Without Sugar [YoonKook/KookGi]

XXI. Medida irracional

—Así que un tierno alfa te regaló un peluche gigante de Kumamon...

Yoongi siente el incómodo calor de la sangre llegar concentrada a sus mejillas pálidas. Tiene encima la mirada cargada de picardía de su amigo alfa, se le sumó también la de Seokjin, quien aparece con una botella de vino y un acompañamiento de patatas dulces fritas y verduras salteadas.

Las brochetas siguen en el horno y el aroma hace agua su boca.

—Sí —masculla seco y avergonzado de lo fácil que se sonrojaba. De lo sencillo que es conseguir que su corazón se agite apenas alguien menciona a Jungkook.

—Apuesto que lo abrazas al dormir —comenta el omega con una sonrisa ladina.

Ni siquiera quiere decir que había envuelto a su Kumamon con la bufanda de hilo que le regaló Jungkook. Menos que a veces antes de dormir hundía su nariz en la superficie acolchada que estaba impregnada del aroma a limón y jengibre, aunque varias noches a la semana tenía a su lado al portador de la esencia ácida que tanto le gusta.

Compartir con su compañero alfa y despertar a su lado resultaba tan fascinante y aterrador por partes iguales.

Jungkook está tan metido en su vida y la idea que saliera de ella resulta demoledora.

—Mira si está rojito, apuesto que lo abraza para dormir —afirma Hoseok en dirección a Seokjin, llenando las copas de vino.

Y sí, más de una vez lo había abrazado, pero admitirlo frente a ellos, jamás.

—Se supone que me junto con ustedes para desestresarme —se queja apoyando sus manos frías en su cara para aliviar el ardor que se extendía hasta sus orejas.

—Te preparo brochetas de cordero para que comas y seas feliz —se queja el mayor del grupo.

—Es que avergonzado te ves muy tierno —explica Hoseok encogiendo los hombros.

Y pensar que Jungkook le había dicho lo mismo pocas noches atrás antes de bajar besando su abdomen hasta meter la cabeza entre sus piernas.

...Hoseok también se lo decía cuando sujetaba sus caderas para elevar su culo y tenerlo a su completa disposición.

Mira la boca de su amigo, en especial ese lunar que siempre le parece besable, consciente que quizá jamás se iba a extinguir la dosis de deseo mutuo, porque Hobi relamió sutil sus labios con los ojos puestos en los suyo.

Se pregunta a cuántos omegas sigue deseando Jungkook. A veces sentía un sutil aroma frutal y dulce, hace un par de días atrás lo notó impregnado suave en su piel.

—Si te sirve de consuelo, Tae-Tae también hace que Jungkookie se sonroje cuando te menciona.

—Yah, por qué tienen que hablar de nosotros...

No lo confirma en voz alta, pero por dentro si es un consuelo saber que su adorable chiquillo alfa se estremece de tan solo pensar en él. Le gusta sentir que no es el único que cae profundo, tan enamorado.

¿Jungkook también lo estará en una medida similar?

Espera que sí.

Y las expectativas altas son de los mayores temores que enfrenta Yoongi.