Homestay [KTHxJJK]

\26/

(No al spoiler)

⊰✩⊱

El castaño suspiró por quinta vez dentro de su cama al no poder conciliar el sueño.

Lisa le había declarado sus sentimientos esa tarde y pensar en como había sido esa escena era lo que no lo dejaba dormir.

No era porque no se sentía del mismo modo, no, todo lo contrario, Jungkook se sentía sumamente emocionado. Empezar una relación con esa chica para él sería algo realmente afortunado, de eso estaba seguro, pues Lisa era una mujer maravillosa. Sin embargo lo que no lo dejaba dormir era la actitud de joven idiota que tomó al quedarse mudo en aquel momento cuando la chica pronunció un "me gustas" y él no pudo corresponder las palabras de ella.

Claro que quería decirle que él también sentía atracción, y que disfrutaba los momentos que pasaban juntos, pero en ese instante simplemente no se dio, ¡No paso!

Eso es lo que le hacía sentirse tan mal por la noche.

Tal vez si le mando un mensaje y le digo que el sentimiento es mutuo...No, no Kook, eso no se dice por mensajes, aparte es de madrugada, ¿Qué carajo estás pensando?

Superado por la ausencia de sueño, se levantó de su cama, despabiló su mente y giró a ver el pequeño reloj que yacía en su mesita de noche.

2:43 a.m. si me preparo un té verde podré descansar aunque sea un poco ¿No?

Pensando aquello, se levantó para salir de la habitación.

Al cabo de 10 minutos, el agua estaba hervida, y el sobrecito con hierbitas relajantes, listo para ser sumergido en dicho líquido. Jungkook vertió el agua en una pequeña tacita de porcelana, la cual casi sale de sus manos al escuchar un repentino sonido proveniente de la entrada de la casa. Era un movimiento de llaves.

Momentos después pudo escuchar como la puerta era abierta y cerrada en menos de un segundo mientras unos pesados pasos se adentraban al interior.

— ¿Señora Kim?—No, la mujer se encontraba en turno de noche en el hospital— ¿Seok Jin hyung?—Lo había visto salir, probablemente era él.

Debatiéndose en ir o no, al final el castaño se encontraba llevando sus pasos hasta la estancia, donde encontró un conocido cuerpo tumbado en el sillón.

—Oh por dios ¡Hyung!

Corrió hasta donde se encontraba el chico de cabellos platas y rostro molido a golpes, pero antes de que pudiera acercarse siquiera, el contrario lo detuvo.

—No te acerques. Lárgate.

Si, aún es Dak.

Al cabo de unos segundos de silencio, el gruñón abrió ligeramente los ojos y se dio cuenta, que tal y como lo había pedido, ese molesto castaño lo había dejado solo.

Suspiró, soltando pequeños y casi inaudibles quejidos gracias al ardor localizado en su rostro y después de acomodar mejor su cuerpo en aquel amplio sillón, volvió a perderse cerrando sus ojos una vez más.

Luego de unos segundos en los cuales intentaba perderse en su propia mente, escuchó unos pequeños ruiditos que decidió ignorar, hasta que escuchó el sonido de un spray antes de sentir un algo húmedo posarse en su rostro.

—¡Te dije que te largaras!—Gruñó el más pálido abriendo sus ojos para ver que carajo pasaba.

Jungkook pareció ignorarlo, pues siguió con lo que hacía.

El castaño había puesto sobre su regazo lo que al parecer era un pequeño botiquin de donde había sacado agua oxigenada en forma de spray y varios algodones en forma de bolitas.