NUEVE

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Esta vez el segurata de la puerta roncaba en la garita y no tuvieron problema para llegar hasta el ascensor. Cuando las puertas se cerraron Kuroo colocó una mano sobre la espalda de Yamaguchi y le acarició hasta bajarla y tocarle con descaro el culo. Yamaguchi dio un saltito y Kuroo lo atrajo hasta él.

Yamaguchi apoyó las manos sobre su pecho y se puso de puntillas para poder besarle mientras ahora Kuroo le agarraba el trasero con ambas manos.

—La primera vez que subimos juntos en este ascensor ¿imaginabas que esto hubiera podido pasar? —preguntó tímidamente Yamaguchi.

—No lo imaginaba... —contestó Kuroo. Yamaguchi alzó la vista—; lo sabía.

—Y yo sabía que dirías eso.

Iban a volver a comerse las bocas pero las puertas del ascensor que abrieron de nuevo. Se sonrieron y salieron. Notó a Yamaguchi nervioso al extremo y sonrió.

—¿Te tiemblan las piernas, Yamaguchi?

—Claro que no.

—Yo creo que sí... es más vas a tropezar en cualquier momento... —dijo al tiempo que lo agarraba y lo cargaba.

—¿Qué haces? —preguntó riendo.

—Shh... Tada-chan, es muy tarde.

Le llevó en brazos todo el pasillo, tratando de tocar de más mientras Yamaguchi entre risas trataba de evitarlo porque le hacía cosquillas.

Al llegar a la habitación dejó a Yamaguchi frente la puerta, quien no perdió un minuto en sacar las llaves, momento que Kuroo aprovechó para pegar sus caderas contra las de Yamaguchi por detrás con una mano en su cintura.

Se inclinó sobre él y se acercó hasta su oído, pues había descubierto gratamente que eso volvía loco a Yamaguchi.

—Tengo muchísimas ganas de hacértelo...

Yamaguchi levantó una mano hasta el cabello de Kuroo y lo acarició con deseo mientras lo sentía frotarse contra su trasero y besar su cuello.

Antes de terminar haciéndolo en el pasillo abrió la puerta. Kuroo se sacó la chaqueta y le quitó la suya a Yamaguchi como si tuviera prisa. Por su parte, el plan de Yamaguchi era no prender la luz; sería cursi pero lo quería con la luz apagada. No obstante, lo siguiente que hizo Kuroo fue llevar su mano al enchufe y fue ese el momento exacto en que su perfecta noche de sexo universitario se fue al garete.

"Yamaguchi, hoy he quedado con Kenma".

Significaba textualmente: "Yamaguchi, hoy he quedado con Kenma".

No significaba: "Yamaguchi, hoy iré donde Kenma así que puedes llevar a Kuroo a la habitación y follar". Aunque era una interpretación posible. No obstante esta vez había querido decir: "Yamaguchi, hoy he quedado con Kenma: así que jugaremos a videojuegos hasta tarde en la habitación. Si quieres follar con Kuroo id a otro lado". Básicamente, solo que Hinata no usaría la palabra follar.

Así que ahí estaban Kenma y Hinata metidos en la cama juntos y cubiertos con el edredón hasta arriba mientras roncaban desacompasadamente.

Yamaguchi miró a Kuroo, este tenía el semblante disgustado: no le gustaba nada lo que estaba viendo. Caminó hasta ellos y levantó el edredón, para descubrir con alivio que estaban vestidos. Sobre la cama, enredados en las sábanas había un par de consolas.

Ambos cachorros se movieron, extrañando el abrigo, pero sin llegar a despertar.

—Kuroo... —dijo Yamaguchi, pero este solo miraba a esos dos. 

Solo y entre lobos [Kuroo x Yamaguchi]🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora