Dante - usualmente siempre continúas las discuciones.

- sólo estoy cansado Dante - lo miro mal a él está vez - o acaso ¿quieres hablar de tus problemas?

Dante se sonrojo de inmediato negando freneticamente con la cabeza y comiendo si almuerzo rápidamente.

- delicioso- logró decir con las mejillas llenas de comida y migajas en las comisuras.

Debo decir que no se veía tan adorable así.

Lo mire raro, y el hizo un intento de sonrisa.

-como sea - respondió Erik comenzando a comer el también.

- okay parece que hoy están muy estresados- trate de romper la tención, sin embargo sólo logré que la mirada filminante de Erik me diera escalofríos.

- Bueno, me voy, tengo que ir a buscar algo a la biblioteca -fijo Dante apresurado y saliendo del comedor

- vallamos con el, sólo espera a que termine- dijo erik con tranquilidad.

Me puse nervioso en el instante en el que nos quedamos solos, ya que cuando eso sucedía algo ocurría entre nosotros.

- listo, vamos - dijo limpiando sus labios con la servilleta y poniéndose de pie.

Yo sólo asenti, al darme cuenta ya estábamos caminando juntos por el vacío pasillo que daba a la biblioteca.

Mi corazón dio un vuelco cuando Erik entrenado su mano con la mía, lo mire algo alarmado.

Su mirada estaba gacha y sus mejillas estaban al rojo vivo.

Parpadee varias veces perplejo y las palabras no me salían, estaba echo in manojo de nervios.

Al entrar a la biblioteca, me soltó y comenzó a caminar entre los estantes buscando a Dante.

- parece que nos mintió, no está aquí- dijo entrando en un pasillo de estantes y viendo los libros. - pero ya que estoy aquí buscaré algo que me interesaba desde hace días.

- ¿y que es? - pregunte para ayudarlo.

- Oh ahí está- dijo mirando a lo más alto del estante y poniéndose de puntitas para alcanzarlo - rayos- susurro dando saltitos para alcanzarlo.

Sonreí, era demaciado lindo a pesar de sus pocas reacciones faciales.

Me acerqué por detrás alcanzando el libro, el al darse cuenta se giró quedando de frente, muy cerca de mi rostro.

Sus ojos y los míos se abrieron ligeramente, pero luego el los cerró tomando mi corbata y acercándome a él juntando nuestros labios.

De nuevo, no pude reaccionar, las piernas me flaqueaban y el corazón parecería que me explotarla en cualquier momento.

El se separó dejando de estar de puntitas, bajando la vista y sin soltar mi corbata.

- Derek, en serio te amo - me miro a los ojos - yo,yo, necesito escuchar tu voz a diario - me miraba directo a los ojos, sin dudar ni titubear.- no puedo apartarme de ti.

No pude responder.

-¿que hacen?- dijo alguien detrás de otro estante -¿¡ no se muevan de ahi¡?- un profesor malditasea

- corre - le dije tomando su mano y saliendo de la biblioteca escuchando un "detengance".

Cuando estuvimos fuera de peligro baje la velocidad y me detuve tomando aire al igual que erik.

-¿ estas bien? - el sólo asintió con las mejillas rojas, y su respiración estaba agitada, no me miraba pero aún así me ponía nervioso.

Solté su mano con lentitud y el tomo su pecho tratando de regular su respiración.

- debo ir a clase- anunció comenzando a caminar por el pasillo del lado contrario al mío.

Lo mire alejarse por el mismo, yo no sabía que hacer, me gustaba Dante, sin embargo con el me sentía diferente, había algi en el que me hacía sentir especial, tal vez sus palabras, o su manera de confesarse a mi me conmobieron, sin embargo.

¿se podía enamorar tan rápido?

Aunque el me era muy familiar, tal vez era posible de que ya lo haya visto antes, mucho antes.

De alguna manera me tranquiliza estar cerca de el, no puedo entenderlo del todo.

Narra Dante.

Debia hablar con Minkus, estaba siendo infantil, me asustaba no poder llenarlo en el sexo y que terminara dejándome, además el echo de que podía doler me asustaba.

Siempre veía el sexo como algo que se hacía fácilmente, una vez había recibido una mamada, pero mi niñera termino con dos demandas, una por mi mamá y otra por la hermana de mi papá por abuso infantil.

Hablar con el y aclararle lo que sentía sería buena idea, aunque nunca había hablado el como me sentía con nadie más sabía que ayudaría.