Alma Pura

Capítulo 10

-Así que viste a un niño. -Se sentó frente a ella -¿Estás segura de qué viste a un niño pequeño?.

-¿No me crees?. -Preguntó medio seria -Por Dios, Gamora, hablo en serio. Era un niño, pero algo tenía de especial y no sé qué es...

Gamora miró a la pelirroja, algo tenía de diferente y se veía en sus ojos. Sabía que Natasha había cambiado algo desde que llegó ahí, pero nunca había querido hablar de eso, nunca se había atrevido a sacarle un tema a la pelirroja, le daba miedo su reacción, pero... si Natasha la había ayudado y hablaba con ella, ¿por qué no hacer lo mismo? De eso de trataba la amistad, ¿no? De ayudarse mutuamente, sostenerse en las caídas y si ambas partes estaban mal, quedarse mal las dos y tratar de salir mutuamente.

-Vamos, Tasha... -Susurró -Sincérate conmigo, ¿qué tienes?.

-Nada...

-¿Sabes? Siempre tratas de evadir el tema, pero ya no, no voy a rendirme contigo. -Tomó la mano de la rusa -Eres mi amiga, la única desde hace años y quiero que eso que te atormenta deje de hacerlo, al menos por un rato.

Natasha miró el agarré de la chica con piel verde y por instinto lo apretó. Normalmente no era abierta con nadie y eso le funcionaba, pero antes de haberse quedado ahí ella ya no era así, solía expulsar sus sentimientos cuando sentía explotar y sus amigos -algunos de ellos- la habían visto derrumbarse.

Gamora, ella era diferente de todos los demás, era como una ella pero en otro planeta. A ambas las raptaron de niñas, a ambas las crearon para ser un arma letal, ambas estuvieron en una familia después de un camino difícil y teóricamente ambas murieron por la misma gema o algo así.

Si sus vidas no eran iguales, no sabía qué eran entonces.

Alzó su vista hacia la de su amiga y no se dió cuenta de cuándo las lágrimas habían empezado a brotar de sus ojos para empaparle el rostro y hacer un camino de agua salada en ella.

-Steve y yo tuvimos algo en ese tiempo de desastre... -Comenzó a contarle -Desde que empezamos a ser prófugos de la justicia de Ross. Estábamos unidos y lo que comenzó como un juego, terminó siendo algo real y especial, al menos quiero creer que para ambos.

《Antes de iniciar la recolección de las gemas que ya te conté, tuve una sospecha y una muy rara. -Se calló unos segundos -Creí estar embarazada o algo así... Pepper, ella, era mi única amiga después de que Wanda desapareciera con el chasquido y de alguna manera se volvió en mi refugio cuando no sabía qué hacer. Ella me acompañó a comprar la prueba y literalmente la hicimos en un baño público porque tenía miedo... ah, es difícil.》

-¿Lo estabas? ¿Estabas embarazada?.

-No lo sé... tuve que irme dejando la prueba en manos de Pepper literalmente... -Soltó una risa al recordar la cara de asco de su amiga -Pero no lo sé, nunca lo supe y es algo que va a perseguirme por siempre.

-¿Tú qué piensas?. -Gamora le dió una pequela sonrisa -¿Lo estabas o no?.

-Creo que si... pero nunca podré estar segura.

-Dicen que cuando una mujer está embarazada, lo siente. -Susurró -Hubieras sido una excelente madre.

-Sí... no lo sé... tengo el presentimiento de que Steve hubiera sido feliz con eso, ¿sabes? Él siempre quiso una familia y el hecho de pensar que podía dársela, me hace sentir útil.

-Yo creo que Steve te amaba aunque no pudieran tener hijos.

-No... siempre me sentí comparada, ¿sabes? Antes de que él cayera al hielo, bueno, él, ¿cómo decirlo? Estaba enamorado, así tal cual. Margaret Cárter... una de las iniciadoras de SHIELD y el primer y gran amor de Steven Grant Rogers... es tonto, pero siempre me sentí celosa, apartada... Steve de alguna forma no podía olvidarla, no la dejaba ir y eso a veces me desconcertaba de una manera inmensa y me hace sentir menos...

-Estoy segura de que no era su intención hacerte sentir así.

-Lo sé... pero a veces me pongo a pensar que me olvidó ya. -Un chillido se escuchó de su boca -Es estúpido pensarlo porque me prometió que no lo haría, que siempre me amaría, pero algo me dice que lo hizo y es otra duda, es otra pregunta que jamás podré saber la respuesta. Estoy atrapada aquí yendo y viniendo de Vormir y estoy claustrofóbica y no sé qué hacer, Gamora...

Bajó la mirada y comenzó a llorar. Gamora nunca había visto así a su amiga, jamás, llevaban años ahí y en todo ese tiempo sólo la había visto triste, pero jamás derrumbada y eso la hacía ponerse incómoda, pero incómoda en el lado de no saber qué hacer.

Hizo lo primero que se le vino a la mente y lo que su madre solía hacer cuando estaba trsite, la abrazó.

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¿Qué haremos entonces?. -Rocket preguntó abrochándose el traje.

-Ir a Vormir, claro está. -Scott dijo obvio.

-Claro, denle una estrellita dorada en la frente al niño por su gran IQ de 0.01. -Le respondió haciendo reír a todos.

-Iremos a Vormir y estando allá nos dividiremos. -Rogers los miró a todos -¿Estamos de acuerdo? Según Clint y yo el lugar es algo grande y hay que cubrir terreno.

-¿Exactamente qué pedirás?. -Nébula se sentó en el suelo.

-Si Strange tiene razón en lo que dice, Natasha puede estar viva, primero veremos si es verdad y sino... si eso no es lo que de verdad pasa, ya veremos qué haremos. Cueste lo que cueste.

-Apresúrate, Rogers. -Barton rodó los ojos.

-¿Están listos?. -Bruce les preguntó abajo de la plataforma -Ya saben cómo es esto, pero ésta vez vuelvan todos.

Para los que estaban en la paltaforma nueva y reconstruída pasaron un par de segundos mientras llegaban a Vormir del año 2014. El año en que Nat había muerto o técnicamente habían creído eso.

-Esto sigue siendo extraño. -Clint susurró -Sigue igual.

-Esto me da un mal presentimiento. -Rocket comenzó a caminar unos centímetros. -Es pura tierra.

-Dividiremos el terreno, es algo grande. -Steve los miró -Ya saben cómo comunicarse, nos resportamos en cada veinte minutos, ¿listos?.

-Listos. -Todos dijeron al mismo tiempo.

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Barton llevaba alrededor de unos treinta y tantos minutos caminando y no viendo nada a su alrededor, comenzaba a cansarse y eso era mala señal.

Subió a un pequeño montecito y a lo lejos, un poco muy lejos miró a Scott caminar como cantando algo y no pudo evitar soltar una carcajada.

Se sentó unos minutos y visualizó la vista que daba el lugar. Figuraba ser un amanecer, sólo que todo el tiempo figuraba ser así.

Comenzó a mirar a su alrededor y a lo lejos miró algo negro, algo como acostado en una montaña similar a la suya. Se levantó de a poco y pudo ver un punto rojo de un extremo de la cosa negra.

-¿Natasha?.

Corrió en el momento en que vió moverse la cabellera, sí, era una cabellera.

Una sonrisa se plasmó en su rostro y siguió corriendo a todo lo que daba. Subió la montaña de tierra y al estar frente a la cosa negra, se dió cuenta de que no era una cosa negra.

-Natasha.

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