🌸 열

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Hyerin se quedó dormida poco después de terminar su segunda película y empezar la tercera. Jungkook detuvo el filme. No estaba de humor como para tragársela él solo, así que cogió a la niña en brazos como princesa y la llevó a su habitación, para luego dejarla en su cama durmiendo.

Bajó nuevamente, sin saber muy bien qué debía hacer ahora. Últimamente sus días se habían convertido en un parque de atracciones, es decir, en un mar de emociones juntas. Repasando todo lo de vitalidad hasta ahora, se quedaba con varios puntos que consideró importantes:

1.Su hermana probablemente sea bisexual, pero todavía es pequeña como para confirmar algo así.

2.Taehyung era gay y le gustaba un chico, pero no quiere decir quien es.

3. Era más reconocido de lo que parecía, pues unas 4 chicas (sin contar a Dahyun) se le acercaron para preguntar por él.

Aunque era siempre la misma historia, no muy digna de ser narrada, así que lo dejaremos estar.

Esos 3 puntos fueron lo que más le impactó en el tiempo que llevaba aquella locura del cambio de género, y en lo que más pensó y pensará cada día.  Se recostó en la alfombra de pelo sintético rojo, llevó su mano izquierda a su rostro tapando sus ojos de la luz que entraba por el ventanal a la derecha del sofá.

Y pensó; pensó en su vida, en cómo había cambiado de un momento a otro, en los descubrimientos que hizo a lo largo de esa semana y de más.

La mínima tranquilidad que consiguió sentir los últimos días había desaparecido. Incluso si nada malo había pasado aún, tenía la sensación de que lo peor estaba por venir. Ese presentimiento llevaba atormentando su ser por unos días, más específicamente, en las noches, ya que no había distracción alguna que lo alejara de aquello.

Quiso convencerse de que era cosa del período, pero esa idea fue rápidamente descartada por el castaño, ya que ese sufrimiento terminó el pasado sábado y ahora que volvía a ser un chico -por un corto tiempo- seguía con el malestar en su mente.

No supo en qué momento se quedó profundamente dormido. Se sentó en la alfombra cuando despertó, y comprobó que la complexión femenina había vuelto. Suspiró, ya no tenía porqué sorprenderse. Buscó su celular y encendió la pantalla de bloqueo para comprobar la hora.

Eran pasadas las 4 de la tarde, Hyerin no daba señales de vida y él no lo hizo hasta ahora, y se dio cuenta de que eran unos holgazanes de cuidado. ¡Eran las 11 cuando habían vuelto!

Se levantó con algo de dolor en los músculos, e hizo una nota mental: No volver a dormir en el suelo.

Iba a subir las escaleras hacia el piso de arriba cuando una nota color lima encima sobre la mesa del comedor llamó su atención. Como un gatito curioso, se acercó a dicho papel, agarrándolo rápidamente. Era una nota de su hermana, avisando de que se había marchado a casa de una compañera de clase y de que tenía ramen en el microondas.

Sonrió ante la ternura que le causaba la pequeña, para después subir a su cuarto con tal de cambiarse la ropa. Se colocó una sudadera de Marvel negra que le iba grande -la utilizaba bastante cuando era chico- y unos vaqueros rasgados por las rodillas del mismo color, completando el outfit con unas botas timberland algo viejas de su madre y un gorro color rojo.

Su intención era salir a dar una vuelta por ahí, para pasar el rato ya que no tenía algo mejor que hacer. Se colocó los audífonos con el reproductor en aleatorio y sus oídos disfrutaron al escuchar la voz de Billie Eilish como comienzo. Subió el volumen y procedió con el paseo.


(...)


— ... y así fue como rompí mis gafas de sol. — Acabó de explicar Namjoon, provocando un estallido de carcajadas en los demás, quienes empezaron a burlarse, siempre con el humor presente.

— Ah, Namjoon-ah, que gracioso. — Jimin se limpió las pequeñas lágrimas que habían caído a causa de la risa.

Taehyung miró al frente mientras soltaba pequeñas carcajadas. Últimamente estaba más pensativo que de costumbre y eso lo habían notado los demás, por lo que decidieron que dar una vuelta por el parque no estaría mal para alegrar al rubio. Y nadie sabe cómo, pero ahí estaban: Sentados en el césped escuchando anécdotas de gafas y demás.

—¿Alguien tiene hambre? — Preguntó Jin de repente con una sonrisa traviesa.

—Sí, tú. —Respondió Yoongi.— Solo preguntas para que vayamos y acabemos pagando por ti.

Jin, dramatizando, se llevó una mano al pecho imitando una pose ofendida. Los demás volvieron a reír contagiando al mayor.

—Hey, ¿esa de ahí no es JungMi? —Señaló Hoseok. Automáticamente todas las miradas se dirigieron a la persona que yacía en el suelo apoyándose en el árbol unos metros más allá. 

—Si mi vista no me falla, sí, es ella. ¿No que se encontraba mal?— Jin alzó una ceja sin dejar de observar a la chica que parecía estar concentrada jugando con la hierba.

—Eso parecía. — Jimin estaba confuso, al igual que todos los presentes. Taehyung no emitió palabra alguna, solo se levantó y caminó en dirección a JungMi, solo que por detrás de los árboles.

—Tae, ¿dónde crees que vas? —Jimin se levantó siguiendo al de cabellos rubios, mientras los otros 4 chicos que no sabían muy bien qué hacer se quedaban sentados en el pasto sin darle mucha importancia a la situación.

—Voy a saludarla, duh. —Contestó simple, sin dejar de caminar. Quedaban escasos metros para llegar a ella, y se detuvieron en seco.

Jimin estaba confuso ante la actitud del más joven, e iban decir algo, pero Taehyung hizo un movimiento indicando que guardaran silencio.

—Es que me aburro, Jihoon-ah. —Dijo Jungkook con un mohín. Al parecer hablaba por teléfono con Jihoon, y para suerte -o desgracia- de los "espías" estaba en manos libres.

-Yah, eres un pesado, los demás tenemos cosas que hacer, ¿sabes? - La voz de Jihoon resonó en los altavoces del aparato. Taehyung estaba algo confuso, ¿había dicho "pesado" en masculino? - ¿Sabes qué puedes hacer? Búscate pareja para el baile.

—Ya sabes a quien quiero de pareja.— Contestó la chica con algo de timidez.— Tenía esperanzas algunas esperanzas pero ahora quiero pegarme un tiro. Esto de ser chica ya no me gusta tanto.

La risa de Jihoon se hizo presente en un segundo.

-Que suerte la tuya, amigo. -Siguió carcajeando. Jungkook iba a protestar ante la burla de su amigo, pero fue interrumpido por el mismo. - Oh oh, mamá me necesita. Tengo que irme, está con el periodo y no quiero que me pegue con la chancla.

—Dímelo a mí. —Rió Jungkook, se despidieron y colgó. La chica suspiró y se levantó, poniéndose de nuevo los auriculares y dirigiéndose a la salida del parque.

Por parte de los amigos, decir que estaban en una especie de shock es poco. Taehyung intentaba procesar la información con dificultad, creando cientos de teorías en su cabeza para explicar lo que sus oídos habían escuchado.

¿Qué estaba pasando?







Capítulo editado.

Empieza el maratón de agradecimiento, ¡espero que les guste!

—ggukiny.

lío de géneros 愛 taeggukDonde viven las historias. Descúbrelo ahora