capitulo 14: Malditas ganas (E)

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Narra Dante.

Miraba a Minkus por el retrovisor y el me miraba de vez en cuando, supongo que estaba molesto, yo también un poco, pero no quería ir sin el a ningún lado.

- ¿oye Dante, podemos ir a tu casa un rato?- pregunto Alessa, lo dude bastante, garraspee la garganta y mire a Minkus por el retrovisor, el cual apretó los dientes y el volante.-Claro, sólo que tengo que dormir temprano, ya que mañana...iré al médico... a unos exámenes.

- ¿exámenes de que?¿te sientes mal?- pregunto Derek preocupado, tocando mi frente.

- estoy bien- dije temeroso, por la reacción de Minkus, la cual fue peor de lo que pensé, ya que frenó de golpe, y nos miro amenazante.

- mi joven amo, tiene sus propias cosa privadas, así que les agradecería que dejen de alterarlo- todos lo miramos asustados, a excepción de Erik, que no tenía expresión en su rostro.

Su sonrisa era terrorífica y el tono de voz que habia usado lo hacía aún más espezlusnante.

- lo siento no quería molestar - respondió Derek confundido.

- creo que dejaremos la visita para después- respondió Erik a lo que todos estuvieron de acuerdo.

Me daba miedo Minkus, y su manera dominante.

...

Después de dejar a todos, el silencio era espeluznante, miraba de reojo a Minkus, el cual estaba muy molesto, sus nudillos estaban blancos por la fuerza ejercida al sostener el volante.

- ¿que habrá de cena?- pregunte tratando de aliviar el hambiente, sin embargo el no respondió, sólo me miro de manera amenazante, haciendo que me estremeciera.

- entonces me callo - dije ya un poco molesto por su actitud tan infantil.

Entonces el silencio se presentó de nuevo.

Al llegar a casa baje del auto azotando con fuerza la puerta del mismo , y siendo recibido por Daniel el nuevo mayordomo.

- Hola joven- me saludó amablemente

- Hola Daniel, por favor llevenme la cena a mi cuarto, estoy algo irritado hoy- mire de reojo a Minkus el cual paso de largo entrando a la casa.

-claro joven, en un momento estará en su habitación.

- gracias- entre al fin y subi las escaleras hasta llegar a la puerta de mi cuarto, Minkus se encontraba recargado a un lado de ella.

- ¿que quieres?- pregunte de mala gana pasando de largo su presencia y abriendo mi puerta - si no respondes adiós- iba a pasar y cerrar mi puerta, pero el me detuvo empujandome dentro y cerrando la puerta detrás de el.

- que crees que estas hacien...- fui interrumpido con sus cálidos labios con los míos, y tan sólo con eso, se esfumó toda molestia que sentía.

Se separó de mi y agachó la cabeza.

- perdóname, pierdo la cordura cuando alguien más te toca- entre en shock unos segundos,pero al ver la preocupación en sus ojos, le tome de la mejilla e hice que me viera.

- Minkus, deberías saber que mi corazón te pertenece completamente, perdí mi orgullo por ti - devie la vista apenado, y totalmente rojo, el en cambio sonrió, y me tomo del rostro para que lo viera.

-prometo que intentaré calmarme - volvió a juntar nuestros labios, pero esta vez introdujo su lengua, mis piernas flaquearon y mi cuerpo comenzó a temblar. - a veces olvidó que eres joven y aún tienes que vivir a tu ritmo.

- mira cómo te pones por un beso- dijo sobre mis labios.

- déjame pervertido- dije tratando de sonar molestó y apartarlo, pero el me apretó más contra el.

- Dante- gruño en mi odio, dándome vuelta y besando mi cuello, puso presión entre nosotros haciendo que notara su erección.

- Minkus para - dije débilmente, pero el sólo gruño en respuesta, pasaba sus manos por mi pecho, vientre y entre pierna, haciendo que que estremeciera, por tanto contacto.

Me sujetaba fuerte para evitar que me cayera debido a sus leves movimientos de cadera, rodando su pene en mi trasero.

Comenzaba a sentir placer así que soltaba pequeños suspiros y jadeos.

Necesitaba que alguien llegará para sacarme de esta situación ,aún no estaba listo para esto.

Seguia lamiendo mi cuello, y rozaba ligeramente su miembro en mi trasero.

- Mi...nkus...deten gghm- apreté mis labios al sentir su mano protar mi pene por encima de mis boxers.

La respiración comenzaba a entrecortarce de un momento a otro podría correrme.

- joven - llamaron a la puerta, Minkus gruño en mi oído molesto.

- ya voy- dije soltando del agarre de Minkus y subiendo mi bragueta.

Estaba totalmente ruborizado y echo un desastre.

- aquí está su cena- dije una vez que abri la puerta, garraspee y tomé la charola.

- gracias... oh y por favor vigile constantemente el pasillo por favor, e escuchado rumores de que han estado entrando a las casas a robar.

-entiendo joven, esta bien, repartire los horarios de guardia.

Asenti agradecido y Minkus estaba sentado en mi cama tomando su cabeza.

- ¿estas bien?- pregunte dejando mi comida en el escritorio.

El nego con la cabeza y se recostó en la cama de un extraño salto hacia atrás.

- ¿que sucede?- pregunte acercándome y subiendome a la cama para quedar sobre el.

- es muy difícil no tocarte, se que no estás listo y que debo ser cuidadoso, es sólo que... pierdo el control.

Mis mejillas se encendieron.

-¿acaso eres un pervertido violador de chicos tiernos como yo? - nos miramos a los ojos sin responder

Rayos, no debí decir eso.

- Dan, yo, enserio lo siento, intentaré mantener mejor la compostura, sólo...

- ¿sólo?- pregunte alentando a que siguiera.

- te haré venir una vez al día- quedé en shock, no acaba de decirme que se controlará.

- espera te e dicho que no estoy listo.

- para hacerte venir no necesito entrar en ti - dijo pícaro rozando su rodilla en mi entre pierna.

- oye hum- metio sus manos por mi playera pellizcando mis pezones.

Oh por dios..





Continuará.

Malcriado ( yaoi/gay) FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora