Lo bese y la fiesta estuvo de locos, pero no hubo nada esa noche, ni la siguiente. Yo estaba feliz con el. Salíamos y seguíamos siendo algo normal. Claro si con normal me refiero a que ahora soy reina del inframundo y eso, creo que es algo raro, pero lo amo, se que saldremos adelante. Desperté temprano y decidí ir a ver a Marco, mi mejor amigo. Ya hacía unos años que no lo veía. Emocionada por verlo de nuevo y algo triste. Tom no amaneció a mi lado, como era su costumbre. Siempre tenía cosas más importantes que ella, aunque dijera que no, que ella era lo más importante se sentía excluida. Llegue con Marco Diaz que sonrió al verme, me abrió la puerta y lo abrace de manera fuerte. Yo traía un vestido rojo y una pequeña tiara para no llamar la atención de los demás. Las lágrimas resbalaron por sus mejillas y mojaron la sudadera de Marco. Lo cual alertó al joven que su amiga no estaba para nada bien. - Pequeña- suspira y acaricia su cabello- _____ por favor dime que tienes. - Marco, yo... - Espera, recustate en el sillón y la vengo- me senté como me indicó en aquel sillón y llego el con unos lentes falsos, un black de hojas y un bolígrafo. Se sentó en el sillón individual y le ordenó a ______ que se recostara. - Dígame señorita _____, ¿que le sucede? Recuerde que usted es mi paciente y puede contarme todo. - Marco esto no es nece.... - ¡Sh! ¡Sh! Nada de reclamos, cuéntame que trae estás amargas lágrimas a tan bonitos ojos. - Es Tom. - Llevan varios años casados. - Si y cada vez es más distante. Lo se, nos coronaron como rey y reina, pero... no lo sé, antes despertaba abrazada a su pecho y ahora ni siquiera su aroma está en nuestra cama- solloza- tengo miedo que vea a alguien más, tengo miedo que duerma con otra, tengo miedo de que se haya cansado de mi Marco. - Hey, escucha, ¿has hablado con el? - Ni siquiera lo veo Marco, no... no hablamos desde hace semanas. - Bueno, vas a volver en este momento a su reino de las sombras y la oscuridad, el sufrimiento y etc... vas a actuar como la reina que eres, vas a levantar la mirada y le vas a decir "Thomas Lucitor, tenemos que hablar" si que no aceptaras un no como respuesta. - Marco, no creo poder hacerlo. - Ahora eres una reina, y siempre has sido súper valiente, tú podrás, lo se porque eres una chica que admiro, eres mi mejor amiga y te pareces tanto a Star en todos los aspectos, podrás con esto pequeña princesa mágica de otra dimensión. Oh perdón reina. - Gracias Marco, en... en serio lo necesitaba. - Para eso están los amigos- tome a Marco de las mejillas y las apreté, después le quite esos ridiculiza lentes y lo abrace como si no lo fuera a volver a ver, estaba súper agradecida con el, tiene razón, si el ya no me quiere yo no tengo motivo para seguir sufriendo. Me despedí de mi amigo efusivamente y me fui a lo que ahora era mi hogar. Me puse un vestido que Marco había hecho para mí. Se como poner celoso a Tom.
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Una vez vestida salí de mi habitación, bueno lo que se suponía que era nuestra habitación. Los guardias hicieron una reverencia y antes que nada pone un profundo respiro. Es ahora o nunca, entre a la sala de juntas donde se supone que mi esposo estaría. - Tomás Lucitor tenemos que hablar en este preciso momento. - ¿___...________? - Si, ahora ven acá.
