Buscando Mi Camino 13

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NARRADOR:

El orfanato no sabía cómo actuar. Majo estaba furiosa por lo que había pasado. La vieja directora, la que entonces gobernaba aquel viejo y sucio lugar, había prohibido a todos los trabajadores hablar del pasado de aquel pequeño. Si el nene preguntaba, había que decirle que había sido abandonado, que sus padres no le querían. Y listo. Y si preguntaba justamente quien la había dejado en la puerta del orfanato, había que decirle que nadie lo había visto.

Pero ahora que ese nene estaba con Peter y con Lali, los problemas se habían multiplicado. Encontrar una solución ahora, era claramente imposible. La directora no sabía como Majo podía actuar en el caso de que no hicieran nada para arreglar el desastre, pero por como se había puesto por teléfono, estaba enojada. Y deseaba con todas sus ganas, separar a ese nene del lado de sus padres.

Sí. Otra vez.

LALI:

- ¡Buenas tardes! ¿Es el centro de exámenes de ADN de la Clínica Central?

- Sí señorita, es acá. ¿En qué podemos ayudarla?

- Es porque queremos hacernos un ADN.

- Bien, ¿puede decirme los nombres para que les anotemos?

- Juan Pedro Lanzani, Mariana Espósito y Thiago.

- Perfecto - en el caso de que la chica que estaba al teléfono se hubiera dado cuenta de que éramos famosos, no había preguntado. Así que estaríamos seguros -. ¿Mañana por la mañana, sobre las diez en punto, podrían venir?

- Sí, claro que sí. Perfecto.

- Gracias, pues vengan mañana a esa hora y les atenderemos.

- ¿Cuánto tardan en tener los resultados?

- Más o menos una semana.

- ¿Y no pueden tramitar los resultados con más urgencia?

- No señorita, lo sentimos mucho pero eso no se puede.

- Bueno, no se preocupe. Entonces, hasta mañana.

- Hasta mañana.

Me di la vuelta y miré a Peter:

- Listo, mañana podemos ir a hacernos la analítica. Tendrán los resultados en una semana, y si da positivo, se los llevamos al Juez y caso resulto. Tendremos a Thiago con nosotros.

- ¿Y si no? El nene nos está tomando mucho cariño. No podemos volver a dejarlo en la calle... — apuntó Peter -.Eso sería horrible para él.

- ¿Y qué hacemos?

- Adoptarlo.

- ¿Y nuestro verdadero hijo? - pregunté.

- Le seguimos buscando. Pero me sentiría una basura si este nene no es nuestro hijo y le devolvemos al orfanato de donde le sacamos. Le destrozaríamos la vida, Lali.

- Tenés razón. Pero también pensá en nuestro hijo... - dije.

- Sería como un hermanito para él. No nos preocupemos por eso. Pero me da mucha pena, que después de tantas ilusiones, se las arranquemos todas de golpe porque no es nuestro verdadero hijo. Thiago es una ternura, nos adora.

- Lo sé, solo le pido a Dios que no tengamos que buscar más...

- ¿Y... Qué vamos a hacer con nosotros?

Levanté una ceja:

- ¿Cómo con nosotros?

- El nene tendrá que vivir con los dos... ¿No?

- Claro, ¿y? - no entendía dónde Peter quería llegar.

- ¿Querés que sigamos viviendo separados?

- Peter, estoy de novia con Santiago, es celoso, viste como se puso. Puede haber problemas en el caso de que nosotros vivamos juntos con el nene como si fuéramos una pareja de verdad.

- Pero es el hijo de los dos.

- Y los padres de muchos nenes del mundo viven separados.

- Sí, eso ya lo sé.

- ¿Puedo hacerte una pregunta? - le pregunté, agarrándole la mano y mirándole fijamente a los ojos.

- Claro.

Respiré hondo y solté la pregunta:

- ¿Te sigo gustando?

- ¿Vos a mí?

Asentí con la cabeza.

- No, por supuesto que no.

- Quiero que me digas la verdad, por favor.

- No Lali, lo nuestro ya fue. Fallamos los dos, pero, creo que sería una buena idea para el nene que viviéramos juntos, por su felicidad más que nada. Pero, como vos quieras.

- Por mi no habría ningún problema, pero está Santiago, y sé que no le va a gustar. Así que la mejor idea es que vivamos separados. Lo siento.

- No te preocupes - Peter miró su reloj -. Bueno, creo que ya es hora de que me vaya a casa.

- Tal vez a Thiago le gusta que te quedes un ratito más.

- No, da igual, ya es tarde.

- Bueno... De todas formas preguntale si se quiere ir a dormir con vos esta noche.

- ¿No te importa que no duerma acá?

- No tranquilo, si Thiago es nuestro hijo, también tiene que pasar tiempo a solas con su papá - esbocé una pequeña sonrisa.

Con todo lo que había pasado hoy, necesitaba tiempo para poder estar sola. Para poder pensar. En el futuro las cosas podían ir mejor, pero de todas formas se iban a complicar: con Peter, con Santiago, con mi mamá...

Para empezar, si Thiago era nuestro hijo, y vamos a pasar mucho más tiempo juntos, por lo que Santi cada vez iba estar más celoso. Mi relación podría llegar a romperse. Así que tenía que hablar seriamente con él para dejarle las cosas claras. Y en el caso de que Santi, por esa misma razón, quisiera dejarme, para mi sería algo muy triste. Santi me había tratado muy bien, me había sanado mucho el corazón. Pero necesitaba saber como se comportaría en este caso. Si le seguía teniendo celos a Peter y al nene, había un grave problema, y lo más seguro es que tendría que dejarlo con el.

Y en cuanto a mi mamá, ahí si que se encontraba el gran problema. Ella tendría que darme una explicación, aunque yo también se la tendría que dar a ella. Mi hijo... Esa cosita tan importante siempre me había faltado, y lo necesitaba muchísimo. Y mi madre, debía entenderlo. Me debía una explicación, algo que seguramente no iba a darme. Seguramente se enojaría conmigo por haber buscado al nene.

Así que sinceramente no sabía que iba a pasar.

Thiago había traído a mi vida a mi primera amor, a Peter, del cuál estaba segura de que él seguía estando enamorado de mí.

Pero, ¿y yo de él?

Por eso, necesitaba tiempo a solas para pensar en todo lo que iba a ocurrir en un futuro cercano.

BUSCANDO MI CAMINO -TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora