Capítulo 15: Culpa

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Marinette

Pelear akumas yo sola no sólo era complicado. Era casi imposible. Ahora las peleas me tomaban el doble y ahora tenía que hacer sola el trabajo que antes hacían mis amigos. En resumen, mis errores regresaban a golpearme directamente en la cara.

Pero mis problemas no se limitaban únicamente a mi alter ego. Mi relación con Adrien parecía ser de lo que más había sufrido desde que le quité el Miraculous. No soportaba verlo a los ojos ni soportaba estar cerca de él. No porque él hubiera hecho algo mal, sino porque estar con él me recordaba lo que hice, y en el fondo me sentía mal. ¡Le había quitado su Miraculous! Pero siempre que me ponía triste trataba de recordarme a mí misma que eso lo ponía a salvo de Hawk Moth.

Adrien no dejaba de buscarme y yo no dejaba de evitarlo. ¿Qué se supone que iba a decirle? Él no tenía idea de que había sido yo quien le quitó el Miraculous, pero yo lo sabía y eso era más que suficiente para atormentarme. También evité mucho a Alya, Nino, y Chloe. Estaba demasiado enojada con ellos por haberme abandonado, pero ellos no tenían idea de por qué. Y aunque todos mis amigos asumían que algo andaba mal conmigo y que necesitaba tiempo, Chloe decidió que su deber como mi amiga era averiguar cuál era mi problema, sin importar que yo no quisiera verla o hablarle.

-¡MARINETTE! ¡Abre esa puerta ahora mismo!-Exclamó ella golpeando la puerta de mi habitación. Consiguió darme un gran susto.

-¿Cómo es que entraste a mi casa?-Pregunté. Le había dicho a mis padres que no dejaran que ninguno de mis amigos entrara. Específicamente Chloe.

-Esperé a que tus padres salieran y forcé la cerradura. Ahora, ¡abre esa puerta y dime lo que sucede contigo!-Exclamó. Aún seguíamos trabajando en su sutileza.

No podía arriesgarme a que Chloe tirara la puerta de mi cuarto a golpes así que simplemente la abrí. Yo estaba usando pijama, no tenía nada de maquillaje y mi cabello era un desastre total, así que ella frunció el ceño en cuanto me vio.

-Tu aspecto ha visto mejores días. Eso es definitivo-Dijo ella entrando directamente hacia mi cuarto y sentándose en mi cama. Yo la seguí y me senté a su lado.

-¿Y bien? ¿Vas a decirme por qué has ignorado todos nuestros textos, llamadas, recados con tus padres y casi señales de humo? ¿Te das cuenta de que la boda de Alya y Nino es en dos semanas y no me has ayudado con nada? Ya sé que dijeron que querían una boda pequeña, pero aún así hay cosas que hacer y no he tenido noticias tuyas. ¡Ni siquiera sabía si estabas viva!-Exclamó ella. Me había olvidado por completo de que tenía que ayudar a planear la boda de Nino y Alya. Probablemente pensaban que era la peor amiga del mundo.

Bueno, siendo sinceros lo era.

-No me he sentido muy bien. Eso es todo-Respondí pasándome una mano por el pelo.

-Desde la reunión en tu techo hace unos días has estado actuando demasiado extraña. Marinette, quiero saber lo que sucede. Lo creas o no me importas, y si puedo hacer algo para ayudarte entonces lo haré. Anda, dime. Prometo ser comprensiva. ¿Tiene que ver con Adrien?

-¡No! Bueno...sí. Bueno...no...O es que....

-Definitivamente se trata de Adrien. ¿Es porque él es Chat Noir? Porque si eso te molestaba, ya no lo es. Ladybug se convirtió en una engreída y ahora decidió quitarle el Miraculous-Dijo Chloe molesta. Tragué saliva.

-No, no. No tiene absolutamente nada que ver con Chat Noir. Es sólo que...¿Chloe? Si yo hubiera hecho algo que  pudiera lastimar mucho a Adrien crees que me perdonaría?-Pregunté. Chloe frunció el ceño confundida.

-Me estás asustando. ¿Hay otro chico aparte de Adrien?-Preguntó ella. Negué con la cabeza.

-No. Es sólo que creo que tomé una decisión que puede lastimarlo mucho. No sé cómo hablar con él al respecto. Ni siquiera sé si debería decirlo, o arreglar las cosas, o seguir mi vida como está ahora, y fingir que nada ha sucedido-Dije mientras me dejaba caer en la cama y cubría mi rostro con una almohada.

Chloe me quitó la almohada y me encaró. Ya no se veía severa, sino entre preocupada y comprensiva, como una consejera escolar lidiando con un estudiante deprimido.

-¿Hay algo que quieres contarme? Somos amigas. O por lo menos yo te considero mi amiga a estas alturas. No sé tú. El caso es que puedes decirme lo que pasa-Me dijo ella con una sonrisa.

-No, no. Es sólo que....¿sabes qué? Creo que tengo que hablar con él. No voy a poder arreglar esto nunca si no lo encaro directamente-Dije mientras saltaba de la cama. De inmediato tomé lo primero que se veía decente en mi armario y me hice una trenza rápida.

-¿Traes auto?-Pregunté. Ella sonrió.

-Bien. Me maquillaré en el camino. ¿Me llevas a casa de Adrien?-Pedí, y ella asintió. De inmediato las dos salimos corriendo de mi cuarto.

-¿Lo ves? ¡Soy genial dando consejos!-Exclamó ella.

Nathalie me abrió la puerta y casi la aplasté mientras corría hacia el cuarto de Adrien. Apenas alcancé a gritarle "Hola", cuando ya estaba en el cuarto de Adrien. Cerré la puerta detrás de mí de un portazo, y él me miró confundido.

-¿Estás bien?

-Sí, sí. Es sólo que tenía que verte. No puedo seguir evitando esto-Dije yo. Él alzó la ceja preocupado, pero dio una palmada en la cama a su lado para indicarme que me sentara con él.

-¿Qué pasa?

-Es sólo que... bueno, no quiero lastimarte, pero creo que....

-¿Vas a terminar conmigo?-Preguntó preocupado y con el corazón roto. Me lancé a abrazarlo de inmediato.

-¡No, no! Es sólo que...lo siento. Adrien, ¿tú podrías odiarme?-Pregunté.

-¿De qué hablas?-Preguntó. Me tomó la mano y sonrió-Sabes que eso es imposible. Yo jamás podría odiarte, Marinette. Te amo más que a nada en el mundo.

Ugh. Cada vez me hacía sentir más culpable.

Sólo lo abracé de nuevo. Si yo decía algo más iba a confesar que yo era Ladybug y que yo le había quitado el Miraculous. Él me abrazó de vuelta.

-Y por cierto, ya no tienes que preocuparte por mí. Ya no soy Chat Noir-Dijo él. Sentí una puñalada de culpa.

-¿De verdad? ¿Por qué no?-Pregunté haciéndome la tonta.

-No lo sé. Creía que Ladybug confiaba en mí, creí que estaba haciendo todo bien. Ya veo que no. Y probablemente nunca voy a entender lo que sucedió pero tendré que vivir con eso-Dijo él con tristeza.

¡Maldición! ¡No debí haber venido!

Quizá había cometido un error. No, no quizá. Definitivamente. Pero aún quería mantener a Adrien lejos de Hawk Moth por su bien, así que tendría que mantenerme firme. Sólo esperaba estar en lo correcto.

Pero yo no sabía en ese momento que alejar a Adrien de Hawk Moth sería no sólo complicado, sino casi imposible.

Miraculous Ladybug: Una última aventuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora