Hoy es viernes, así que después del colegio, en la tarde tengo práctica de karate, debo ir pues mi prueba de ascenso es en el mes de noviembre y faltan menos de tres meses, por lo general al acercarse una prueba de ascenso, suelo estar tranquila, pero estoy preocupada por esta prueba ya que pasaría de cinturón morado a marrón, y es mucho material; pero sé que yo puedo, y después de lo de Andrew, estoy lo suficientemente inspirada como para romperle una pierna a quien se me pare enfrente; aunque olvido que el karate es defensa personal y no violencia así que debo controlar mis emociones.
Ya he llegado al colegio, antes de entrar a mi salón verifico en mi celular la hora 7:03 A.M.; entro he intento mirar a todas partes, menos a Andrew, es tan incómodo, como voy a lidiar con esto... Bueno Atemis debes concentrarte en terminar el año de estudio y olvidarte de él, termino diciéndome a mí misma.
Las primeras cuatro horas fueron aburridísimas, pase el receso sola y escuchando música, al sonar el timbre entro al salón y se encuentra dentro la Sra. Gómez una señora de edad avanzada, aunque muy amable y dedicada a su trabajo, la encargada de transferir a estudiantes de un colegio a otro, esto se da por los bachilleres, como estamos en noveno grado hoy fue a hacernos la visita.
- Buenos días chicos, vengo a darles una charla sobre los bachilleres en el que puede que encajen uno de ustedes. – dijo amablemente.
- ¿Y los que nos quedamos aquí, en este colegio? – preguntó un compañero.
- Bueno la charla estará dirigida a los que les interese cambiarse de plantel - al finalizar la charla los que estén interesados a cambiarse de plantel, por favor levanten la mano y le daré un formulario y una lista de los colegios en el que puedan ingresar.
Puse mucha atención a la charla, al terminar solo cuatro alzaron la mano para pedir los formularios y la lista de los colegios; entre esos cuatro estaba yo. Nath una amiga mía la cual no tenía vida social fuera del colegio, pues siempre dedicaba tiempo a los estudios, o concursos para becas y cosas así; se impresiono mucho de que yo levantara la mano, en su mirada pude verlo todo.
- ¿Atemis? – me sorprende que tú quieras dejar el instituto, ¿Estás segura de que quieres el formulario? – preguntó Nath
- La verdad no lo sé, pero Nath la carrera que yo quiero es comunicaciones sociales y el bachiller correcto es letras o humanidades y este instituto no tiene estos bachilleres, solo tiene ciencias.
- Aquí está el formulario y la lista – debes entregarlo antes del próximo viernes. – dijo la Sra. Gómez mientras ponía en mi silla los papeles.
- Gracias profesora – le respondí mientras sonreía.
Creí que la curiosidad de Andrew demoraría un poco más, al salir la profesora del salón se acercó a mi puesto e inicio el interrogatorio.
- No hablaras enserio de irte del instituto ¿verdad?
- Si, hablo muy enserio – dije mirándolo... desafiándolo.
- Pero ¿Por qué te vas? – farùllo molesto
- ¿Porque? – pregunte molesta y sorprendida – porque estoy harta de esto, dijiste que me olvidara de ti, pues adivina que Andrew, lo haré – dije casi gritando con lágrimas en los ojos.
Podía notar como todos los del salón hacían un círculo entre Andrew y yo, pero no me importaba nada más solo decirle como me hizo sentir. Así que continuo.
- Ayer me destrozaste el corazón, hemos sido amigos por más de cuatro años, y el tiempo hizo su trabajo, me enamore de ti, perdidamente, (puedo oír comentarios entre los compañeros del salón) tú sabes mejor que nadie que amo las personas que son apasionadas, gentiles, y que a pesar que saben que nada dura para siempre dan lo mejor de ellos mismos, para hacer feliz a otras personas; tu eres... corrijo eras la persona que creí que era la indicada para mí, pero me equivoque. Tú vives en un mundo donde las personas iguales son las que complementan y como tú y yo somos TAN (hago énfasis en las palabras) diferentes debemos estar lejos el uno del otro. Por eso he decidido irme del instituto.
- Pero...
