Su Alteza [Lee Taemin]

Capítulo 76

Mire la pequeña botella con detención, sintiendo un horrible escalofríos, sentía miedo, mis manos comenzaron a tiritar y solo pude recordar sus palabras  "ese tipo de hierbas suelen pigmentar mucho, se reconocen al poner en la punta de la lengua una muy diminuta gota y es excesivamente ácida, pero se puede camuflar en cualquier alimento"

-No.. No...
-¿Que sucede? ¿Que es eso? - Me observo Key con atención-
-No Lee Min no.. - Dije tratando de pensar que no era lo que creía-
-¿Que pasa? Estas pálida.
-El Medico... El veneno...
-¿Que? - miró la botellita-
-El medico dijo que el veneno era de color cafe.
-¿Acaso crees...?

Corrí hacia mi cajón en busca de un pañuelo blanco y me sente en la cama, Key me siguió.

-El dijo que pigmentaba demasiado y su sabor era ácido.
-Hay que averiguarlo ahora mismo - Me observo con impaciencia-

Abrí aquella botella y deje caer una gota en el pañuelo blanco y de inmediato quedo de dicho color con intensidad, mi respiración era demasiado agitada, frote el dedo sobre el líquido y lo deposite en la punta de mi lengua.

-Fue el... Key... Fue el.
-Es una maldito -dijo con terror- Ese imbecil es un sicopata.

Me levante de la cama horrorizada, el mato a mi madre ¿Por que? Caí arrodillada al suelo y Key se acercó a mi, quiero arrancar, no quiero verlo más, lo odio.

-No puedo dejar que sigas con el - Me abrazo- Y me desespera no saber que hacer, ¡el podría matarte! Fue capaz de golpearte y matar a tu madre...el puede hacer mucho más.

                              ~*~

Mire desde el balcon todo el lugar, la frialdad se estaba apoderando de mi, necesitaba estar sola en estos momentos, creo que ni sentimientos tengo, estaba analizando toda la situación y cada vez me convencía a mi misma que todo lo que haría, sería lo correcto.
Intente amarte Lee Min, juro que lo intente, pero tu lo arruinaste ¿Como pretendes que te ame después de lo has hecho? ¿Como? ¿Como haces para que tu apariencia no te delatara? ¿Como puedes mentir tan bien? Quizas nuestra vida hubiera sido hermosa sin tus malditos estados de humor y admito que mi infidelidad también fue complice para desentonar tu locura, en un comienzo... Llenabas mi corazón de claridad, pero con tiempo solo fue oscuridad hasta detestar tu presencia, no me motiva verte, sentirte... Lo siento.

Entraste por aquella puerta, sentí tus pasos...  pestañeé un par de veces antes de voltear, te observé, quitaste tu abrigo y lo guardaste en el armario, me buscaste con la mirada hasta que me encontraste y me sonreiste, besaste mis labios, te sonreí también.
Te seguí con la mirada, tomaste aquella botella de licor y la has vertido en un vaso, no es momento de arrepentirme, no... Me senté en la mecedora viendo como dejas el vaso vacío sobre la mesa, te sonreí y seguí disfrutando del paisaje.