It Is Complicated✧muke

30

10 de Julio del 2016
Dos meses después.

Le costo demasiado salir de su cama. Bueno, mas bien que lo sacaran de su cama.

Calum había ido decidido a que no se iría a ningún lado hasta que saliera y se cambiara, ya que según él no podía ser el único que "sufriría" el día de hoy. Así fue como acabo vestido con un molesto terno, sentado al lado de los Hemmings en el auditorio.

Sí, hoy era la graduación de Luke.

No podía creer lo rápido que había pasado el tiempo. Lo único en lo que podía pensar era como había desperdiciado todos estos años intentando negar los sentimientos que sentía por el rubio.

Soltó un suspiro que llamo la atención de Gloria Hemmings. Ella tenía una mirada preocupada, casi de pena. Intento sonreír, pero se dio cuenta que fallo en el intento cuando esta puso la mano en su rodilla.

Genial, lo único que faltaba es que se pudiera a llorar.

Para su suerte las luces del auditorio se apagaron cuando por los parlantes se escucho la voz del rector. Comenzaron con el mismo discurso de todos los años, aburriéndolo un poco, hasta que comenzaron a llamar a cada uno de los egresados por orden de lista para entregar los diplomas. Algunos decían unas cuantas palabras, mas que nada agradeciendo a padres y maestros, otros simplemente recogían el trozo de papel para después volver a sentarse.

Alguien en particular llamo su atención, era un omega. Estaba seguro haber compartido clase con aquel chico, solo no recordaba su nombre. Lo que llamo su atención no fue verlo, mas bien la marca en su cuello. Tenia una perfecta marca en la parte superior de su cuello, cerca de oreja, se atrevería a decir que casi fresca.

Desde hace unos días había estado fijándose en estas "marcas" que maestros y casi todos los omegas que ya iban a acabar la universidad tenían. Casi nunca había prestado atención a aquello, solo una vez, cuando tenia diez y pregunto por la marca del cuello de su madre.

Lazo, así lo llamo ella. Algo que unía a una pareja de un alfa y un omega. Era especial. Algo que no podía ni debería romperse y los hacia inseparables.

Su mano fue hacia su cuello casi como un reflejo, sobando la zona para quitarse la extraña sensación. Intento volver a concentrarse en las personas que seguían pasando por el escenario para poder despejar su mente de aquellas absurdas ideas.

Para su suerte fue el turno de la letra H. Vio la sonrisa en el rostro de Luke cuando mencionaron su nombre completa para que después, torpemente, se pusiera de pie haciéndolo reír. Llego a recibir el diploma sin tropezarse, agradeciendo al director. Luke se acerco al micrófono algo nervioso para después aclarar su garganta y poder hablar.

—Quiero agradecer a mis padres por estar ahí para mi en todo momento, y darme todo lo que necesite siempre —vio una lagrima caer por el rostro de la señora Hemmings mientras su esposo la abrazaba y sobaba suavemente su hombro en un intento de calmarla —. También quiero agradecer a Michael Clifford. La única persona que me recordaba a mi hogar cuando me sentía perdido en este lugar, y la única en la cual pude sostenerme. Gracias, Mike.

Luke estaba mirando hacia él cuando dijo aquellas palabras. Lo siguiente que escucho fueron aplausos, y el siguiente nombre siendo llamado por los altavoces. La mano de la señora Hemmings ahora estaba sobre su hombro.

—Gracias por cuidar a nuestro Luke, Michael —dijo la mujer, dándole un leve apretón a su hombro —. Sabemos que esta nunca fue su primera opción, y en cierta forma se sintió presionado en un momento, hasta que poco nos iba contando como comenzó a gustarle su carrera. Jamás nos contó de sus caídas, pero sabemos que las tuvo, y me alegra que tú estuvieras ahí para él.