- Cállate – le grité – no finjas que te intereso, tú lo dijiste no podemos estar juntos, ni como pareja, ni muchos menos como amigos. Así que déjame en paz - dije mientras salía del salón hacia la cafetería.
Estaba furiosa, casi corría, entre más lejos estuviera de él mejor. Caminaba rápidamente hacia la cafetería, me compré un batido de fresa y me senté en una banca, sola, a reflexionar, ya estaba harta de que las personas jugaran con mis sentimientos, ahora debo devolverles ese regalo, nadie más volverá a lastimar a Atemis Borjard; les mostraré de la maldad de la cual soy capaz. Me levanto, me termino el batido y voy hacia mi salón, entro y nadie me mira, ni me dirige la palabra, sólo me limito a terminar mi día en colegio.
Al salir de mi día de clases ya mi padre estaba estacionado, así que subo y está mi mamá en el auto, me llevan a mi academia donde después del calentamiento, hicimos kumite (combate), y no sé si era la furia que llevaba dentro, pero combatí como nunca antes, con fuerza, rápido, cada vez que tira un golpe era punto; al terminar la clase, fui a casa, tome una ducha, fui a cenar, y decidí hablar con mis padres acerca del cambio de colegio. Así que puse sobre la mesa de centro los papeles, y espere que los leyeran para lanzar la bomba.
- ¿Qué es esto? – me preguntó mi padre.
- Los formularios para irme a otro colegio, para el bachiller de letras o humanidades.
- ¿Quieres irte del instituto? – farùllo mi madre.
- Si – dije decidida.
- Vamos a pensarlo, ve a tu habitación – dijo mi padre finalmente.
Voy a mi habitación con la esperanza que digan que sí, así que para no aburrirme voy a mi estantería de libros y cojo Bajo la misma estrella para releer mis partes favoritas, no importa cuántas veces lo lea, siempre me enamoró de su personaje August Waters, ojalá existiera un chico como él, que sea sincero, que sea caballeroso, que sepa enamorar a una mujer, pero lastimosamente hombres así solo existen en libros, al igual que el amor, y los malditos autores (quienes en opinión mía son asesinos con licencia) los terminan asesinando, pero en parte ahora los entiendo, ya que toda historia de amor debe tener un final, porque la mayor mentira de los cuentos de hadas es "y vivieron felices para siempre" es una mentira, que engaña a los niños desde pequeños, y al llegar a la adolescencia o la adultez nos damos cuenta de que son una gran mentira; por eso August Waters muere y Hazel queda sola; porque todo lo que empieza acaba.
Como mis padres no me dieron una respuesta la noche del viernes, decidí acostarme a dormir.
Era una escalera que llevaba a un piso inferior o a un sótano, no lo sé, yo estaba ahí, con un hermoso vestido rojo con detalles en dorado que llegaba hasta las rodillas, mi cabello estaba ondulado y llevaba maquillaje puesto (cosa que yo no me pondría), en síntesis estaba muy bella, creo que era la fiesta de graduación, de pronto apareció Andrew estaba vestido muy elegante, con un pantalón de vestir color negro, y una camisa azul, camino hacia mí y me abrazo, yo estaba confundida por lo que ha pasado entre nosotros, me susurro al oído: "Atemis, lo lamento mucho, no quise que llegáramos a esto, estar sin ti me ha afectado mucho, por favor perdóname". Me sostuvo de mis hombros me miro a los ojos y me sonrió, paso su mano derecha por mi cintura, y la izquierda en mi mejilla, tiro de mí y me besó; yo vacilé durante un instante, pero acabe cayendo en el abismo de sus labios, retiró su mano de mi cintura y me sostuvo entre sus manos, me apreso como un canario en una jaula, jamás creí que sus manos podrían atraparme así de esa manera, cuando termino el beso, me aparte de él, me tomo de la mano y tiro de mi hacia él y me abrazo nuevamente, y me susurro al oído: "Te Amo"; se apartó de mi con una sonrisa en su rostro dio la vuelta y se fue.
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Una Chica Diferente
RomanceMuchas personas piensan que todas las chicas quieren maquillaje, ropa costosa y bolsos de moda; pero Atemis es diferente, ella prefiere los libros, el café, el olor de la lluvia. es una persona virgen de sentimientos y de corazón, nadie tiene sentim...