Su Alteza [Lee Taemin]

Capitulo 28

-¿Disculpa? -me miro-
-Hija será mejor que...
-¡Cállate mujer!
-Es injusto, también es tu hijo, quizás el que es mal padre y esposo eres tu, es de poco hombre culpar a las mujeres y no aceptar su deficiencia.

Sentí un ardor en mi mejilla, dolió...levante la mirada observando su cara de furia.

-Cobarde. -dije-

Lo vi levantar su mano una vez más, pero Key se la sujeto y hablo.

-No debería intervenir en asuntos que no me conciernen, pero la inteligencia es una virtud de pocos y ahora mismo esta tratando con la futura esposa del Rey.

Salí de ahí y corrí hacia mi habitación quitándome el maldito vestido, me senté en el suelo apoyada en mi cama, las lagrimas no demoraron en llegar, abrace mi piernas y me dispuse a llorar como una dramática, la verdad es que suelo llorar muy poco, pero necesito eliminar todo lo que tengo acumulado dentro de mi, soy una persona con muy poca suerte y ni siquiera tengo la oportunidad de llorar tranquila, levante la mirada al percatarme que golpeaban la puerta, trate de calmar mi respiración para que no se escapara un sollozo.

-Soy yo.

Mierda...lo había olvidado, me levante de inmediato tratando de buscar ideas en mi mente, mire la puerta nerviosa, fue golpeada una vez más ¿Como puedo ser tan estúpida? ¡Lee Min estaba aquí!

-En este momento..-dije tratando de buscar una excusa- estoy ocupada.
-Por favor..¿Puede abrir?

Limpie mis lagrimas y me acerque a la puerta, me quedé unos segundos ahí.
-No creo que sea buena idea que usted entre a mi habitación.
-Para mi suerte, todo es buena idea, nadie nos dirá nada.
-Estoy poco agraciada en este momento -limpie mi ultima lagrima que recorrió mi mejilla-
-Eso lo voy a juzgar yo.

Me puse la bata de baño y abrí lentamente la puerta, el me observo y entro.

-¿Desea algo? -le di la espalda-
-¿Puede usted mirarme?
-Creo que no podre complacer lo que quiere.

Se acerco y se puso frente a mi, yo solo baje mi cabeza  y sentí su mano en mi mentón, sentía ganas de llorar.

-Tu padre cometió un terrible error...-me observo-
-Lo siento, olvide que usted se encontraba aquí.
-No se disculpe conmigo -acaricio mi mejilla- justo aquí, toco lo que es mio.
-Fue mi culpa..
-No -puso un indice en mis labios- Cuando se trata de usted, los demás tienen la culpa..es un privilegio de ser mi reina, iré a poner a su padre en su lugar.
-No -me asombre- No le de tanta importancia a este asunto.
-Lo siento señorita, pero se trata de usted, es mi asunto.