La sensación de helades consumía su cuerpo, haciendo que los bellos de sus brazos se erizarán lentamente. Ese sentimiento de temor al tener de frente a su tío después de haber realizado una estupidez, le dejaba un nudo en el estómago.
-¿Y bien?- le llamo nuevamente su tío -¿Me permites pasar?-
Victor volvió en sí y lo miró a los ojos -Claro, con gusto, pasa...- dijo con el corazón en la boca.
No sabía cómo manejar la situación y mucho menos ahora que apenas regreso de su pelea en el Chichen Itza. Ambos se dirigieron a la sala, Xipe Totec seguía explorando el lugar, como si buscara algo fuera de su lugar.
-Perdona si sueno grosero, pero ¿A qué se debe está visita?- pregunto al tomar asiento.
-No te preocupes, lo entiendo, no siempre salgo de mi Sol para visitar a la familia y si no lo hacía antes, menos ahora con todos los deberes que me corresponden- se sentó enfrente suya -La razón de mi visita querido sobrino, es por una situación que sospecho te involucra-
Victor tragó saliva al oír eso -¿De... De qué hablas?- su voz comenzó a tartamudear, lo que provocaría más sospechas.
Es cierto que el chico puede ser lo suficientemente rudo cuando se trata de pelear, pero cuando la situación involucra tratar con sus tíos, el comportamiento de Victor se vuelve dócil. Ya que no tiene el poder suficiente para defenderse o atacar antes que su oponente. Xipe Totec noto la falta de confianza en él, pudo apreciar como su presencia le hacia temblar.
Él suspiro -Me han informado de ciertos actos inapropiados de tu parte- volvió a mirar los alrededores y regreso la vista a sus ojos -Actos que han puesto en peligro a nuestra hermosa comunidad-
Los labios le temblaron a Víctor -¿De qué hablas?- mientras seguía la conversación en su cabeza se planeaba una manera de escapar sin salir herido.
Su tío fue directo -Has revelado tu identidad como semidios a un humano-
Un escalofrío se manifestó en la parte trasera de su cuello, involuntariamente al exhalar una pequeña cantidad de vapor salió de su boca. Era reacción de defensa al sentir en peligro. Víctor se tapo la boca al notar como sus instintos de batalla salían sin su consentimiento.
Se levantó del sofá -Creo que te equivocas...-
-¡Siéntate!- le hablo con una voz firme, haciendo que inmediatamente tomara asiento -No pierdo los estribos tan fácilmente sobrino, pero si hay algo que no soporto es el que quieran verme como un idiota-
Víctor se quedó callado con la mirada centrada en su familiar, no sabía qué hacer o qué responder. Únicamente tenía dudas que se hacían más grandes mientras la conversación aumenta y la principal de estas es ¿Cómo se enteró? Aparentemente no solo el consejo del Sol tiene un traidor, al parecer también entre los semidioses lo hay, si bien se podía simplemente sospechar antes, ahora era algo que se confirmaría con esto.
-Creo que te equivocas de persona... Sabes que amo a mi familia como para revelar nuestros secretos, jamás he mentido a mi madre y...-
Su tío suspiro -Si eso fuera verdad, tendrías los testículos suficientes para admitir tu error y decirme la verdad-
En este momento parecía la primera vez que su tío hablaba con tal lenguaje, haciendo que el chico se sienta más dócil.
-Hablo en serio yo no le he revelado a nadie mi identidad, desde que regrese al Sol no me he comunicado con ningún humano y...-
-Hace unos días una chica vino a tu casa, una tal Andrea ¿Cómo se que no le dijiste nada?-
La mirada del chico se notaba el desagrado al oír eso -¿Has estado, vigilando me? ¿Que clase de persona hace eso?-
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El Hijo de Quetzalcóatl; Una Leyenda Nace © II FINALIZADA II
FantasyDioses, seres omnipotentes que se consideran unas simples leyendas. Pero las leyendas nacen todos los dias, solo basta conocerlas para poder creer en ellas. Esta es la historia de Víctor Yareth, aquel llamado primogénito de la serpiente enplumada, Q...